México D.F. Miércoles 25 de junio de 2003
Acudieron al llamado empresarios, políticos y miembros del gabinete foxista
Cónclave en la casa de Elba Esther Gordillo para amarrar las reformas
Priístas y ecologistas piden a Creel que Fox suspenda su campaña de promoción al voto
ENRIQUE MENDEZ
El gobierno federal, los empresarios Carlos Slim, Fernando Senderos y Alfonso Romo, y representantes de PAN, PRI y PVEM acordaron ayer reducir ''la tensión política'' que ha generado la disputa entre el Poder Ejecutivo y los partidos políticos, y plantearon la necesidad de iniciar amarres para sacar las reformas estructurales de Vicente Fox. De entrada, se comenzaron a tejer propuestas de cambios al sistema fiscal y a los sectores eléctrico y petrolero.
Ausente del diálogo el PRD, que alegó ''problemas de trabajo'' de la dirigente Rosario Robles para no asistir a la casa de Elba Esther Gordillo, quien convocó al encuentro, priístas y ecologistas cuestionaron al titular de Gobernación, Santiago Creel Miranda, el hecho de que el presidente Fox continúe su campaña de promoción del voto. El funcionario respondió que ''evaluaría'' el caso, aun cuando por la mañana él mismo había insistido en que los mensajes se mantendrán.
La maestra se asumió como la negociadora del PRI con el gobierno foxista, y en un alarde de fuerza hacia el interior de su partido sólo invitó al diálogo con Creel, el secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, y el candidato a diputado federal panista Francisco Barrio Terrazas a priístas de su círculo cercano relacionados con el salinismo y que son puente con la administración panista: Francisco Suárez Dávila, Francisco Rojas y Roberto Campa Cifrián. Participó el ex secretario de Finanzas del gobierno de Puebla, Rafael Moreno Valle, también aspirante a diputado.
A su penthouse de Galileo 7, en Polanco, también llegaron los empresarios Carlos Slim, Fernando Senderos y Alfonso Romo. Por el PVEM participó el boxeador Jorge Kahwagi, candidato a diputado federal y aspirante, como Elba Esther, a coordinar a su bancada. Su asistencia generó, incluso, la broma de uno de los asistentes: ''A trancazos no vamos a resolver nada''.
Priístas y panistas reconocieron que como ninguno obtendrá la mayoría, se ''necesitan'' mutuamente para tener, primero, un control político del Congreso que les permita, enseguida, lograr acuerdos para sacar adelante reformas legislativas que interesan a ambos partidos.
El ex contralor Francisco Barrio convino: ''Partiendo de la premisa que el Senado no se renueva seguirán necesitándose acuerdos y probablemente en la Cámara de Diputados esa situación prevalezca''. Señaló que también se requerirá de diálogo con el PRD para lograr acuerdos, pero ante la ausencia de los perredistas en la casa de la secretaria general priísta acotó: ''Esta reunión no es de acuerdos, es de conversación''.
La versión oficial del encuentro fue que se trató de hacer ''menos tenso y más terso'' el ambiente político previo a las elecciones del 6 de julio, y que los actores políticos comiencen conversaciones antes de que inicie la próxima legislatura de la Cámara de Diputados y ''ordenar la discusión'' en este momento.
En la reunión, que duró casi tres horas, se reconoció que, a partir de los resultados previsibles del actual proceso, en 2006 tanto PRI como PRD y PAN podrían ganar la Presidencia de la República, y que por eso los tres partidos deben comprometerse a sacar las reformas necesarias que le den estabilidad al país.
Si bien la mayor parte de la conversación entre empresarios, políticos y funcionarios del gabinetazo foxista transcurrió sobre las ''reformas centrales'', los representantes partidistas no dejaron pasar el tema de los espots del Presidente de la República y su intromisión en asuntos electorales.
Pan y no tortillas
En la mesa surgió una moción dirigida a Creel, en el sentido de que con el retiro de la propaganda foxista se contribuiría a ''suavizar el ambiente político''. Uno de los principales argumentos fue que difícilmente los mensajes presidenciales tendrán una repercusión en los distritos y que, por el contrario, en este momento no ayudan a una buena relación entre el Ejecutivo y sus opositores. La respuesta de Creel fue que analizaría la posibilidad de llegar a un acuerdo satisfactorio para ambas partes, pero nada más.
Los invitados delinearon lo que para ellos son las reformas centrales que necesita el país: la hacendaria, de pensiones, la fiscal, la energética y la laboral. Sobre la primera, Francisco Gil Díaz hizo una exposición amplia sobre las necesidades hacendarias.
El politólogo Federico Reyes Heroles fue designado como ''vocero'' de la reunión por el equipo de Elba Esther Gordillo, y al final, a las puertas de la casa de la secretaria general priísta, ofreció detalles del encuentro, incluido el menú.
-ƑTortillas o pan?
-šPan!
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