México D.F. Sábado 10 de enero de 2004
Ratifica Buenos Aires que se abstendrá de condenar a La Habana en la ONU
Enojan a Brasil y Argentina acusaciones de funcionarios de EU de cercanía con Cuba
Rechaza Lula pretensión de Washington de discutir el ALCA en la cumbre de Monterrey
AFP
Rio de Janeiro, 9 de enero. Los gobiernos de Brasil y Argentina recibieron con desagrado las declaraciones esta semana de diversos funcionarios del gobierno del presidente estadunidense, George W. Bush, en las cuales fustigan a países latinoamericanos por su "cercanía" con el gobierno de Cuba.
Marco Aurelio García, asesor especial pa-ra asuntos internacionales del presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, dijo al diario O Estado en entrevista que "me parece muy mal que funcionarios de Washington realicen declaraciones de ese tipo, sin pruebas, poco antes de una reunión como la de Monterrey", México.
El asesor de Lula se refería a las declaraciones del lunes pasado del portavoz adjunto del Departamento de Estado estadunidense, Adam Ereli, cuando dijo tener informaciones de que los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y Cuba, Fidel Castro, realizarían un esfuerzo conjunto para cultivar el sentimiento antiestadunidense en la región.
El miércoles pasado el subsecretario de asuntos latinoamericanose estadunidense, Roger Noriega, fue más explícito y advirtió que "aquellos que están desestabilizando gobiernos democráticamente electos, interfiriendo en los asuntos internos del gobierno, están jugando con fuego", tras indicar que "Castro está crecientemente activo".
García reiteró además que Brasil se opone a la discusión del Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA) en la cumbre, mientras Estados Unidos sostiene la posición contraria.
"Ese foro no es ni será adecuado para discutir ese asunto. Por eso Brasil condicionó su participación a la exclusión de ese te-ma", dijo García.
El secretario de Estado estadunidense, Colin Powell, dijo el jueves anterior en Washington que espera que el ALCA sea discutido en la reunión de Monterrey.
Por su parte, el ministro argentino del Interior, Aníbal Fernández, señaló que en su encuentro con su par estadunidense, el presidente Néstor Kirchner puede exhibir "resultados" y "demostrar" que los objetivos ex-puestos en la primera reunión que sostuvieron en Washington en julio pasado "no eran sólo palabras o un racimo de palabras".
Entre ellos, Fernández citó "la política monetaria, cambiaria y fiscal; el superávit fiscal primario con esfuerzo propio y sin un solo centavo de dinero fresco, y la relación con los organismos internacionales".
El funcionario ratificó que Argentina se abstendrá de condenar a Cuba en la Comisión de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas, pero sostuvo que ello "no implica contradecir a nadie, sino que hay visiones diferentes" sobre el tema.
"Más allá de la formas, que sin duda serán amables, Bush hablará de los intereses de su país. La cuestión es que Kirchner haga lo mismo", sostuvo hoy el diario Clarín.
La asesora de Seguridad Nacional del presidente Bush, Condoleezza Rice, afirmó este viernes que Washington quiere "alentar" a Argentina a "adoptar decisiones difíciles" en cuanto a su situación económica y a ceñirse a sus compromisos con el Fondo Monetario Internacional.
|