CIUDAD PERDIDA

Miguel Angel Velázquez

El IFE en manos de Lutero

LA NOCHE del martes pasado, en la Cámara de Diputados el grupo parlamentario del PRD hizo un análisis de su actuación en la sesión en la que se "eligió" al nuevo presidente del IFE y los consejeros del órgano electoral. Análisis que casi terminó en acto de contrición.

ALLI SE hallaban algunos de los ex diputados por el DF que ahora en "ligas mayores" deben asumir posturas que en algunos momentos podrían causar disensos en el interior de la fracción.

Y ES que no era cosa fácil analizar el asunto. Por el contrario, mientras algunos diputados sostenían que era imposible que el PRD cediera a las imposiciones priístas y que los acuerdos en ese sentido habrían sido peores que estar hoy sin representación en el IFE, otros pensaban de manera diferente y pedían explicaciones a su líder, Pablo Gómez.

QUIENES NO estaban de acuerdo con Gómez situaron el asunto en lo que podrá significar para las aspiraciones perredistas en 2006 el control político total de la institución por el PRI y las alianzas que se entablarán entre PAN y PRI para aquellas fechas.

EN LENGUAJE por demás dialéctico, Manuel Camacho Solís advertía que cuando se tenga que ser duro se deberá ser duro, y cuando haya que flexibilizar posturas también habrá que hacerlo, porque así es la política.

Y AUNQUE no se llegó a tener un panorama tan claro con Camacho, los diputados perredistas, a fin de cuentas, se quedaron con la idea de que el PRD no debe, por ninguna razón, ser comparsa de las maquinaciones de Elba Esther Gordillo.

ES MAS, se dijo que si para tener un lugar entre los consejeros electorales se hubiese tenido que aceptar al presidente actual del IFE, el precio a pagar frente al electorado habría sido mucho mayor que los beneficios que se podrían haber alcanzado.

POR DECIRLO de otra forma, los perredistas optaron por no ser cómplices del crimen y posterior entierro del organismo garante de la democracia liberal representativa que funcionó en los últimos años y que ya ni para eso servirá.

DESDE LUEGO la reflexión fue importante porque hacer autocrítica en los partidos políticos es una práctica poco frecuente, pero no por ello deja de ser sana.

LO CURIOSO es ver cómo un partido político llega a repensar su actuación a partir de un fenómeno que no debería existir. Para ser más explícito, si el IFE hubiera sido alguna vez un organismo despojado de intereses partidistas, como se pretende y se pretendió, por qué tendrían que examinarse las decisiones tomadas si a fin de cuentas los ciudadanos que participen en el Consejo General del IFE sólo podrían actuar a partir de la imparcialidad que les diera su no-pertenencia a una institución política determinada.

PERO COMO en muchas otras actividades de la política, todo o casi todo fue una falacia que hizo creer a los ciudadanos que con el solo respeto al voto las cosas cambiarían.

BASTE REVISAR lo que pasó en ese organismo al que ahora se le quiere quemar incienso y que en el descaro total hoy sabemos que no servirá para nada. Bueno, recordemos:

DEL IFE ya ciudadanizado salió un panista que se convirtió en secretario de Gobernación, y hay en la Cámara de Diputados dos personajes sin color político: uno panista, Juan Molinar Horcasitas, y otro perredista, Emilio Zebadúa, por mencionar algunos, quienes gozan, como dijimos, de una curul.

ENTONCES LO que ha quedado al descubierto es una mentira más de este tipo de gobiernos que desde hace rato manipula el PRI y que ahora, con pleno descaro, encabeza. Por eso el quehacer del PRD de ahora en adelante, y ya libre de compromisos, será cambiar el triste sino que el neoliberalismo impuso a IFE.

ciudadperdida 

ciudadperdida_-[email protected] [email protected]