México D.F. Jueves 8 de enero de 2004
Armando Jiménez
Portero, pero no de vecindad
En 1939 un amigo mío, también apellidado Jiménez (en México hay más Jiménez que perros en Amecameca), muy rico, compró el equipo de futbol de primera división llamado Zacatepec, y le cambió el nombre por el de Marte.
Poco después comprendió que necesitaba quien lo apoyara en la presidencia del club, pues era poco conocedor de ese deporte.
Sabiendo que yo era entendido en tal cuestión, me invitó a apoyarlo. Le expliqué que yo estaba entregado de lleno a la arquitectura deportiva y no podía distraerme en otras cosas.
Me convenció pagándome elevado salario, pero le advertí que solamente lo ayudaría durante dos meses, mientras conseguía quién me sustituyera. Esos dos meses se alargaron medio año más porque me triplicó el sueldo.
Mi función era tratar con el administrador, el director técnico, los presidentes de otros equipos y con la Federación de Futbol, pero no con los jugadores, por lo que nunca supe que allí jugaba como portero mi primo José Alfredo.
|