La historia basada en las memorias de Wladyslaw
Szpilman se estrena hoy en México
Roman Polanski: en El pianista busqué
evitar la simulación hollywoodense
Siempre supe que haría una cinta sobre este doloroso
periodo de la historia polaca, dice el director
El filme ganó la Palma de Oro en Cannes 2002
y ahora peleará siete premios Oscar
JORGE CABALLERO
Basada en las memorias de Wladyslaw Szpilman y dirigida
por el controversial Roman Polanski, hoy se estrena El pianista.
Polanski comenta cómo surgió la idea: "Siempre supe que un
día haría una película sobre este doloroso periodo
de la historia polaca, la Segunda Guerra Mundial, pero no quería
que fuera autobiográfica. Tan pronto como abrí los primeros
capítulos de la novela El pianista supe que sería
el tema de mi próxima película. Era la historia que estaba
buscando: a pesar de todo el horror, es optimista y está llena de
esperanza".
El
largometraje narra el periodo de vida de Wladyslaw Szpilman, brillante
pianista polaco judío, quien escapa de la deportación en
la Segunda Guerrra Mundial en Varsovia, pero es obligado a vivir en el
corazón del gueto de la ciudad, donde comparte el sufrimiento, la
humillación y los esfuerzos. Consigue escapar y se esconde en las
ruinas de la capital, donde un oficial alemán acude en su ayuda
y le ayuda a sobrevivir.
Roman Polanki agrega: "Sobreviví al bombardeo de
Varsovia y deseaba recrear todo lo que recordaba de mi infancia. Quería
aproximarme a la realidad tanto como fuera posible y evitar cualquier simulación
al estilo de Hollywood".
El director de El bebé de Rosemary y La
danza de los vampiros agrega: "Además de mis propias experiencias,
también podía basarme en la autenticidad de la historia de
Szpilman, que escribió poco después de la guerra. Por eso
es tan fuerte y tan auténtica. Muestra la realidad de ese periodo
con una objetividad sorprendente, casi escalofriante. En su libro, hay
polacos buenos y polacos malos, judíos buenos y judíos malos,
alemanes buenos y alemanes malos".
Polanski reveló que para hacer esta cinta "obviamente
consultamos con historiadores y supervivientes del gueto. También
le pasé a todo el equipo varios documentales sobre el gueto de Varsovia".
El pianista fue galardonada con la Palma de Oro
a la mejor película en la pasada emisión del Festival de
Cine de Cannes 2002; tiene siete postulaciones a los premios Oscar: mejor
película, mejor director (Polanski), mejor actor (Adrien Brody),
mejor edición, mejor fotografía, mejor guión adaptado
y mejor vestuario (por cierto, Roman Polanski no asistirá a la ceremonia
de premiación de los Oscares porque en 1978 reveló que tuvo
sexo con una adolescente de 13 años y es considerado prófugo
de Estados Unidos). Además, El pianista ganó el Goya
2002 a la mejor película extranjera. Estuvo postulada a los Globos
de Oro en las categorías: mejor fotografía y director; en
los premios Europa resultó mejor actor y mejor película,
y recientemente la Asociación Nacional de Críticos de Cine
estadunidense la postuló en las categorías de mejor película,
actor, director y guión.
Además de Adrien Brody, el reparto está
integrado por Thomas Skretschman, Frank Finlay, Maureen Lipman, Ed Stoppard,
Julia Rayner, Jessica Kate Meyer, Emilia Fox y Ruth Platt.
Una vida en dos partes
Wladyslaw Szpilman tenía 27 años cuando
estalló la guerra y ya era reconocido como uno de los más
destacados pianistas polacos de conciertos. Estaba interpretando el Nocturno
en do menor sostenido de Chopin en la radio estatal polaca cuando la
Luftwaffe bombardeó la emisora de radio hasta arrasarla.
Como judíos que eran, Szpilman y su familia fueron
desalojados de su apartamento y apiñados junto con otros miles en
el gueto de Varsovia, donde el pianista se ganó la vida como pudo,
principalmente tocando en bares, donde se reunían cronistas y traficantes
del mercado negro.
Fue uno de estos cronistas judíos quien salvó
a Szpilman del tren que llevó a su familia a la muerte en los campos
de concentración. Gracias a una red de conocidos de antes de la
guerra, a soldados de la resistencia y, sorprendentemente, a la ayuda de
un oficial alemán, Szpilman sobrevivió a la guerra.
Después de la conflagración, la radio polaca
volvió a funcionar, con grandes apuros, y Szpilman completó
el Nocturno de Chopin que había sido interrumpido tan brutalmente
seis años atrás. El pianista escribió sus memorias
en 1946, pero las autoridades comunistas prohibieron el libro. El hijo
de Szpilman, quien nunca había hablado con su padre de la guerra
-al igual que el propio Polanski nunca lo hizo con el suyo-, encontró
el manuscrito y reditó las memorias en 1999, que recibieron gran
aclamación internacional.
El libro de Szpilman es un vivo y gratificante relato
de la vida en el gueto y de cómo, sorprendentemente, logró
escapar y sobrevivir. La fuerza del tema y de las emociones que genera,
junto con la amplia gama de atractivos personajes secundarios, lo convirtieron
en una obvia fuente de inspiración para Polanski, que ya se había
encontrado con Szpilman en dos ocasiones.
En su tercer encuentro, a principios de 2000, Szpilman
afirmó que era un gran placer para él que su libro se convirtiera
en película y que fuera su compatriota quien la dirigiera. Sin embargo,
antes de que comenzara el rodaje de El pianista, Wladyslaw Szpilman
falleció, el 6 de julio de 2000.