Fuerzas de EU y GB se internan kilómetro
y medio y ocupan el puerto de Umm Qasr
Avanzan aliados en territorio iraquí
Fuertes explosiones en sur y norte de Irak esta madrugada
Supuesto ataque bacteriológico contra bases estadunidenses en
Kuwait causa pánico en la tropa
AFP, REUTERS Y DPA
Kuwait, viernes 21 de marzo. En la segunda jornada
de la ofensiva bélica para derrocar al presidente iraquí,
Saddam Hussein, este viernes desde el terreno se dio cuenta de fuertes
explosiones en dirección a la sureña ciudad iraquí
de Basora y la norteña ciudad de Mosul.
Horas después se informó que 25 soldados
iraquíes se rindieron la noche del jueves, poco después que
las fuerzas estadunidenses entrarán en Irak, indicó este
viernes un oficial de los infantes de marina.
Sin
embargo la versión fue desmentida por un portavoz militar iraquí:
''el enemigo concentró sus intensos y constantes bombardeos en nuestros
puestos fronterizos en los sectores oeste y sur'', explicó la fuente,
que confirmó el deceso de cuatro soldados iraquíes en el
primer día de guerra.
De acuerdo con reportes de la agencia británica
Reuters, en la madrugada del viernes se produjeron ''grandes explosiones
y bolas de fuego en el horizonte hacia Basora'', al parecer procedentes
de Kuwait.
En tanto, la televisora árabe Al Jazeera reportó
explosiones en Mosul o en su periferia a las 4:30 hora local.
Fuerzas británicas y estadunidenses lanzaron la
invasión contra Irak desde Kuwait y tomaron este jueves el pueblo
fronterizo iraquí de Umm Qasr, según informó la agencia
oficial de noticias kuwaití, Kuna.
''Atravesaron (la frontera entre Kuwait e Irak)", declaró
un oficial que pidió el anonimato. Más de mil hombres de
los marines y del tercer regimiento de infantería atravesaron
la frontera y penetraron más de un kilómetro y medio en territorio
iraquí, apoyados por blindados, los que efectuaron unos 300 disparos.
El pueblo de Umm Qasr es el único puerto marítimo
importante para la entrada de mercancías a Irak. Se localiza a unos
50 kilómetros al sur de la ciudad estratégica de Basora.
Kuna no hizo mención sobre combates y dijo que los soldados iraquíes
se rindieron la noche del jueves local.
Estos
reportes consignaron además que al menos seis misiles iraquíes,
dos de ellos tipo Scud, alcanzaron el norte de Kuwait, donde están
apostados más de 150 mil estadunidenses que participan en la ofensiva
contra Bagdad. Según las autoridades kuwaitíes, dos de ellos
fueron interceptados por los sistemas de protección Patriot y
el resto no provocó víctimas. Fuentes oficiales aseguraron
que dos misiles procedentes de Irak cayeron ''por suerte'' en el mar, cerca
de las costas kuwaitíes.
La fuente aseguró que los dos misiles llegaron
hasta el sector de Al Shuaiba, 80 kilómetros al sur de la ciudad
de Kuwait, donde hay varias refinerías de petróleo. Hasta
el momento no hay información de víctimas. Los otros cuatro
misiles, contrariamente a lo que anunció en un primer momento el
ministerio kuwaití de Defensa, no lo eran, declaró el coronel
Yussef Al Mulla a la televisión. Se trataría de misiles de
medio alcance, quizá prohibidos (Al Samoud), según sospechan
las autoridades de Kuwait, aunque desde Bagdad se rechazaron estas acusaciones.
El corresponsal no pudo precisar el origen de las deflagraciones.
Por séptima vez en las últimas 24 horas,
las sirenas resonaron la noche del jueves en la ciudad de Kuwait, anunciando
la inminencia de un ataque aéreo.
Tras la versión del lanzamiento de los misiles
hacia Kuwait, los soldados estadunidenses y británicos apostados
en el control de carretera de Mutlaa tuvieron un ataque de pánico
y terror, porque pensaron que se trataba de una ataque biológico.
Según las agencias Afp y Reuters, los oficiales
gritaron a sus hombres: ''¡gas, gas, gas!'', mientras en la radio
se informaba sobre el lanzamiento de misiles Scud. Hacia las 10:30
horas local una fuerte explosión se escuchó a pocos kilómetros
de este retén. "Ahora sabemos que esto va en serio. Esto da mucho
miedo, pero estamos listos", dijo el soldado estadunidense Shaun Wyckoff.
Una mujer del personal de servicio se sofocó en
su traje contra agentes químicos y se desmayó. Sus compañeras
no recibieron la autorización de quitarle la máscara antigás
hasta que sonó la señal de que el peligro había pasado
y la mujer pudo ser trasladada fuera del campamento, pálida e inconsciente.
El miedo palpable e histérico de estos soldados
estadunidenses y británicos contrastó con la reacción
de los militares kuwaitíes, a menudo mal equipados y aparentemente
menos conscientes del peligro al que se enfrentan, a pesar de que conocen
mejor que nadie las tácticas de Hussein, quien invadió el
emirato en 1990.
Por otro lado, un responsable militar kuwaití afirmó
este jueves que los iraquíes habían incendiado pozos petroleros
en el sur de Irak tras el inicio de la ofensiva estadunidense. "Sí,
incendiaron algunos pozos petroleros, pero no conocemos el número",
declaró a la Afp este responsable, que pidió el anonimato.
La televisión estatal kuwaití indicó anteriormente
que Irak prendió fuego a 15 pozos en Basora, al sur del país,
cerca de la frontera con Kuwait.