México D.F. Martes 13 de enero de 2004
Legisladores del Partido Laborista piden a Blair
que "cambie su discurso o renuncie"
Matan soldados de EU a 7 iraquíes por presunto
robo de combustible
Líder chiíta reitera exigencia de convocar
a elecciones generales en Irak para julio próximo
REUTERS, AFP Y DPA
Tikrit, 12 de enero. Soldados de Estados Unidos
mataron este lunes a siete iraquíes que supuestamente pretendían
robar combustible de un oleoducto cerca de la localidad de Samarra, mientras
otro soldado estadunidense perdió la vida y dos más resultaron
heridos cuando estalló una bomba al paso de un convoy en el centro
de Bagdad.
Los presuntos ladrones dispararon contra los soldados
para evitar ser capturados y los militares respondieron desde un camión
blindado, indicó el vocero estadunidense Robert Cargie, quien aseguró
que los atacantes tenían 15 camiones cisternas.
A
su vez, "un soldado de la primera división blindada murió
y otros dos resultaron heridos cuando un convoy fue alcanzado por un artefacto
explosivo de fabricación artesanal este lunes en el centro de Bagdad",
declaró un vocero militar estadunidense, quien reportó que
otros dos uniformados fueron heridos.
Con éste, el número de militares estadunidenses
abatidos en Irak asciende a 227 desde que el presidente George W. Bush
declaró el fin de los principales combates el pasado primero de
mayo.
Por otro lado, siete personas resultaron heridas este
lunes durante una manifestación de desempleados iraquíes
en Kut, al sur de Bagdad, informaron fuentes de la policía local.
Mientras, el líder de los chiítas de Irak,
el gran ayatola Ali al Sistani, exigió nuevamente, durante una reunión
con jefes tribales en Samawa, en el sur del país, la celebración
de elecciones generales en julio próximo. "Nosotros exigimos elecciones
generales libres o un proceso de nombramientos", sostuvo el líder
religioso, quien agregó que debido a que el nuevo consejo de gobierno
iraquí será elegido por los consejos municipales im-puestos
por Estados Unidos, el proceso no expresa la voluntad del pueblo iraquí.
No obstante, el consejo de gobierno transitorio rechazó
el llamado de Sistani, al estimar que resultaría muy difícil
organizar comicios, según declaró el vocero Hamid al Kifai.
En este sentido, el administrador civil estadunidense
en Irak, Paul Bremer, alentó al ejecutivo provisorio iraquí
a que avance en la aplicación del plan de transición estadunidense.
"Hemos dicho que es importante aplicar el acuerdo del 15 de noviembre (sobre
la transferencia de los poderes), aprobado por el consejo de gobierno provisional
y sometido a la Organización de Naciones Unidas (ONU), que es el
mejor medio para asegurar un retorno de la soberanía al pueblo iraquí",
declaró Bremer en Bagdad, después de una reunión con
la ministra española de Relaciones Exteriores, Ana Palacio.
Mientras, Palacio y su par iraquí, Hoshiyar Zebari,
pidieron este lunes a la ONU que vuelva al país ocupado y ayude
en la supervisión del traspaso del poder, pero el pedido no concuerda
con el criterio del secretario general del organismo, Kofi Annan, quien
indicó que sigue considerando la situación en materia de
seguridad demasiado precaria, según fuentes de Naciones Unidas.
Dos de los asesores militares de Bush recomendaron que
Washington corte relaciones militares con Francia, debido a la oposición
de París a la guerra en Irak. "Podemos visiblemente limitar nuestra
cooperación con los servicios militares y de inteligencia franceses",
señalaron Richard Perle y David Frum en su nuevo libro An end
to evil (El fin del mal).
Perle y Frum apuntan contra aquellos países que
no colaboran en la "guerra contra el terrorismo" de Bush, especialmente
Arabia Saudita, Rusia y Francia, pero fueron más incisivos sobre
Francia, al grado de calificar de "hostil" a la diplomacia francesa.
Finalmente, la institución militar estadunidense
Jeffey Record criticó la estrategia de guerra en Irak, al calificar
esta intervención de "desvío" inútil de la atención
y los recursos consagrados a la lucha contra la red Al Qaeda, en un artículo
publicado en el sitio de Internet del colegio del ejército estadunidense
de Montgomery, Alabama.
La credibilidad del primer ministro, afectada ante
la ausencia de pruebas del arsenal iraquí
THE INDEPENDENT, AFP Y REUTERS
Londres, 12 de enero. Varios diputados del Partido
Laborista, al que pertenece el primer ministro británico, Tony Blair,
lo instaron a renunciar si no cambia su discurso de "apóyenme o
échenme", tras haber declarado el domingo a la BBC que es probable
que nunca se encuentren las presuntas armas de destrucción masiva
iraquíes, que fueron la principal causa para lanzar la guerra contra
el régimen de Saddam Hussein en marzo pasado.
The
Independent destaca en su edición de este martes que hay consternación
dentro del Partido Laborista por las declaraciones de Blair, y varios diputados
han expresado en privado que su credibilidad y liderazgo podrían
ser cuestionados.
Peter Kilfoye, ex secretario de Defensa, indicó
que la credibilidad del primer ministro "se encuentra seriamente afectada";
Doug Henderson, ex ministro de las fuerzas armadas, señaló
que "se cometió un error de juicio con base en evidencias que no
fueron examinadas con detenimiento y ahora buscan cerrar la puerta", en
referencia a las pruebas que el gobierno británico obtuvo sobre
la peligrosidad del supuesto arsenal iraquí.
A su vez, el veterano laborista, Tam Dalyell agregó:
"Desde mi punto de vista, creo que el Parlamento fue engañado".
Mientras, Michael Howard, líder del Partido Conservador,
acusó a Blair de tener algo "que esconder" al juez Brian Hutton,
quien investiga la muerte del experto en armas David Kelly, quien supuestamente
se suicidó, después que se difundiera que él fue la
fuente de una investigación de la BBC en la que se denunció
que Londres infló un informe sobre las armas iraquíes.
Sin embargo, un vocero de Blair afirmó que Gran
Bretaña y Estados Unidos siempre quisieron encontrar una solución
pacífica para la crisis de Irak, hasta que tomaron la fatídica
decisión de invadir ese país. Según este portavoz,
no identificado por Afp, es "bien sabido" que Washington y Londres tomaron
la decisión de lanzar la ofensiva el 20 de marzo, una vez que se
agotaron todos los recursos diplomáticos. "Creo que nadie debería
dudar que la coalición quiso, en la medida de lo posible,
resolverlo de forma pacífica", agregó.
En tanto, Juan Pablo II, quien se opuso enérgicamente
a la invasión estadunidense a Irak, dijo este lunes en su mensaje
anual sobre el "estado del mundo" que el país árabe, no obstante,
se "libró de un régimen opresivo". En su mensaje a los representantes
diplomáticos en el Vaticano, Karol Wojtyla también instó
a todos los países a renunciar al terrorismo y la violencia.
|