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México D.F. Domingo 9 de noviembre de 2003
Gloria Muñoz espera que 20 y 10 despierte
la rebeldía y la indignación del lector
''La invitación, que todos nos la rajemos''
MONICA MATEOS-VEGA
A los tres días de que se iniciara la insurrección
indígena en Chiapas, la periodista Gloria Muñoz Ramírez
recibió un telegrama en su casa de la ciudad de México. Se
trataba de un colega que ya se encontraba en San Cristóbal de las
Casas. El mensaje decía: "¿qué haces allá todavía?
Hay que contar esta historia. Vente".
Gloria llegó a Chiapas el 4 de enero de 1994, enviada
por el semanario Punto. Se trataba de su primer viaje al estado.
A las pocas horas de su arribo, observó los cadáveres hallados
en el mercado de Ocosingo.
Las escenas, las noticias, las vivencias se sucedieron
demasiado rápido. Sabía que no podía irse de Chiapas,
que no debía dejar de narrar al exterior lo que sucedía en
aquella guerra. Así pasaron dos semanas, seis meses, tres años,
con retornos a la ciudad de México cada vez más breves. Sus
trabajos se difundieron en la agencia de noticias alemana Dpa, en el periódico
estadunidense La Opinión y en La Jornada. Las frecuentes
incursiones de la periodista en las comunidades indígenas rebeldes
la hizo, por fin, tomar la decisión de quedarse a vivir en ellas,
"para aprender, para escuchar, para quitarme muchas ataduras", recuerda.
Así,
en 1997 apaga su grabadora, hace a un lado su libreta de apuntes, concluye
sus compromisos laborales con la capital, y acepta la invitación
de involucrarse de lleno en la dinámica de las comunidades, incluyendo
el trabajo hombro con hombro o "correr cuando ellos corrieran". Luego de
seis años, Gloria Muñoz Ramírez está de regreso
en la ciudad con un libro bajo el brazo: 20 y 10. El fuego y la palabra,
síntesis de lo que es y ha sido el movimiento zapatista desde su
fundación, en 1983, y que va dedicado principalmente "a los jóvenes,
ávidos de información, que eran niños cuando se inició
la insurrección''.
El volumen, coeditado por La Jornada y la revista
Rebeldía, incluye testimonios de los pobladores que hace
dos décadas se convirtieron en zapatistas, así como de integrantes
del EZLN. Ellos hablan por primera vez de una de las figuras más
importantes del movimiento: el subcomandante insurgente Pedro, segundo
después de Marcos, muerto el primero de enero de 1994.
También hay una bitácora de los 10 años
recientes, contada desde las comunidades indígenas, y una extensa
entrevista con Marcos, en la que señala: ''si pudiera regresar
el tiempo, lo que no volveríamos a hacer es permitir, y promover,
que se haya sobredimensionado la figura de Marcos''.
En entrevista con La Jornada, la autora de 20
y 10 explica: ''en el libro narro que las comunidades indígenas
son el eje de todo el movimiento zapatista, contrario a lo que muchos piensan.
Atrás de ellos están ellos, con una organización,
una rebeldía y una dignidad que hace falta conocer y aprender.
''Trato de explicar cómo miles de personas mantuvieron
el secreto de la existencia del EZLN durante 10 años, porque no
hay que olvidar que a las siete ciudades tomadas el primero de enero de
1994 acudieron más de 5 mil combatientes. Son ejemplos de valentía
y entereza que sirven para comprender no sólo el periodo de crecimiento
del movimiento en las comunidades, sino para entender qué es lo
que pasa ahora en las juntas de Buen Gobierno y en los caracoles.
''En particular, quiero que cuando alguien lea el libro
sepa que mientras hace eso, en las comunidades rebeldes hay decenas de
personas, cientos de pueblos, que se la están 'rajando' tratando
de construir un mundo mejor, ya sea evitando que un camión de carga
saque maderas preciosas producto de la tala clandestina o poniéndose
de acuerdo para que una comunidad priísta no invada un predio recuperado
por los zapatistas, u organizando el tránsito por las comunidades
rebeldes con base en lo establecido en las juntas de Buen Gobierno.
''Es decir, hay tantas cosas que pasan en Chiapas que
este libro es para que lo veamos, para que sea un espejo de nuestra rebeldía,
nuestra indignación, nuestra propia lucha. Porque esta historia
es de todos. Para que todos 'nos la rajemos' para ser mejores."
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