México D.F. Jueves 12 de junio de 2003
Caudalosa presencia del amor en su narrativa,
pondera el rector de la institución
Impone la UAP el doctorado honoris causa a la
escritora Angeles Mastretta
En Puebla están mis grandes afectos, expresa
la autora de Arráncame la vida
Es la primera mujer en ser reconocida con el Premio
Internacional Rómulo Gallegos
LA JORNADA DE ORIENTE
Puebla,
Pue., 11 de junio. En la obra de Angeles Mastretta Guzmán se
hace evidente una caudalosa presencia del amor, afirmó el rector
de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP), durante la ceremonia
en la cual el Consejo Universitario de esa casa de estudios impuso el doctorado
honoris causa a la escritora poblana de 54 años.
En el acto, desarrollado en el salón barroco del
edificio Carolino, el gobernador Melquiades Morales Flores destacó
a su vez la trayectoria de Mastretta Guzmán, de quien dijo sentir
orgullo por ser originaria del estado, porque aunque la escritora viva
en el Distrito Federal, nunca ha salido de Puebla y por ello su obra se
desarrolla en este solar. ''El hombre es él y su circunstancia,
y la circunstancia de Angeles Mastretta es y seguirá siendo Puebla",
aseguró.
Conjuro contra el temor
''En Puebla siempre está lo que me gusta", dijo
por su parte la autora de las novelas Arráncame la vida y
Mal de amores, cuyas historias se desarrollan en su ciudad natal.
Aquí está la Iztaccíhuatl pálida, impredecible
y sola como toda mujer dormida junto a un guerrero desde hace 4 millones
de años. Yo no concibo el mundo sin los volcanes atestiguando las
luces de la ciudad, acompañándonos la vida entera mientras
pasa un instante de sus vidas. Quienes fundaron Puebla en este valle movidos
por la imaginación y los sueños del Renacimiento, supieron
elegir el paisaje, pero está en nosotros cuidarlo.
''Ser de Puebla detrás de la fama de insondables
que no sé cómo hemos creado, es ser de todas partes. Es heredar
la vocación ecuménica de las muchas generaciones que han
mezclado aquí la fantasía y sus linajes. Ser de Puebla para
nuestra fortuna es ser mestizos, es ser hijos de viajeros, de peregrinos,
de asilados. Por eso cuando ando en Puebla, lo hago un poco por todas partes,
lo mismo que cuando ando por todas partes ando también aquí.
En Puebla están todos mis grandes amores, los posibles e imposibles
y los que siendo inconfesables se volvieron perennes'', añadió
la narradora.
Ahora, prosiguió Mastretta, ''se me entrega un
grado al que pretendo hacer honor el resto de mis días. Es un privilegio
recibir este distintivo que me enaltece y me alegra aún más
de lo que me asombra''.
Con la voz quebrada por la emoción, Mastretta -primera
mujer en obtener el Premio Internacional Rómulo Gallegos por su
novela Mal de Amores- habló también de sus temores.
''Temo todos los días, con más displicencia que a la muerte,
a la posibilidad de que no me quieran todos aquellos a quienes reverencio.
Este premio será siempre un conjuro contra el temor''.
En breve entrevista al final de la ceremonia, Mastretta
habló de su nueva novela, Si sobrevives; ya tiene 300 páginas
y todavía no camina, pues ''me falta tirar 200 y volver a empezar",
adelantó.
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