La actitud del gobierno local es laxa, dice Alberto Lara

PAN: "grave, que en la capital no se meta en cintura a los manifestantes"

ROBERTO GARDUÑO

El PAN en la Cámara de Diputados calificó de grave "que no se meta en cintura a los manifestantes en la ciudad de México", porque existen elementos de disuasión que podrían ser utilizados en caso de persistir actos de provocación y violencia. Jorge Alberto Lara, legislador de ese partido, dijo que entre esas herramientas legales está lanzar chorros de agua, "que mantienen al margen a la gente sin ningún tipo de problema o de violencia".

En el mismo sentido, Alejandro Zapata Perogordo, coordinador de la bancada panista, sostuvo que las autoridades deben entrar al terreno de la legalidad sin menoscabar las garantías. "Se trata de que esas expresiones puedan tener límites dentro de la propia ley para no afectar intereses de una gran mayoría."

Jorge Alberto Lara criticó con dureza a las autoridades de la ciudad de México, porque desde su perspectiva hay muestras de laxitud para permitir que grupos de presión tomen como rehenes a ciudadanos.

Al preguntarle cuáles medidas deberían aplicarse para enfrentar esas manifestaciones, expresó: "Es una medida muy exótica y se llama aplicar la ley. Creo que todos los instrumentos de que dispone la autoridad para disuadir y persuadir están ahí, hay que aplicarlos. Lo que nosotros estamos diciendo es que el derecho a manifestar es una garantía y una prerrogativa constitucional, pero no se debe inhibir el derecho de los terceros a circular".

-ƑDisuadir con la fuerza pública?

-El concepto de fuerza pública tiene distintas variantes. Creo que se puede permitir la marcha de una manera ordenada, sin estrangular la vialidad y sin hostigar a la ciudadanía.

-ƑEn la mayoría de las ocasiones los manifestantes superan a los integrantes de la fuerza pública?

-Insisto en que la autoridad debe contar con elementos de disuasión que inhiban y no sean violentos en términos de propinar golpes o heridas. No se trata de eso. Sabemos que hay un gran temor de que la autoridad sea vista como represora.