México D.F. Miércoles 6 de agosto de 2003
Delincuencia organizada, entre los delitos que les imputan
Trasladan al penal de La Palma a siete implicados en tiroteo de Nuevo Laredo
JOSE GALAN Y TRIUNFO ELIZALDE
Juan Manuel Muñoz Morales, coordinador de Ministerios Públicos Federales en Nuevo Laredo y presunto causante de la balacera entre narcotraficantes y policías, fue trasladado ayer al mediodía junto con otros seis implicados de esa ciudad fronteriza al penal de La Palma, en el estado de México, por elementos de la Agencia Federal de Investigación (AFI).
Acusado de tener vínculos con narcotraficantes de la pandilla Los Chachos, cinco de cuyos miembros presuntamente liberó luego del enfrentamiento entre narcos y elementos de la AFI el pasado viernes, llegó junto con su cuñado, Mario Alvarez Carrillo, José Benavides Martínez, Juan Calixto Ramos Vázquez, José Silverio Martínez González, Juan Erasmo Rodríguez Martínez, Erick Rolando Operez Pérez y Mario Gómez Escamilla.
En medio de un fuerte dispositivo de seguridad, la aeronave que transportaba a los detenidos aterrizó a la una de la tarde en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y se dirigió al hangar de la Procuraduría General de la República (PGR). Con chalecos antibalas, los detenidos fueron subidos a una camioneta blindada con vidrios polarizados, resguardada atrás, adelante y a los costados por vehículos de la AFI repletos de agentes federales que traían armas largas.
La caravana ingresó al penal alrededor de las cinco de la tarde. Los detenidos fueron puestos a disposición del juzgado primero de distrito B en materia de procesos penales federales, con sede en Toluca, acusados de delitos de delincuencia organizada, homicidio calificado en grado de tentativa y contra la salud. También, por portación de armas de uso exclusivo de las fuerzas armadas.
La visitaduría interna de la PGR intervino la subsede de Nuevo Laredo.
Como se recordará, el pasado viernes Juan Manuel Muñoz Morales viajaba por calles de Nuevo Laredo en una camioneta Ford Lobo de modelo reciente, acompañado por presuntos miembros de la banda Los Chachos.
Fueron descubiertos por sicarios de la pandilla contraria, Los Negros, quienes empezaron a perseguirlos. Según indagaciones de la PGR, Muñoz Morales, abusando de que pertenece al Ministerio Público Federal, pidió ayuda a agentes de la AFI que pernoctaban en el hotel Santa Mónica, quienes se vistieron rápidamente y partieron a auxiliarlos.
Cuando salían del hotel, venía por la avenida la camioneta de Muñoz Morales, pero para sorpresa de los agentes se siguió de largo a pesar de que le marcaron el alto. Atrás, a toda velocidad, venían los vehículos de Los Chachos, quienes dispararon a los federales. Los agentes atravesaron una camioneta en la avenida y contra ella se impactó otro vehículo, lo cual provocó el incendio que dejó dos muertos.
Más atrás venía otra camioneta de la que también abrieron fuego contra los agentes. Los ocupantes, dos individuos, se identificaron como colegas de la agencia. Inclusive llevaban uniformes pero no pudieron acreditarse, por lo que quedaron detenidos.
Los agentes notaron que la camioneta Ford Lobo entró a un domicilio particular, donde Muñoz Morales la estacionó, mientras por radio pedía que soltaran a los dos detenidos, "porque son colaboradores míos". Pero los policías los mantuvieron en custodia. Sin embargo, Muñoz Morales logró subirse a la pick up con los detenidos, la arrrancó y desapareció. Poco tiempo después regresó sin ellos.
Ahora ya está detenido en La Palma, donde tendrá que dar explicaciones.
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