Mañana se definirá si se efectúan las enmiendas, que quitan privilegios a funcionarios

Obligan a legisladores del PT a apoyar reformas en pensiones que impulsa Lula

Un resolutivo del partido brasileño critica el ALCA; "ahonda la dependencia", afirma

DPA Y AFP

Sao Paulo, 13 de julio. Todos los legisladores del Partido de los Trabajadores (PT), del presidente Luiz Inacio Lula da Silva, están obligados a votar en favor del proyecto de reforma previsional impulsado por el mandatario, que retira varios privilegios a los funcionarios públicos.

La dirección del partido, creado por Lula hace 23 años, concluyó este domingo dos días de reuniones con una declaración de apoyo al gobierno por su primer semestre de gestión, aunque reclamó medidas para impulsar el crecimiento económico y más empeño en las políticas sociales. Además reiteró su crítica al Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA).

En sus conclusiones, en medio del debate sobre la reforma al sistema de pensiones, el PT impuso la disciplina al acordar "la obligatoriedad del voto de sus parlamentarios" a esas reformas, como las defina el gobierno, aunque reconoce que su contenido todavía puede ser negociado por los legisladores. La medida fue aprobada por 52 votos en favor, 26 en contra y cuatro abstenciones.

El partido no consiguió consenso para definir las cuestiones claves de las reformas, como defendía su presidente, José Genoino, partidario de establecer un límite de 2 mil 400 reales (unos 800 dólares) a las pensiones para eliminar altas cifras cobradas por algunos funcionarios, especialmente en el Poder Judicial.

"Ni la corriente mayoritaria del partido tiene consenso para cerrar filas sobre la reforma", había afirmado a Afp el diputado Iván Valente, quien al igual que la dirección de la mayoritaria Central Unica de los Trabajadores (CUT) defiende un techo mayor para las pensiones que el propuesto por Genoino.

El PT enfrenta crecientes críticas de sus alas más radicales de izquierda, que no aprueban la política moderada del gobierno y apoyan la huelga iniciada el martes pasado por cerca de 450 mil funcionarios públicos contra la reforma previsional, que además establece una cuota de 11 por ciento a los jubilados que ganen más de 370 dólares y eleva la edad para retirarse.

Las presiones llevaron al gobierno a retroceder en algunos puntos y posteriormente a caer en la indefinición. De hecho la reforma a las pensiones sólo será definida tras una reunión el martes con los gobernadores, el más importante apoyo del gobierno en esa cuestión.

Tras elogiar los logros de la gestión en seis meses de gobierno, el texto, aprobado por la dirección del PT el domingo, asegura que "llegó la hora de consolidar el crecimiento sostenible, la generación de empleo y la distribución de la renta". Afirma además que "vencida esta etapa el gobierno está en condiciones de imprimir la velocidad que las urgencias sociales reclaman".

En el texto, el PT se mantiene crítico sobre el ALCA. Considera que en los actuales términos "representa la profundización de la dependencia externa", al tiempo que apoya la negociación de un acuerdo de libre comercio previo entre el Mercosur y Estados Unidos, y propone la celebración de un referéndum sobre el ALCA, una vez que concluyan las negociaciones.