El caso Cavallo es prioritario para el mandatario argentino, afirma La Nación

Acepta Kirchner extraditar a militares acusados por delitos de lesa humanidad

Encuesta: 82.1% de ciudadanos, en favor de que el presidente de la Corte sea destituido

DPA Y AFP

Buenos Aires, 7 de junio. El presidente de Argentina, Néstor Kirchner, está en favor de aceptar los pedidos de extradición de militares argentinos acusados de cometer delitos de lesa humanidad durante la pasada dictadura, según el diario La Nación.

Además, fuentes de alto rango del nuevo gobierno señalaron que la intención prioritaria es arbitrar para que la justicia mexicana pueda decidir sobre el ex militar Ricardo Cavallo, quien se encuentra detenido desde hace dos años y medio en México por un requerimiento del juez español Baltasar Garzón para ser juzgado en España, donde es acusado de violaciones a los derechos humanos de argentinos de origen español. Cavallo vivió oculto durante años en México e incluso logró ser funcionario.

"Aunque su situación es particular, Cavallo es caso prioritario. Nosotros debemos liberar el camino para que la justicia mexicana diga cuál será su destino, es decir, si decide extraditarlo o no. La intención es no obstruir el proceso y dejar que la justicia trabaje de acuerdo con sus criterios", señaló la fuente allegada al mandatario argentino.

El gobierno de Kirchner analiza actualmente mecanismos para limitar en el corto plazo el decreto presidencial dictado por el ex mandatario Fernando de la Rúa, en 2001, que rechaza los pedidos de extradición presentados por tribunales extranjeros, indicaron altas fuentes oficiales al matutino.

Desde noviembre de 1991 existe un pedido de captura de 98 militares. El más conocido es el del ex capitán Alfredo Astiz, requerido por la justicia de Francia por la desaparición, en diciembre de 1977, de las monjas francesas Alice Domon y Lionie Duquet.

Apoyo al mandatario

Por otro lado, la mayoría de los argentinos, 82.1 por ciento, está en favor de un juicio político para destituir al presidente de la Corte Suprema de Justicia, Julio Nazareno, según un sondeo publicado hoy por el diario La Nación.

La decisión de Kirchner de renovar el tribunal encuentra correspondencia con la voluntad popular, que de acuerdo con la encuesta 92 por ciento de los argentinos considera necesario un cambio en la Corte.

El gobierno de Kirchner acusó esta semana a Nazareno de haber cometido "importantes irregularidades" y el Parlamento dio el jueves los primeros pasos del juicio político para la destitución del titular de la corte, al aprobar la comisión de juicio político de la Cámara de Diputados una serie de denuncias en su contra.

Pero para 69.5 de los argentinos la renovación de la Corte Suprema de Justicia debe ser total, mientras que 29.8 opina que la naturaleza del cambio debe ser parcial y afectar sólo a los que se les prueben delitos.

Kirchner se manifestó hoy en favor de la libre flotación del dólar, después de haber sugerido semanas atrás que deseaba que la divisa se cotizara a tres pesos por unidad.

"Es necesario aclarar que el dólar en Argentina es de libre flotación. Soy un defensor de la flotación del dólar, porque después algunos economistas malinterpretan", declaró Kirchner en una conferencia de prensa en Río de Gallegos, capital de Santa Cruz.

El presidente explicó que durante su campaña electoral dijo que "un dólar en tres pesos o 2.95 puede funcionar bien", y añadió que "hoy vuelvo a opinar lo mismo. Eso pudo malinterpretarse, desde algún lado, como que ya quería imponerlo".

Kirchner señaló que "todos sabemos lo que generó el dólar fijo", en referencia a la paridad de la divisa con el peso, plan de convertibilidad que rigió por 11 años, hasta enero de 2002.

El mandatario también se refirió a la próxima visita, el martes, del secretario de Estado estadunidense, Colin Powell. Aseguró que su llegada no significa "un alineamiento automático a Estados Unidos".

Será necesario "ver qué es lo que viene a conversar. Lo escucharemos con atención y le diremos qué es lo que pensamos".

El encuentro con el jefe de la diplomacia estadunidense se llevará a cabo "sin ningún tipo de alineamiento automático", reiteró el presidente.