Rechaza funcionario de la corporación que El Burgués haya sido torturado

Pide la Policía Federal Preventiva a la CNDH investigar detención de Acosta

Se inculpó "sin presión alguna" como homicida de Alejandro Ortiz Martínez, asegura

GUSTAVO CASTILLO GARCIA

La Policía Federal Preventiva (PFP) solicitó a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) su intervención para que efectúe una investigación en torno a la captura de Juan Carlos Acosta Ortiga, El Burgués, quien se inculpó como autor material del asesinato de Alejandro Ortiz Martínez, hermano del gobernador del Banco de México.

Nicolás Suárez Valenzuela, coordinador general de Inteligencia para la Prevención, de la PFP, reconoció en conferencia de prensa que los agentes de esa corporación que participaron en el operativo de captura estaban vestidos de civil.

Sin embargo, rechazó de manera tajante que Acosta Ortiga haya sido objeto de actos de tortura para obligarlo a declarar ante el agente del Ministerio Público Federal el pasado 13 de diciembre, y agregó que de ello dio fe el médico legisla de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México, Jorge Martínez Córdoba.

El funcionario aseguró que el presunto homicida e integrante de una banda de ladrones de automóviles de lujo fue presentado ante el legista mexiquense porque la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR) que se localiza en Ciudad Nezahualcóyotl no cuenta con servicio médico.

Según un supuesto certificado médico, Juan Carlos Acosta Ortiga fue presentado ante el legista "consciente, orientado, con aliento normal, sin huellas de lesiones recientes al exterior"; esto es, que hasta las cuatro de la mañana del 14 de diciembre, cuando concluyó el examen, El Burgués no presentaba muestras de tortura.

Suárez Valenzuela aseguró que Acosta Ortiga fue detenido poco después de las 10 de la noche del sábado en el cruce de las avenidas Siete y Chimalhuacán, municipio de Nezahualcóyotl, estado de México, por agentes de la PFP vestidos de civil, supuestamente tras reconocerlo como una persona que formaba parte de la banda de ladrones de vehículos.

La versión del funcionario es que los elementos de la PFP le solicitaron que se identificara, pero como observaron que portaba un arma y una bolsa con droga, decidieron, en lugar de presentarlo ante las autoridades del Distrito Federal, ponerlo a disposición de la PGR por hallarlo en delito flagrante.

Suárez Valenzuela se negó a explicar si es legal que los elementos de esa corporación realicen detenciones vestidos de civil y sin órdenes de aprehensión, y menos aún quiso contestar si es correcto que se pida a una persona que se identifique, sin portar el uniforme correspondiente.

Durante la conferencia de prensa, el funcionario rechazó una y otra vez las versiones según las cuales Acosta Ortega fue detenido en las inmediaciones del Reclusorio Oriente de la ciudad de México, retenido durante varias horas por la PFP y sometido a actos de tortura para declararse culpable de varios homicidios, entre ellos el de Alejandro Ortiz Martínez.

Por otra parte, el subprocurador regional de Procesos Penales y Amparo de la PGR, Gilberto Higuera Bernal, aseguró que Acosta Ortega declaró ante el Ministerio Público sin huellas de tortura y afirmó que si no se le aplicó el llamado Protocolo de Estambul -dictamen médico por medio del cual se puede determinar si un presunto delincuente sufrió vejaciones-, fue porque El Burgués no lo solicitó.

Higuera Bernal sostuvo que las declaraciones de Acosta Ortega se realizaron sin presión alguna, y que en todo caso bastaría cotejar el examen médico que se le practicó tras su declaración ministerial con el que se le hizo cuando ingresó al penal Neza-Bordo, para verificar si se le causaron lesiones antes de ser encarcelado y puesto a disposición del juez federal en Ciudad Nezahualcóyotl.