Más de 300 mil infantes en peligro por desnutrición, denuncia Unicef

Mueren 9 niños iraquíes al manipular municiones abandonadas en Missan

La querella contra el general Franks, "ridícula y despreciable": Departamento de Estado

AFP, REUTERS Y DPA

Basora, 14 de mayo. Nueve niños iraquíes murieron y otros siete resultaron heridos al estallar un explosivo que estaban manipulando en la provincia de Missan, sur de Irak, anunció el miércoles un vocero de la Organización de Naciones Unidas (ONU).

Mientras, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) informó que más de 300 mil niños iraquíes están en peligro de muerte por desnutrición aguda, el doble de la la población infantil que estaba en riesgo antes de que las fuezas angloestadunidenses invadieran el país en marzo pasado.

David Wimhurst, vocero de la ONU en Basora, en el sur de Irak, señaló al referirse a la muerte de los menores que "esta tragedia confirma el serio peligro que representan (los explosivos) en Irak", tras la guerra que emprendieron las fuerzas angloestadaunidenses y que el 9 de abril condujo a la caída del régimen de Saddam Hussein y a la toma de Bagdad, añadió Wimhurst.

El ejército británico, que controla la región, localizó en la provincia de Missan 350 lugares donde había artefactos explosivos, entre ellos 230 que han sido ya neutralizados, según el comandante Cameron Day, que no precisó el lugar exacto donde ocurrió la detonación.

El jefe de la misión del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Andres Kruesi, informó que desde el final de la guerra, unas 50 personas, principalmente niños, han sido ingresadas sólo en los hospitales de Basora por heridas causadas al explotar una munición abandonada. Kruesi reprochó al ejército británico, que tiene el control de Basora, que no se movilice lo suficiente para desactivar explosivos.

"Los soldados iraquíes han dejado tras de sí miles de armas, municiones, obuses y cohetes que no han estallado. Hallamos auténticos arsenales en las escuelas, jardines de niños y parques", explicó la vocera del CICR, Isabelle Bourgeois.

En cuanto a la desnutrición que afecta a infantes iraquíes, un estudio de Unicef mostró que 7.7 por ciento de los niños menores de cinco años en los centros urbanos, equivalente a 300 mil pequeños, sufre actualmente desnutrición aguda, lo que equivale a una cifra del doble de la registrada hace un año.

"Al comenzar la guerra, sabíamos que los niños iraquíes estaban mal nutridos. Pero estos hallazgos nos muestran claramente que no se ha hecho lo suficiente por revertir la situación. Por el contrario, ha empeorado", afirmó el representante de Unicef en Bagdad, Carel de Rooy, quien añadió que el consumo de agua insalubre tiene un papel muy importante en el agravamiento de la crisis, y confirmó que existe un brote de cólera en el sur Irak que puede extenderse si no empiezan a tomarse las medidas adecuadas. Este brote de cólera también fue confirmado por la Organización Mundial de la Salud.

Fustigando abiertamente a las fuerzas angloestadunidenses, De Rooy señaló que después de todas las semanas que han pasado desde el derrocamiento del régimen iraquí, "todavía estamos esperando que alguien provea seguridad. Conocemos los riesgos que enfrentan los niños de Irak y sabemos qué hacer. Pero somos trabajadores humanitarios, no policías. Asegurar la entrega de ayuda equivale a hacer efectivas esas entregas".

En tanto, una demanda por crímenes de guerra contra Tommy Franks, comandante en jefe de las fuerzas angloestadunidenses que atacaron Irak, fue presentada este miércoles ante la justicia belga. La demanda fue interpuesta en el tribunal federal de Bruselas con base en la ley de competencia universal de este país, indicó Jan Fermon, quien representa a 17 iraquíes y a dos jordanos, estos últimos la viuda y el padre del corresponsal jordano del canal de televisión qatarí Al Jazeera, Tarek Ayub, muerto el 8 de abril en un bombardeo estadunidense.

La querella se basa en unos 20 ataques durante la guerra de Irak, entre ellos tres ametrallamientos de ambulancias imputados a las tropas estadunidenses, ataques con bombas de fragmentación, tiroteos a civiles durante la entrada de tropas estadunidenses en Bagdad y el saqueo de un centro cultural en la capital iraquí.

Para el canciller belga, Louis Michel, la presentación de esta demanda es "un abuso" porque "Estados Unidos es una democracia", por lo que no se explica "por qué esta demanda no se ha presentado en ese país", indicó un portavoz.

A su vez, el vocero del Departamento de Estado estadunidense, Philip Reeker, afirmó: "esperamos que el gobienro belga tome las acciones necesarias para desestimar la demanda bajo sus leyes". El vocero agregó que la querella es "rídicula", los cargos "despreciables" y que la acción legal "no merece comentario alguno".

En Nueva York, el Consejo de Seguridad de la ONU debatía ayer el proyecto de resolución de Estados Unidos que solicita el levantamiento de las sanciones económicas contra Irak.

El secretario de Estado estadunidense, Colin Powell, intentó la víspera en Moscú vencer las reservas de Rusia frente a esa resolución, aunque admitió que había "problemas pendientes" entre ese país y el suyo en particular sobre el regreso de los inspectores de desarme de la ONU.

Después de que el pasado martes se encontrara una fosa en Babilonia con los restos de unas 15 mil personas, este miércoles se encontraron nuevas fosas al norte de Bagdad y en territorios kurdos. En total, durante el régimen del presidente Saddam Hussein se reportaron 200 mil desaparecidos.