México D.F. Viernes 14 de noviembre de 2003
El IVA a comida y fármacos, alternativa
para mejorar la calidad de vida, opinan
Montiel y Núñez apoyan la reforma fiscal
Los gobernadores del estado de México, Arturo Montiel
Rojas, y de Hidalgo, Manuel Angel Núñez Soto, ambos militantes
del PRI, respaldaron la reforma fiscal foxista como la vía para
obtener una mayor recaudación.
Sin
embargo, Leonardo Rodríguez Alcaine, presidente del Congreso del
Trabajo (CT), aseveró que en el tricolor no hay una postura
definitiva al respecto: "En este momento estamos totalmente en contra del
impuesto al valor agregado (IVA) en alimentos y medicinas".
El también dirigente de la Confederación
de Trabajadores de México señaló que el próximo
lunes al mediodía los priístas se reunirán para analizar
la propuesta del gobierno federal, por lo que cualquier versión
difundida antes de ese día "son sólo cosas de la prensa".
Pese a las promesas de campaña contra el IVA en
comida y fármacos, Montiel Rojas y Núñez Soto señalaron
por su parte que el gravamen en cuestión es la alternativa para
otorgar a los ciudadanos "una mejor calidad de vida".
En entrevistas por separado en la Universidad Iberoamericana,
donde participaron en un coloquio internacional, afirmaron que los mexicanos
deben respaldar las reformas estructurales. Los costos políticos
"se deben valorar desde el punto de vista de los beneficios que traerán
para los ciudadanos".
Montiel Rojas reconoció que si bien el tema del
no
al IVA formó parte de su campaña, e incluso es una postura
del PRI, la discusión entre los legisladores "debe beneficiar a
México", y consideró que las reformas son ejemplo de políticas
públicas "indispensables", pese a los "costos parlamentarios" de
su adopción.
Núñez Soto expuso que se deben llevar a
cabo las reformas en función de "la calidad de vida que requiere
la ciudadanía, y por el hecho de que el mundo no nos está
esperando; no podemos seguir perdiendo competitividad"; rechazó
que entre los miembros de su partido exista "un choque de trenes", porque
hay "gran pluralidad".
En tanto, Carlos Aguiar, vicepresidente del Consejo del
Episcopado Latinoamericano y obispo de Texcoco, señaló que
México no corre peligro de un conflicto social en caso de que las
reformas estructurales "se atoren o se retrasen". Sin embargo, dijo, en
tal situación el país tendría "efectos negativos"
en el desarrollo.
En conferencia de prensa, en el contexto de la 76 asamblea
plenaria del Episcopado mexicano, el prelado pidió que no se confundan
las reformas que
necesita el país con el concepto de privatizaciones; "son dos cosas
distintas, las reformas son ajustes necesarios en determinadas leyes".
Por su parte, Agustín Rodríguez, dirigente
del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma
de México (UNAM), opinó que la propuesta presupuestal del
gobierno federal para la máxima casa de estudios demuestra que se
mantiene una tendencia hacia una economía de mercado, en la que
la educación pública queda rezagada.
Se confirma, lamentó, que para el Ejecutivo federal
la UNAM no es prioridad. Indicó que la universidad requiere de un
incremento de 4 mil millones de pesos para cumplir con sus tareas sustantivas.
Rodríguez Alcaine, a su vez, expuso que el aumento
a los precios de productos básicos, como leche, huevo y pollo, "viene
a complicar la posible reforma fiscal, porque el gobierno permite el abuso
y venganza de los comerciantes" antes de que se fijen los impuestos.
No obstante, calificó de "demagógicas" las
acciones de protesta para el próximo 27 de noviembre, convocadas
por la Unión Nacional de Trabajadores y el Frente Sindical Mexicano,
en repudio a las reformas foxistas, en especial en el sector eléctrico.
En otro tema, informó que el CT solicitará un aumento de
10 por ciento a los salarios mínimos, en el proceso anual que se
iniciará el próximo mes.
JOSE GALAN, FABIOLA MARTINEZ, JOSE ANTONIO
ROMAN Y LAURA POY
|