México D.F. Domingo 9 de noviembre de 2003
Señala que es necesaria una reforma fiscal
de fondo
Fuentes de financiamiento, problema del sector eléctrico,
afirma especialista
ISRAEL RODRIGUEZ
La apertura del sector eléctrico debe ser gradual,
pero con el fortalecimiento de la Comisión Federal de Electricidad
(CFE) y Luz y Fuerza del Centro (LFC), y una mejor regulación del
sector, consideró en entrevista Manuel Martínez, director
del Centro de Investigación en Energía de la Universidad
Nacional Autónoma de México (UNAM).
Señaló que el gran problema en el sector
energético radica en las fuentes de financiamiento, porque no se
les puede aligerar su carga tributaria mientras el gobierno siga dependiendo
de los ingresos que generan Petróleos Mexicanos (Pemex) y la CFE.
Por ello, dijo, es necesaria una reforma fiscal de fondo.
Aseguró
que los proyectos de infraestructura financiada con impacto diferido en
el gasto (Pidiregas) ya están agotados. "Los Pidiregas fueron una
solución momentánea, algo que se creó para enfrentar
los problemas de financiamiento inmediatos a uno, dos y hasta tres años,
pero no estaban diseñados para un lapso mayor".
El investigador universitario manifestó que las
soluciones en el sector energético deben ser integrales y lograr
una sinergia entre Pemex y CFE. La reforma eléctrica debe ser paulatina
para avanzar en una solución global, insistió.
Las dos empresas estatales (CFE y Pemex) deben estar integradas
y ahí es cuando la Secretaría de Energía debe tomar
la batuta para establecer políticas nacionales o de Estado de largo
plazo, claras y transparentes.
Manuel Martínez enfatizó que la reforma
energética debe ser paralela a la reforma fiscal para avanzar y
consolidar al sector. Actualmente 33 por ciento del presupuesto del gobierno
depende de los ingresos petroleros, y Pemex paga alrededor de 120 por ciento
de sus utilidades, situación que es insostenible para cualquier
empresa.
Hay que realizar cambios constitucionales para otorgarle
certidumbre jurídica a las figuras existentes de autoabastecimiento,
cogeneración y productores independientes de energía. Los
cambios, dijo, deben incluir a la Comisión Reguladora de Energía
para que permitan tener un marco regulatorio eficaz, fuerte y eficiente
con el objetivo de controlar a los productores privados en beneficio del
país.
"Una realidad es que sí se requiere inversión
privada, pero que ese capital de riesgo que en su mayoría va a ser
trasnacional tenga un margen de ganancia aceptable y muy bien regulado.
La negociación debe ser muy seria, para que la tecnología
que traigan las empresas extranjeras sea canalizada a la CFE y LFC en términos
muy claros, serios", dijo.
Además debe haber una mayor vinculación
de las empresas estatales con los institutos, las universidades nacionales
y del extranjero para conseguir innovaciones tecnológicas, concluyó
el investigador de la UNAM.
|