Denuncia intervención de Washington en planes nacionales

Llama experto a desatender dictados demográficos de EU

Las políticas poblaciones de México, cuestión de seguridad nacional para el país vecino, afirma Carlos Welti Chanes

KARINA AVILES

Es indispensable que México promueva iniciativas propias en materia de población ante la aceleración de los procesos de envejecimiento, "que nos pueden llevar a una trampa demográfica en contrapartida al denominado bono demográfico", advirtió el académico del Instituto de Investigaciones Sociales (IIS) de la UNAM, Carlos Welti Chanes

Indicó que México no debe esperar a que las "presiones internacionales" lo obliguen a prestarle atención a los problemas generados por la dinámica demográfica.

El especialista expresó que agentes externos, provenientes principalmente de Estados Unidos, han intervenido en la promoción de una política de población en el país. Lo anterior se debe a que el vecino país ha considerado el elevado crecimiento poblacional de los países en desarrollo como ''factor de riesgo'' a su seguridad nacional.

En el seminario internacional sobre la Ley General de Población, el investigador señaló que el "hecho de que el papel de estos agentes (externos) no haya sido suficientemente reconocido responde a la necesidad de eliminar cualquier imagen que hiciera aparecer las acciones en esta materia como una imposición desde el exterior".

Sin embargo, las políticas en la materia promovidas en Estados Unidos conllevan a un modelo que postula dos relaciones económicas fundamentales: "una fecundidad elevada aumenta la inversión en los sectores no productivos (escuelas, hospitales, seguridad social) en detrimento de los sectores productivos (agricultura, industria)".

Pero aquel país no ha señalado sus verdaderos intereses para convencer a otras naciones y, en cambio, ha utilizado un discurso sobre el derecho de las parejas a decidir el número y espaciamiento de sus hijos. Otro de sus mensajes ha sido que el rápido crecimiento de la población es causa y consecuencia de la pobreza generalizada, indicó.

El experto exhibió el contenido de textos y programas que hablan de lo anterior. Por ejemplo, William Draper, uno de los promotores del plan Marshall, llegó a plantear que "si el crecimiento de la población estaba eliminando cualquier ganancia en una economía y dividiéndola entre más elementos, la única manera de ayudar era disminuir la tasa de crecimiento de la población de manera voluntaria. Le recomendamos al presidente (Dwight Eisenhower) que nuestro país a través de sus programas de ayuda apoyara los programas de población de los países extranjeros".

En esta línea citó los trabajos de Coale y Hoover: "cuando la fertilidad es alta (el) producto total hay que dividirlo entre muchos más consumidores que cuando la fertilidad es baja". También refirió el artículo de Paul Ehrlich publicado en el año 1968 en el que recomendó, entre otras cuestiones, "anunciar que ya no enviaremos alimentos a los países en los que un análisis desapasionado indique que el desequilibrio alimentos-población es desesperanzador (y) anunciar que ya no daremos más ayuda a cualquier país con una población creciente hasta que se país nos convenza de que está haciendo todo en la medida de sus posibilidades para limitar su población".

Pero la premisa del crecimiento de la población como un riesgo para la seguridad nacional de Estados Unidos, reiteró, está documentada en el Memorandum al Consejo de Seguridad Nacional número 200, documento confidencial que fue desclasificado en los ochenta.

Dicho expediente establece que "las consecuencias políticas de los factores poblaciones en los países menos desarrollados... están dañando la estabilidad interna y las relaciones internacionales de países en cuyo desarrollo los Estados Unidos están interesados creando así problemas políticos o inclusive de seguridad nacional para Estados Unidos". En el mismo se hace referencia a México y se advierte que sus números crecientes de población incrementarían la emigración ilegal.

El académico indicó que el análisis documental respecto a la promulgación de la Ley General de Población "ayudará a entender el papel desempeñado por los agentes externos en la elaboración de leyes que involucran muchos otros ámbitos de la vida nacional y no únicamente los asuntos demográficos".