BAJO LA LUPA

Alfredo Jalife-Rahme

La batalla del milenio

Schwarzenegger/Bush vs Cruz Bustamante/Clinton
Apoyar al mexicano de origen, la clave demócrata

EL FAMOSO RECALL, el "referendo revocatorio" de California, el próximo 7 de octubre, en el que los votantes se pronunciarán por la defenestración o la permanencia del controvertido gobernador Gray Davis, del Partido Demócrata, es susceptible de cambiar en forma dramática la correlación de fuerzas en Estados Unidos.

MUCHO SE HABLA del circo y/o carnaval que ha dado lugar a un despliegue de excentricidades con más de 158 candidaturas de todos los colores y gustos que pretenden remplazar a Gray Davis, en caso de ser defenestrado en la misma boleta electoral que elige simultáneamente a su sustituto.

DOS ESCENARIOS son ineludibles: en el primero, Gray Davis logra sortear milagrosamente la animadversión ciudadana y permanece en el poder -lo que haría inefectivo el resultado simultáneo en la misma boleta de quien obtenga la mayoría simple de los pletóricos aspirantes a sustituirlo, aun si se llama Schwarzenegger; en el segundo, el gobernador demócrata es defenestrado, lo que da pie a dos subescenarios por las tendencias estructurales que se han asentado: gana el republicano de origen austriaco Schwarzenegger o el demócrata de origen mexicano Cruz Bustamante, actual vicegobernador del "estado dorado".

EN EL PRIMER escenario, la salvación de Gray Davis dejaría al Partido Demócrata muy maltrecho para las elecciones presidenciales de 2004, es decir, 13 meses después del 7 de octubre. ƑPodrá recuperarse el gobernador de aquí a menos de dos meses? Si bien es cierto que se ha levantado de otras condiciones desfavorables, ninguna se parece a su actual tragedia, y las encuestas (en una ocasión ganó la primaria de su partido pese a un sondeo negativo) lo hunden cada vez más: según CNN, en pocos días pasó de 54 por ciento en contra (4 por ciento era todavía rescatable y digno de pelear) a un 64 por ciento contrario (14 por ciento parece imposible de superar), esta vez de CNN/USA Today/Gallup, que indica más bien un epitafio de derrota. Gray Davis ha puesto su suerte en manos del ex presidente Clinton, quien estuvo a punto de ser defenestrado de la presidencia por su relación con una becaria californiana. ƑFuncionarán los sabios consejos de Clinton con tan poco margen de maniobra?

EL SEGUNDO ESCENARIO, que parece asentar sus reales conforme avanzan los días, puede desembocar en el triunfo del republicano Schwarzenegger, quien va de puntero en los sondeos, o del demócrata Cruz Bustamante, quien lo persigue a 10 por ciento de distancia y está a tiempo de alcanzarlo, y hasta de rebasarlo, siempre y cuando el electorado mexicano despierte de su letargo y acuda masivamente a votar el día de las elecciones en contra de un candidato que los puede expulsar y hasta exterminar (para estar a tono con los títulos de sus películas taquilleras) a balazos de verdad.

MAS ALLA DE la personalidad de los contendientes, los riesgos para el Partido Demócrata son de vida y muerte. California representa en los comicios presidenciales, que en EU son indirectos, el estado con mayor número de votos electorales: 55 de 270 delegados necesarios para ser elegido presidente. A como están las cosas en Estados Unidos, la pérdida de California, bastión de los demócratas, donde baby Bush mordió humillantemente la arena, puede representar no solamente un serio revés desde ahora para la elección presidencial de 2004, sino quizá hasta la de 2008, en la que se está cocinando la candidatura de la senadora neoyorquina Hillary Clinton, quien deseaba llevar de pareja a Gray Davis como candidato a la vicepresidencia -considerando que baby Bush no cometa errores incalculables, salvo los usuales.

SIN CALIFORNIA, los Clinton sufrirían una derrota anticipada. Es más: el Partido Demócrata quedaría seriamente afectado y con muy poca presencia en los estados del sur, donde ha sufrido serias afrentas. En Texas, gobernado por el sustituto de baby Bush, durante la votación de la redistritación que favorece a los republicanos, los congresistas locales del Partido Demócrata tuvieron que escapar hacia un estado vecino en forma insólita para evitar una orden de aprehensión (para ser llevados a votar por la fuerza y que como minoría hubiera dado paso a la enmienda en cuestión) de parte de la supersecretaría de "seguridad de la patria", que se extralimitó en sus funciones "antiterroristas". Como se nota, el equipo Bush se juega palmo a palmo todos los asientos electorales que pesarán en la próxima elección presidencial y en la que sigue para John Ellis (alias Jeb).

GRAY DAVIS, personaje flemático y sin carisma, debe gran parte de su tragedia a la desregulación eléctrica, por medio de la cual las gaseras texanas, encabezadas por Enron y ligadas al nepotismo dinástico de la familia Bush, manipularon los precios (al alza, obviamente, šhasta siete veces!) que endeudaron a California. ƑQué tanto es culpa de Gray Davis el déficit fiscal por 39 mil millones de dólares, como consecuencia del estallido de burbuja de la "nueva economía" greenspaniana? De 50 estados que conforman el territorio estadunidense, 47 padecen déficit fiscal, no se diga el gobierno federal. Es bien sabido por los sicólogos sociales que, en medio de los cataclismos, las poblaciones tienden a echar la culpa al gobernante en turno, quien sirve de chivo expiatorio idóneo. Gray Davis no tuvo una coartada, como el 11 de septiembre, en el caso del presidente Bush, para salir de su embrollo, ni tuvo la creatividad para enfrentar los magnos desafíos que rebasaron su capacidad y hoy es blanco fácil hasta de un actor de cine que a penas balbucea el inglés y sin la más mínima experiencia gubernamental. Otro actor, Robin Williams, de mayor alcance cerebral, comenta que Arnold "en todas sus películas ha tenido menos diálogos que cualquier otro actor, con la excepción, quizá, de Lassie".

DESDE SU RANCHO en Crawford, baby Bush arrojó los buenos modales de la supuesta neutralidad presidencial para apoyar sin ambages al actor Schwarzenegger: "sería muy buen gobernador". El actor austriaco naturalizado estadunidense fue "consejero" de daddy Bush en la Casa Blanca para asuntos de calistenia ciudadana. ƑQué tipo de asesoría le brindaría a baby Bush como virtual gobernador de California?

LA CANDIDATURA del actor austriaco fue bien armada en tiempo y engañó completamente a Gray Davis y hasta al jefe de su propia campaña, quien estaba listo a anunciar su desistimiento un día antes a su destape espectacular en el programa Tonight Show, de Jay Leno. Todo empezó con la solicitud de un referendo revocatorio, por Darrell Issa, libanés-estadunidense muy cercano a la familia Bush, quien financió la recolecta exitosa de firmas con el fin de ser el sustituto de Gray Davis. Issa se había formado en el ejército y luego fundó la empresa Vista, con la cual se encumbró en el sector electrónico para luego ser uno de los congresistas republicanos por California. Más allá de haber sido presidente del "Grupo Estadunidense en Favor de Líbano" (que pide la "salida del ejército invasor sirio"), Issa es miembro del Comité de Energía (šojo!) y Comercio de la Cámara de Representantes. Con lágrimas en los ojos, mi paisano Darrell Issa se retiró de la contienda después de haber aprendido en carne propia no solamente la legendaria perfidia del clan Bush, sino que, además, había sido vilmente utilizado para lubricar la llegada del actor austriaco.

UNA DE LAS credenciales del mexicano de origen Cruz Bustamante se centra justamente en "su vigorosa lucha contra los generadores de energía que han saqueado a los consumidores de California. Los costos de energía se elevaron de 7 mil millones de dólares, en 1999, a 55 mil millones en 2001", según reza su propaganda. Por su parte, el actor austriaco, quien posee una fortuna de cerca de 500 millones de dólares, afirma que "no será controlado por los grupos de interés". ƑCómo se moverá con los "grupos de capitales" de la gasocracia texana que lo apoya tras bambalinas?

EL HORNO NO está para bollos, y Bob Mulholland, portavoz del Partido Demócrata en California, amenazó al actor austriaco, no se sabe si en forma metafórica o "preventiva", que las balas que correrían de aquí al 7 de octubre serían "reales", no como las de juego de Hollywood. Drudge Report (10-08-03), muy cercano a la Casa Blanca, dio vuelo a la "asombrosa amenaza", con la mención de que la esposa del actor de cine, Maria Shriver, perteneciente al clan Kennedy y comentarista de televisión, se había preocupado sobremanera debido a su genética trágica. El mismo Mullholland da a entender la existencia de una "conspiración" para arrebatar el poder a los demócratas en el "estado dorado" y que la candidatura del actor austriaco había sido cocinada por Karl Rove, el maquiavélico asesor presidencial de baby Bush, a quien le debe sus triunfos electorales; agregó que la secretaria de prensa de Laura (la esposa del presidente número 43) ha estado mucho tiempo en California asesorando a los republicanos (The Daily Telegraph 10-8-03).

EL ACTOR AUSTRIACO, inflado maniáticamente por los medios bushianos, tiene muchos lados oscurísimos y varios escándalos sexuales en puerta, pero más que nada exhibe su estigma racista, no por haber sido hijo de un policía nazi -crítica que ha acallado con suculentos donativos a los rabinos del centro Simon Wiesenthal (The Guardian 10-8-03)-, sino por haber apoyado la infame "resolución 187" (Los Angeles Times 12-8-03) eminentemente antimexicana. La "venganza de Moctezuma", como le llaman por ahí, ya alcanzó a Pete Wilson, gobernador republicano presidenciable (cuyo equipo entero es asesor de Arnold), y podría volver a cobrarse la cabeza del Exterminador de películas.

FRENTE A LOS desastres surgen los grandes estadistas, y Gray Davis, dígase lo que se diga, no es un buen gobernador; como tampoco lo será el actor austriaco en medio del marasmo económico de EU y el embrollo de California, que puede orillar a una secuencia de referendos revocatorios como ha amenazado el propio Davis. Lo real es que los demócratas, en caso de ser cierta su teoría de la conspiración, se descuidaron con tantos avisos oportunos. La flagrante manipulación de los precios de electricidad por las gaseras texanas, vinculadas a baby Bush, obligaba a una vigilancia estrecha y a su revelación a la opinión pública. Gray Davis se confió. No tomó en serio el malestar ciudadano y hoy ha puesto a su partido de espalda contra la pared y, en un descuido, en grave riesgo letal.

A NUESTRO JUICIO, al Partido Demócrata le queda un último recurso nada heroico pero eficiente: obligar a que el empecinado Gray Davis presente su renuncia antes de la fecha fatídica, lo que haría innecesario el referendo revocatorio; su lugar sería ocupado automáticamente por el mexicano de origen Cruz Bustamante, quien salvaría a los migrantes mexicanos, a California, al Partido Demócrata y a la humanidad de un calvario innecesario. ƑSe resignarán los Clinton a soltar a su aliado en desgracia, Gray Davis, para apoyar a Cruz Bustamante? Allí radica la clave para evitar el 7 de octubre.