Reporta pérdidas por la aplicación del alcoholímetro

Pide la Canirac conmutar la pena de cárcel por multas a conductores ebrios

LAURA GOMEZ FLORES

El presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), Rafael de Jesús Saavedra, propuso modificar el Reglamento de Tránsito para evitar que los conductores en estado de ebriedad sean detenidos 12 horas de manera inconmutable y, en su lugar, se les aplique una fuerte multa y su vehículo sea conducido al corralón.

Esto, para evitar una caída mayor en sus ventas, que a la fecha suma 9 por ciento. No obstante, indicó que la aplicación del programa Conduce sin alcohol ha dado buenos resultados en cuanto a reducir el número de accidentes automovilísticos, y "estamos a favor de éste, con algunas alternativas para nuestros comensales, como ofrecerles servicio de taxi para que puedan retirarse de manera segura", y se analiza la posibilidad de que los valet parking puedan fungir como choferes auxiliares cuando un cliente no esté en condiciones de conducir.

Además se está a la espera de la respuesta de las autoridades sobre la posibilidad de imponer un límite de velocidad por las noches, y ahora enviarán a la Secretaría de Seguridad Pública esta propuesta de conmutar la detención de los conductores por una multa. El representante de 9 mil 500 restaurantes de la ciudad de México consideró que el jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, cuenta con facultades para modificar el Reglamento de Tránsito para incrementar las multas.

En conferencia de prensa, explicó que con base en un muestreo realizado entre 65 negocios en zonas de alta densidad de restaurantes, se detectó una caída en sus ventas de entre 4.5 y 9 por ciento, por lo cual "hemos exhortado a las autoridades a trabajar juntos y no poner en riesgo la vida nocturna de la ciudad".

Indicó que el programa Págale el taxi a tu cliente, al cual se han sumado 55 restaurantes, "ha creado un ambiente de tranquilidad", y se espera que a finales de año se hayan sumado mil 500 establecimientos. Reiteró que "no estamos en contra de los operativos con alcoholímetro, pero pretenden evitar que se cometan excesos y el programa sea preventivo y de seguridad, no represivo, "como sería detener a los conductores por 12 horas, alterando su vida familiar, laboral y personal, cuando podemos aplicar una multa fuerte y obligarlos a cubrir la sanción correspondiente".

Dijo estar a la espera de la respuesta de las autoridades y "lograr de manera conjunta que el número de accidentes se reduzca, pero no se cierren fuentes de empleo".