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México D.F. Domingo 16 de noviembre de 2003
BAJO LA LUPA
Alfredo Jalife-Rahme
ƑUnión de Francia y Alemania?
El deterioro de la situación en Irak, el motivo
SI USTED RESPETABLE lector(a) ve Fox News, el summun de la desinformación totalitaria, pues jamás se va a enterar de lo que sucede más allá del océano Atlántico que afecte los intereses sectarios de los súper halcones del equipo Bush que están siendo desplumados en Irak y en Afganistán. Una noticia que nulamente se difunde por los poderosos cuan sesgados multimedia de Estados Unidos (y sus caricaturas mexicanas) versa justamente sobre los recientes acercamientos entre las potencias euroasiáticas para contrarrestar el belicismo galopante del equipo Bush que pretendía adueñarse solo del destino del género humano.
SIN MUCHO RUIDO y con sumo cuidado, Le Monde (12.11.03) asentó que "París y Berlín reflexionan en torno a una 'unión franco-alemana'". Sin convencer demasiado, el rotativo francés centra el motivo de ello en la "expansión a 25 países de la Unión Europea" (UE), que podría caer en la parálisis o diluir la preponderancia franco-alemana. La "reflexión" de la "unificación" es de corte estratégica porque comporta la columna vertebral de Francia y Alemania: política exterior, defensa, políticas socioeconómicas y educación. Le Monde no soslaya un primer obstáculo: "el control democrático de tales políticas". Desde el 4 de noviembre pasado el talentoso Dominique de Villepin, quien tuvo la razón histórica en referencia a la postura de Francia en Irak frente a la invasión anglo-sajona, había lanzado la idea de la unión con Alemania durante un encuentro en el club de reflexión Tiempo Real y que consideró como "una apuesta histórica que no podemos perder". Después de agregar la reciente "cumbre sobre las regiones" entre el primer ministro francés Jean-Pierre Raffarin y el canciller alemán Gerhard Schroeder, el periódico galo afirma que el acercamiento entre quienes fueran enemigos permanentes a finales del siglo XIX y durante dos guerras mundiales en el siglo XX, está encaminado a aplacar a España y a Polonia, que han puesto miles de trabas al proyecto de la nueva Constitución europea. Como que suena exagerado que por dos medianos países europeos católicos París y Berlín inviertan demasiado en su "apuesta histórica" que se debe, primodialmente, a la fractura en Irak, que pone en segundo término Le Monde, que trae a colación el desplegado aparecido en The Wall Street Journal el 30 de enero del presente año, en el que ocho países europeos (entre ellos Gran Bretaña, España y Polonia) sostuvieron la tesis bélica del equipo Bush sobre Irak. šVaya ridículo que hicieron, visto en retrospectiva!
LLAMA LA ATENCION la suma delicadeza con la que Le Monde (el portavoz oficioso de la cancillería francesa) trata con mucha frialdad el tema de la unión franco-alemana, que refiere como "vago", sin dejar de resaltar el "debate vacilante" en Alemania donde se busca ante todo "esclarecer sus lazos con Washington". Por lo pronto, para lanzar las señales simbólicas de rigor, y más rápido que los comentarios timoratos de los periódicos europeos, el canciller Schroeder se hizo representar por el presidente Chirac en la reunión del Consejo Europeo en Bruselas en octubre pasado. Más entusiasta, Pascal Lamy, quien se ha vuelto una pesadilla para los súper halcones del equipo Bush, propuso la unificación inmediata de los servicios diplomáticos y la rotación entre Francia y Alemania de la silla permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU. No es mala idea.
MAS CRUDO Y rudo, como era de esperarse, The Daily Telegraph (13.11.03), cuyo directivo es Richard Perle, el legendario súper halcón israelí-estadunidense, sostiene que "Francia y Alemania buscan la unión para desafiar a Estados Unidos (EU)", además de "prevalecer con su influencia en la UE". El belicoso rotativo británico aduce que mediante el proyecto de unificación "Francia presiona a Gran Bretaña para que diluya su relación trasatlántica en favor de Europa". Con razón salió disparado como tapón de champaña Baby Bush a visitar al atribulado primer ministro Tony Blair, pese al repudio de la maravillosa sociedad civil británica, conmocionada tanto por las consecuencias de la debacle de la aventura iraquí como por los escándalos truculentos de una monarquía decadente a punto de extinguirse. Muchas cosas profundas -desde el golpe tramado por lord Jacob Rothschild (quien instaló a uno de sus seguidores en la jefatura del Partido Conservador), pasando por el retorno al Partido Laborista de Ken Livingstone (el popular alcalde de Londres), hasta las filtraciones de ultratumba de Lady Di que desestabilizaron al de por sí inestable príncipe Carlos- han sucedido en Gran Bretaña en fechas recientes que reflejan su esquizofrenia geopolítica: ser un relevante socio europeo, lo cual, a nuestro juicio, le conviene más que ser un trasatlántico irrelevante.
EN VISPERAS DE la precipitada visita de Baby Bush a Londres, nada menos que Sydney Blumenthal, quien fuera un destacado asesor del ex presidente Bill Clinton, comenta en The Guardian (14.11.03) que el verdadero "socio especial" de Bush no es Blair, sino Sharon -lo cual es más que cierto. El colmo: Baby Bush, ahora disfrazado de "pacifista" (sólo le falta inventar que es un ambientalista redivivo, además de mexicanófilo Provida) pretende engañar a los muy bien informados británicos y en sus entrevistas a los medios londinenses ha adoptado de dientes para afuera la tesis de Blair sobre un abordaje más suave respecto al proyecto nuclear de Irán. Sucede que la "sharonización" a ultranza de la política exterior de EU lo está llevando a un aislamiento internacional, en especial en Eurasia, donde sus moradores en recientes sondeos colocan a Israel y EU como las "peores amenazas para la paz mundial", mucho antes y/o a la par que Corea del Norte e Irán. No hay vuelta de hoja: un lobo, aún disfrazado, sigue siendo biológicamente un lobo.
EL ACERCAMIENTO franco-alemán con Rusia y China ha sido fenomenal y ha refractado la fractura de Irak al seno mismo de Gran Bretaña, donde se juega tras bambalinas una nada descabellada fractura trasatlántica. Cada quien a su nivel, pero tanto Irak, el invadido, como Gran Bretaña, el invasor en condominio, se juegan su destino para el siglo XXI. Así es esto de la geopolítica.
EL RECIENTE REPORTE de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), un apéndice de la ONU, sobre el programa nuclear iraní, sostiene que "no se halló ninguna evidencia" sobre la construcción de una bomba atómica chiíta, lo que conlleva el riesgo de volver a confrontar a EU y a la UE (Reuters 13.11.03). De inmediato los súper halcones del equipo Bush soltaron a su mejor especimen: John Bolton, subsecretario de Estado encargado de la agenda nuclear, quien colaboró en el fraude de la elección bananera en Florida, para fustigar el reporte de la AIEA. Al ministro de Defensa israelí, Shaul Mofaz, no le importan los hallazgos de la AIEA ni el abordaje diplomático de Francia, Alemania y Gran Bretaña, y, durante una visita a EU, declaró que la nuclearización de Irán "alcanzaría el punto de no retorno en un año" (Haaretz 13.11.03). Mofaz no dijo ni pío sobre el programa nuclear clandestino de Israel (y su dotación de por lo menos 300 bombas atómicas) en el reactor de Dimona, que nunca ha sido motivo de la vigilancia de la AIEA ni de nadie. ƑNo sería más sensata la abolición integral para el Medio Oriente de todo género y proyecto de armas de destrucción masiva sin excepciones ni decepciones?
MAS INSULTA RICHARD Perle a los alemanes y a los franceses, como acaba de suceder en el foro Bundeswehr, y más los incita a unirse entre sí. Al unísono, Thomas Friedmanel, destacado columnista israelí-estadunidense, desde The New York Times incitó a una "guerra contra Francia" que no se quedara en el simple boicot contra las papas fritas (šde lo que se pierden!) La agencia de noticias alemana Deutsche Welle (14.11.03) infiere que "el amasiato entre Alemania y Francia puede llegar a ser más serio" para pasar del noviazgo al matrimonio, y deja entrever que "tienen más jugadas guardadas". ƑCuáles serán, más de las visibles y previsibles?
FRANCIA Y ALEMANIA, superlativas potencias nuclear y geoeconómica, respectivamente, en Europa, están a punto de crear un eje poderoso que, sumado a Rusia (el equivalente paritario nuclear de EU), podrían requilibrar la geoestrategia planetaria donde imperó desde 1991 el unilateralismo neoimperial, sumados Gran Bretaña e Israel, por medio del disfraz financista de la globalización.
MAS ALLA DE la colisión de la UE contra EU por la elevación unilateral de las tarifas al acero por parte del equipo Bush contra las reglas de la Organización Mundial de Comercio, que le propinó su sanción merecida, desde la fractura de Irak Alemania se ha sacudido el tabú de más de medio siglo de seguir ciegamente los caprichos de Washington. Esto se acabó. Nada menos que el ministro de Defensa alemán, Peter Struck, en medio del empantanamiento del equipo Bush en Irak, puso en tela de juicio la "legalidad de la invasión encabezada por EU", y agregó sin tapujos que "el unilateralismo estadunidense ponía en peligro el principio de consenso en la OTAN" (Deutsche Welle 4.11.03). ƑTodavía existe la OTAN? No viene al caso hacer leña del arbol caído, pero no es gratuito que el polaco-canadiense-estadunidense Zbigniew Brzezinski haya operado un giro de 180 grados desde que escribió su libro tóxico hace siete años El gran tablero de ajedrez mundial, cuyo subtítulo es aún más sugerente: La supremacía de EU y sus imperativos geoestratégicos.
CON TODO Y su innegable glamour, en su calidad de asesor de seguridad nacional del ex presidente Carter, director de la Trilateral y miembro prominente del Centro Internacional de Estudios Estratégicos con sede en Washington (CSIS, por sus siglas en inglés), comete serios errores conceptuales, pero no pierde la brújula al entender que "más allá de 2010" el "núcleo fundamental de la seguridad europea" lo constituye Francia, Alemania, Polonia (aquí lo venció su origen étnico) y Ucrania. Polonia se equivocó al lanzarse a los brazos del eje EU-Gran Betaña-Israel: no solamente negó las lecciones de su trágica historia, sino que puede ser atrapada por el fuego cruzado del eje Francia-Alemania y su alianza con Rusia. El caso de Ucrania, una de las "fracturas tectónicas" de la geopolitica, es más sensible y lo está perdiendo EU, al tiempo que lo recupera Rusia. Entre lo más relevante de los enunciados de Brzezinski figura el traslape de "las órbitas de intereses especiales y geopolíticos franceses y alemanes". En este tenor, en un artículo reciente en The Washington Post, Brzezinski constata con lucidez "la pérdida de credibilidad internacional de EU" en la fase del equipo Bush: desde el 11 de septiembre "nunca EU ha sido más poderoso, pero nunca ha estado más aislado políticamente", y resalta que en las dos recientes votaciones en la ONU sobre Medio Oriente "EU fue aislado" y contó solamente con el apoyo de "Israel, las islas Marshall y Micronesia frente al resto del mundo". A su juicio, los errores del equipo Bush solamente podrán ser reparados con el "abandono del unilateralismo y de la guerra preventiva", lo cual suena muy ilusorio porque, de entrada, la dupla Wolfowitz-Perle y sus acólitos, Cheney y Rumsfeld (Baby Bush más que presidente es un pésimo maestro de ceremonias antiprotocolarias), desde su postura omnisciente, piensan que los demás están equivocados. Bien acotaron las clásicas tragedias griegas que "cuando los dioses (del Olimpo) desean acabar con alguien, empiezan por hacerle perder el juicio", lo cual está siendo aprovechado estupendamente por el eje en ciernes de Francia-Alemania-Rusia, y al que pudiera adherirse China (y hasta India). Todavía falta mucho por ver.
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