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México D.F. Martes 24 de junio de 2003
Son temas de desamor, que exigen toda la sensualidad
al interpretarlas, expresa
En Tequila azul y batuta Pecanins vuelve blusera
la canción mexicana
"Tenía terror de presentar el disco en la tierra
de José Alfredo, pero nos fue bonito, fue el bautizo", señala
La Orquesta de Baja California acompaña a la cantante
JORGE CABALLERO
Hace unos días entró en circulación
el nuevo disco de Betsy Pecanins, Tequila azul y batuta, en el cual
la intérprete fusiona la canción ranchera con el blues y
el jazz. Respecto de la relaboración de los 14 temas, que contiene
la producción, Pecanins dice: "No tienen que ganar algo o no siento
que gracias a mí ganen algo; las canciones por sí solas son
maravillosas, pero estas versiones le dan un soplo de aire fresco a una
música que conocemos por sus sonido tradicional; no pierden naturalidad
y es otra forma de tratarlas. Tampoco tengo que justificarme, fue un trabajo
muy gozoso y siento que a estas canciones les queda el blues".
En su anterior disco, Efecto tequila, Pecanins
ya había fusionado la canción ranchera con blues y jazz para
celo, piano y voz; sobre si el nuevo cidí es una continuación
de ese trabajo explica: "Sí y no, Azul tequila y batuta es
un proyecto distinto y lo que tiene en común con el otro es que
en su mayoría incluye canciones rancheras alteradas, bluseadas y
jazzeadas... algo que no remite a la versión tradicional. Tequila
azul y batuta lo iniciamos con apoyo del Fonca el año antepasado,
el trabajo tardó año y medio, pero en realidad fue una coinversión
con la Orquesta de Baja California (OBC), que ha hecho mucha música
mexicana; su director, Eduardo Díazmuñoz, domina muy bien
la música mexicana contemporánea... también hizo los
dos discos de El Tri sinfónico".
Participan,
además, Roberto Limón, Rosino Serrano, Arturo Márquez,
Eugenio Toussaint, Alberto Núñez, Enrique Neri y David Rodríguez
de la Peña. Al respecto la cantante informa: "Trabajar con Díazmuñoz
fue una delicia porque nos exprimió a todos de una manera muy amable.
En la orquesta también está Roberto Limón, guitarrista
de primer nivel y director ejecutivo de la misma; él siempre fue
muy entusiasta con el proyecto. El disco lo produjo Rosino Serrano, quien
además hizo algunos de los arreglos. Cuenta con grandes colaboradores,
tiene muchos sonidos y muchas visiones, en su mayoría todos se fueron
por el jazz y blues. Involucró a mucha gente, muchos esfuerzos...
yo también estudié y preparé la manera de cantar las
piezas, los tonos... en fin, todo".
Temas con un lenguaje universal
-La selección de los temas ¿cómo
fue? y ¿cómo influyó tu gusto?
-Mi gusto influyó en su mayoría, porque
yo hice la selección final de los temas. Serrano me propuso muchas
canciones, que quedaron. A lo largo de la vida se recogen canciones que
hacen decir: "algún día yo quiero cantar esta canción".
Fue difícil seleccionarlas, porque encontrar canciones que se complementen
la una con la otra, que exista un concepto, que tengan un lenguaje universal
con el cual puedas hacer este tipo de mezcla o fusión, fue arduo.
Lo que unificó a Tequila azul y batuta fue el lenguaje universal
de las canciones elegidas, todas son como bluseras, de desamor, de insatisfacción,
de me voy a cortar las venas en cinco minutos..., pero al final de cuentas
es un dolor gozoso, porque te ríes de ti y te exige toda la sensualidad
para cantarla.
-¿Qué sentido tiene este disco?
-El sentido está en las canciones, en la manera
de cantar, en esa parte de volver más blusera la canción
mexicana, volcarla más hacia la ironía, de reírte
de ti mismo, pero con ese tonito de escarnio, que es muy importante en
el blues y que en la canción ranchera no es tan fuerte. Las rancheras
también duelen, tienen esa cosa del humor y sensualidad, pero no
ese tonito irónico, que les va bien. El sentido lo dice la música...
la canción que trasciende cualquier explicación que pueda
dar. Hoy en día toda la música está muy apoyada en
la fusión. Creo que es una manera de hermanar universalmente mediante
la música.
Sacarlos del lamento, de la tragedia
-Pero ¿cómo desprenderse de ese sentimiento
de los temas originales?
-Este trabajo quiere sacar los temas de esa parte de lamento
y tragedia para llevarlos a otro contexto, en este caso más blusero.
Cantarlas de una manera tradicional no le queda a mi voz ni a mi proyecto;
en cambio, al darles este giro siento que algo aportan.
Tequila azul y batuta se presentó en vivo
en algunos sitios durante octubre de 2002. Pecanins habla del recibimiento
en Guanajuato: "Tenía terror por cantarlas en la alhóndiga
de Granaditas, en la tierra de José Alfredo, pero nos fue bonito.
A la gente le gustó mucho, nos recibieron cálidamente, ese
fue el bautizo".
Agrega: "Es difícil presentarlo con la orquesta,
mover a tanta gente es difícil y costoso. De hecho la Orquesta de
Baja California viene en agosto para actuar en Bellas Artes, sola, y quisiéramos
aprovechar para ver si hacemos algunas funciones, pero ya estamos elaborando
una gira".
Tequila azul y batuta está apoyado por el
Fonca; producido por Betsy Pecanins, JM Distribuidores, Mosca Fly, OBC
y Tania Libertad. Puede adquirirse en Mix Up, Sanborns, El Péndulo,
Gandhi, Sótano y Tower Records. Más informes: [email protected]
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