Permanecieron en plantón durante la entrega
de patrullas a la PFP
Bomberos, invitados de palo en acto de Fox
Suspenden la inauguración de la estación
12, en Xochimilco, "por el paro activo"
SUSANA GONZALEZ G.
Los
bomberos sindicalizados que cumplieron 13 días en plantón
en el Zócalo amanecieron ayer rodeados de patrullas y camiones de
la Policía Federal Preventiva (PFP). Autoridades del gobierno capitalino
pretendieron retirarlos la noche del lunes, primero tratando de convencerlos
de que se fueran por propia voluntad y luego amagándolos con hacerlo
mediante la fuerza pública, pero en ningún caso aceptaron.
De todos modos la policía llegó, pero no
la capitalina, sino la federal, y los tragahumo se convirtieron, sin quererlo,
en los invitados de palo en la reaparición pública
del presidente Vicente Fox.
Su presencia impidió la limpieza y control de protestas
que autoridades locales y federales realizan en la Plaza de la Constitución
cada vez que se lleva a cabo algún acto del Ejecutivo federal.
El último intento por retirar a los tragahumo fue
en los primeros minutos del martes, cuando funcionarios del Gobierno del
Distrito Federal les advirtieron que si se empeñaban en permanecer
bajo su carpa amarilla, entonces solicitarían la intervención
de los granaderos, "pero les respondimos que entonces veríamos de
a cómo nos tocaba", dijo Antonio Peregrino Rojo, líder del
sindicato.
Actitud contraria adoptaron los bomberos que se oponen
al sindicato y al emplazamiento a huelga para este viernes, pues cancelaron
la marcha que planearon a las siete de la mañana de ayer de la Estación
Central a la sede del gobierno capitalino.
Los sindicalizados pernoctaron en la plancha y permanecieron
en guardia por si llegaban los granaderos a desalojarlos, pero la amenaza
nunca se cumplió, aunque decenas de patrullas y camiones de la PFP
fueron estacionadas alrededor de su plantón, en el extremo surponiente
del Zócalo. Ahí, bajo la sombra de su carpa, fueron los invitados
non gratos del primer acto público que encabeza el presidente
Fox, luego de la cuarentena de reposo que guardó tras su operación.
Por otro lado, trascendió que la inauguración
de la estación número 12 de la corporación, en la
delegación Xochimilco, quedó suspendida hasta nuevo aviso
debido a la falta de personal por el llamado paro activo que desde
hace dos semanas inició el sindicato de bomberos.
Según bomberos opuestos al sindicato, la inauguración
estaba prevista para ayer, pero debido a que los sindicalizados se han
negado a aceptar los cambios de horario y de estación, el resto
del personal ha tenido que trabajar doble.
"Ellos (los sindicalizados) aseguran que no han descuidado
los servicios de emergencia y que sólo han dejado de hacer las tareas
internas de cada estación, como cocinar y limpiar, pero en realidad
todo eso lo hemos hecho nosotros, hasta en nuestros días de descanso,
como ocurrió, por ejemplo, en el incendio del domingo en el mercado
de Jamaica o en el de una bodega de bicicletas en la Gustavo A. Madero
la semana pasada", comentó Guadalupe Solís, bombero de la
Estación Central.