Afirma consultor de la organización que tienen facultades para emitir recomendaciones

Cuatro comités de la ONU pueden atender quejas por la guerra sucia

Las violaciones a las garantías básicas durante la guerra sucia no sólo pueden ser atendidas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ya que desde marzo del año pasado el gobierno mexicano reconoció la competencia de cuatro instancias de la Organización de Naciones Unidas (ONU) que pueden tramitar quejas individuales y establecer recomendaciones y llamados a los estados, aseguró Alejandro Valencia Villa, consultor de la oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de Naciones Unidas en Colombia.

Los comités de derechos humanos, contra la tortura y los creados para la eliminación de la discriminación racial y contra las mujeres "pueden emitir informes en los que se establezca responsabilidad a los estados y se dicten recomendaciones en cuanto a investigación, sanción, reparación y protección de las víctimas".

Entrevistado luego de participar en un seminario sobre litigio internacional en materia de derechos humanos, organizado por la Universidad Iberoamericana, agregó que a pesar de que dichos mecanismos de la ONU pueden realizar una función similar a la de la CIDH, "son poco usados en América Latina, debido a la falta de conocimiento sobre los mismos y a que la mayoría de las organizaciones defensoras de los derechos humanos emplean más el sistema interamericano porque tienen sus esperanzas en el sistema regional, que ha hecho un trabajo muy importante. Sin embargo, vale la pena que se conozcan estos mecanismos, que también pueden funcionar y servir a los ciudadanos".

Cuestionado sobre el avance en la defensa de los derechos humanos en América Latina, Valencia Villa reconoció que si bien hay conquistas importantes en materia de derechos civiles y políticos, "aún falta mucho por hacer, sobre todo en el respeto a los derechos económicos, sociales y culturales de la población". Los retos, dijo, se han ampliado debido a que los estados tienen más obligaciones que asumir, a la par que las sociedades han tomado más conciencia de sus derechos y exigen su respeto.

No obstante, indicó que las condiciones de pobreza en la mayoría de los países de la región incrementan la vulnerabilidad de ciertos grupos sociales, como mujeres y niños, "aunque habría que analizar caso por caso para ser más específico, pues cada nación enfrenta una realidad diferente que hace que los retos y desafíos sean mayores". En Colombia, agregó, el sector de mayor preocupación humanitaria son los desplazados, por ser un grupo mayoritario, aunque en el caso de México se podría mencionar a los grupos indígenas, pero a nivel general, insistió, las mujeres y niños están entre los grupos más vulnerables. (LAURA POY SOLANO)