México D.F. Viernes 22 de agosto de 2003
Pedro Meyer celebra los 10 años de ZoneZero
con muestra de 8 mil imágenes y coloquio
''En la foto digital se requiere, más que suerte,
imaginación''
Con las nuevas tecnologías "no se puede estar
seguro de que el fotógrafo es testigo del momento decisivo'',
opina El artista augura la desaparición de métodos tradicionales,
como el cuarto oscuro
CARLOS PAUL
En estos tiempos digitales el instante fotográfico
se ha transformado para siempre, pues con la utilización de las
nuevas tecnologías "no se puede estar seguro de que el fotógrafo
es testigo de lo que por mucho tiempo fue considerado el momento decisivo.
Es una fortuna que ya no dependamos de la suerte sino de nuestra imaginación'',
sostiene el fotógrafo Pedro Meyer, editor de ZoneZero, sitio
en Internet dedicado a la fotografía que celebra su décimo
aniversario.
Con
motivo del acontecimiento, se organizó una muestra con más
de 8 mil imágenes de casi 800 colaboradores del mundo y un coloquio
titulado Diez años. De lo analógico a lo digital: Zonezero,
en el que participarán 20 especialistas de Canadá, Estados
Unidos, España, México, Rusia, Inglaterra y Bangladesh.
Existe una gran confusión entre los creadores respecto
a que la fotografía digital representa una transformación
de estilo, dice Meyer; sin embargo, éste ''seguirá siendo
lo que ha sido, a lo cual seguramente se le añadirán otros
nuevos en los que se incluirá, por ejemplo, el sonido, lo que permitirá
distribuir y contar de otra manera las historias, ya sean documentales
o autobiográficas.
''La fotografía llamada tradicional no va a desaparecer;
lo que va a desaparecer (y no necesariamente a cero) son los métodos
tradicionales, en el sentido de un proceso químico.
''Históricamente las opciones para tomar una fotografía
antes del disparo eran limitadas. Ahora se pueden ampliar o cambiar después
del disparo. Con la computadora puedes ajustar desde la iluminación
hasta la supresión de elementos. Esto tiene su importancia porque
se modifica por completo la concepción misma de la fotografía.
Ya no se depende tanto de la suerte, sino de nuestra imaginación.''
Entre más herramientas se tienen, más se
enriquecen las posibilidades, abunda Meyer. ''Entre más fácil
sea el proceso para generar una imagen, más nos podremos concentrar
en lo que queremos decir, pues el auténtico artista no es el que
sabe ajustar una perilla, sino el que tiene algo que contar.
''Estas herramientas tecnológicas suprimen rutinas
complicadas y nos dan opciones creativas mucho más interesantes.
Mi trabajo creativo no se hace más creativo porque me cueste más
trabajo. Los que hablan en esos términos son los que ya lograron
dominar una técnica y la toman como pequeño coto de poder
que no quieren revelar. Pero cuando se dan cuenta de que los demás
pueden hacer lo mismo, se inconforman ante eso.''
Para Meyer -quien desde hace 10 años no compra
un rollo fotográfico ni se ha metido a un cuarto oscuro-, también
tendrá que cambiar la función de un curador y la mentalidad
de los jurados, pues hay casos en que un fotógrafo envía
su obra en cd a un concurso, aquellos "se abocan más a revisar los
trabajos impresos, y de alguna manera marginan los que se presentan'' en
esa plataforma.
Por otra parte, añade, la arquitectura de la fotografía
no es la misma. Ejemplo de ello será la exposición Laberinto
de luz, integrada por más de 8 mil imágenes.
En esa exhibición, "se podrá caminar literalmente
en y sobre las imágenes, ya que estarán en el piso, las paredes,
el techo... Ya no será una situación contemplativa frente
a la fotografía''.
ZoneZero es visitada al mes por 250 mil personas
en promedio, pertenecientes a 130 países. La visita dura casi una
hora, dice Meyer. ''Eso nos convierte en uno de los principales y más
populares destinos para la fotografía en Internet''.
El
sitio amalgama la colaboración y voluntad de miles de personas.
''Es un esfuerzo compartido en el que mi labor es coordinarlo''.
A lo largo de estos 10 años ZoneZero ''ha
operado como un agente de transformación en la era digital, pues
ha ayudado a los fotógrafos a tomar conciencia de lo que es la transición
de lo análogo a lo digital. Ha participado en diversas universidades
alrededor del mundo, así como en las opciones creativas para integrar
la evolución de las nuevas herramientas en el quehacer fotográfico
y en las formas que se publican las obras, algo que cambió mucho
en la pasada década".
Laberinto de luz se exhibirá del 18 de septiembre
al 26 de octubre en el Centro Nacional de las Artes (CNA). En tanto, el
coloquio De lo analógico a lo digital, cuyo propósito
es reflexionar sobre las nuevas propuestas en las formas de producción
fotográfica, se realizará del 25 al 27 de septiembre en el
Teatro de las Artes del CNA. Quienes se inscriban antes del 10 de septiembre
tendrán 20 por ciento de descuento. El boleto da derecho, entre
otras cosas, a 20 conferencias, tres conciertos y constancia de participación.
Como actos paralelos al coloquio habrá una serie
de nueve conciertos en el Callejón de las Vizcaínas (Centro
Histórico), experimento artístico que conjugará imágenes
y música. Las actividades se inscriben en el contexto de Fotoseptiembre
2003.
Para más informes visite:
zonezero.com/10/indexsp.html
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