Sin embargo, por ley el multihomicida sólo podrá permanecer 50 años en prisión

Sentencia el juez a 384 años de cárcel a Orlando Magaña Dorantes

Determina su plena responsabilidad en el asesinato de la familia Narezo Loyola

SUSANA GONZALEZ G.

Un año después de que Orlando Magaña Dorantes fue capturado por agentes de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) como presunto responsable del asesinato de los cinco integrantes de la familia Narezo Loyola y de dos trabajadoras domésticas -cometido el 15 de noviembre de 2002 en la colonia Toriello Guerra, delegación Tlalpan-, ayer el juez 61 penal del Reclusorio Oriente, Rogelio Antolín Magos Morales, determinó su plena responsabilidad en el delito de homicidio calificado y lo sentenció a 384 años y cuatro meses de prisión.

La condena contra el multihomicida es superior en 18 años a la solicitada por el Ministerio Público; sin embargo, por ley sólo puede cumplir 50 años de prisión como pena máxima. En cuanto a la reparación del daño moral a los deudos de las víctimas, el juez ordenó que Magaña Dorantes pague 253 mil 203 pesos.

El juez Magos Morales consideró las agravantes de ventaja (cuando se actúa contra alguien que no se hallaba armado) y saña (lo hizo con crueldad o fines depravados) para condenar al homicida de Ricardo José Narezo Benavides y su esposa, Diana Patricia Loyola Bautista; sus tres hijos: Ricardo Jesús, Andrea y Diana, y de las empleadas Margarita Cortés Santiago y Virginia de los Angeles Pacheco Maldonado.

La sentencia, leída ayer después del mediodía a Magaña Dorantes por el secretario de acuerdos del juzgado 61 penal, Francisco Salazar, en representación del juez Magos Morales, también incluye el delito de tentativa de homicidio contra Juan Pablo Quintana, amigo de Ricardo Jesús, sobreviviente de la masacre, cuyo testimonio resultó fundamental para que el Ministerio Público acreditara las acusaciones contra Magaña Dorantes, además de varias pruebas, como ropa de éste con manchas de sangre de las víctimas.

Sin embargo, el proceso judicial contra Magaña Dorantes aún no termina. El subprocurador de Procesos de la PGJDF, Rosendo Gómez Piedra, recordó que hay un desglose de la averiguación previa por robo, ya que de la casa de la familia Narezo Loyola fueron extraídos varios objetos, entre ellos un automóvil, un teléfono celular y tarjetas de crédito, con las que se hicieron retiros de dinero.

Además, las autoridades investigan si Magaña Dorantes asesinó también a su supuesto cómplice Jorge Esteva o Esteban, cuya identidad no se ha podido corroborar, pero el hallazgo de un cadáver calcinado, en el municipio mexiquense de Amecameca, cuya reconstrucción antropométrica corresponde a su retrato hablado, motivó la presunción de que el presunto cómplice corriera la misma suerte de la familia asesinada.

Ningún familiar de Magaña Dorantes acudió ayer al juzgado y el acusado debió escuchar la sentencia sólo con la presencia de su abogado, Roberto Rivera. Por la gravedad del delito no alcanza libertad bajo fianza y prácticamente ya cumplió un año en prisión, luego de haber sido capturado por agentes de la PGJDF a finales de noviembre del año pasado. Ha permanecido en una celda del Reclusorio Oriente, aislado del resto de la población penitenciaria y bajo permanente vigilancia de custodios y con videocámaras.

Su abogado defensor anunció que apelará de la sentencia. Insistió en que las pruebas contra su cliente carecen de contundencia y hay contradicciones y ambigüedades en las declaraciones del testigo. Tiene cinco días hábiles para interponer el recurso. Por su parte, el Ministerio Público también se inconformó, por el monto determinado para la reparación del daño.