Defensores de derechos humanos piden que la PGJDF investigue el caso
Se compromete la UNAM a castigar a responsables de ataques homofóbicos
Condena cualquier forma de discriminación y abre línea telefónica para recibir quejas
KARINA AVILES Y CLAUDIA HERRERA BELTRAN
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) se comprometió ayer a investigar y, en su caso, a sancionar con "el mayor rigor" a los integrantes del grupo homofóbico denominado Movimiento Anti-Putos (MAP), en tanto organismos defensores de derechos humanos repudiaron estos hechos e hicieron un llamado a la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) para que intervenga.
En un comunicado de la institución enviado a este diario, la máxima casa de estudios deploró "cualquier actitud de violencia física, verbal o de daño moral en contra de los integrantes de su comunidad y señala que aquella denuncia que pudiera ser presentada sobre actitudes antiuniversitarias como la referida será debidamente investigada y, en su caso, sancionada con el mayor rigor".
La institución reiteró que siempre ha sido un espacio abierto a la tolerancia, en el que se respetan ideologías, credos, razas o preferencias, por lo que cualquier tipo de discriminación resulta "absolutamente inaceptable".
Informó que en la Unidad para la Atención y Seguimiento de Denuncias dentro de la UNAM, dependiente de la oficina de la abogada general, se pueden presentar quejas con el compromiso de mantener el anonimato si así se prefiere. A las mismas se les brinda un estricto seguimiento institucional. El teléfono de la unidad es 56-22-63-78.
Por otro lado, precisó que a la fecha, el área jurídica de la institución no tiene registro de alguna denuncia sobre este caso.
En tanto, la abogada de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, Adriana Carmona, señaló que las denuncias que hizo el Grupo Universitario por la Diversidad Sexual se pueden seguir de oficio por el delito de discriminación, que recientemente fue tipificado en el Código Penal del Distrito Federal.
A su vez, Agnieszka Raczynska, coordinadora general del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, reprobó las agresiones cometidas contra jóvenes homosexuales y dijo que se inscriben en la cultura de intolerancia y discriminación que prevalece en el país.
Carmona consideró que los grupos de ultraderecha se han visto "fortalecidos" en este gobierno y por eso es "urgente" tomar acciones para evitar que sigan las agresiones y que se castigue a los culpables.
Señaló que las autoridades del Distrito Federal pueden actuar de oficio para hacer una indagación "muy amplia", porque el tema de la discriminación no puede ser investigado como cualquier delito.
Indicó que si los jóvenes que supuestamente fueron víctimas de violencia presentaron la denuncia por lesiones, la procuraduría del Distrito Federal tiene que iniciar otro proceso por el delito de discriminación, que está previsto en el Código Penal.
Explicó que a pesar de las campañas que han venido haciendo los organismos defensores de derechos humanos en contra de la discriminación, estas prácticas son muy comunes en México.
Recordó que administraciones panistas en Aguascalientes llegaron a prohibir el acceso a homosexuales a un balneario y en la ciudad de Tecate, Baja California, se intentó, sin éxito, imponer el "toque de queda" contra esta población.
Razynska dijo que es "terrible" que se den estos casos en cualquier lugar, pero consideró que es aún más grave que ocurra en Ciudad Universitaria, donde se tienen que dar un proceso de reflexión, de tolerancia y de fomento a la no violencia.
Para esta activista, la UNAM tiene que investigar si hay personal de seguridad involucrado en estos hechos, pero también la procuraduría capitalina tiene que iniciar una investigación, porque este tipo de actos violentos no se pueden tolerar.
