La película de Francisco Athié
se exhibirá el lunes 17 y el martes 18 en la Cineteca
Vera aborda la cosmogonía maya mediante
la tecnología de punta
Los realizadores deben crear imágenes que no
dañen a las personas, señala el director
RENATO RAVELO
''El trabajo de los cineastas es hacer imágenes
que no dañen a las personas", expresó Francisco Athié,
escritor, director y productor de Vera, película que busca
encontrar otros elementos expositivos en la cinematografía nacional,
para lo cual acude a lo más avanzado de la tecnología y aborda
el tema remoto de la cosmogonía maya. Se trata de un proyecto concebido
hace 16 años que ahora se exhibirá durante la versión
41 de la Muestra Internacional de Cine, el lunes 17 y el martes 18.
En
el lapso de maduración de Vera, señaló Athié
en reunión con la prensa, ''descubrí un mundo de imágenes
que tienen una solvencia que permitirá, quizá en un futuro,
que generaciones más aptas puedan generar otro tipo de formas de
narrar y que inclusive éstas lleguen a ser populares".
Estas expresiones de Athié sobre Vera tienen
que ver con la recepción que la película tuvo de la crítica
durante su estreno, el año pasado, en la Muestra de Cine Mexicano
de Guadalajara, las cuales fueron en algunos casos desfavorables por el
uso de tecnología o bien por el sentido onírico de la cinta.
La proyección en la Cineteca, señaló
por su parte Gerardo Salcedo, ''será ocasión para que un
público mayor conozca otras formas de narración. En la actualidad
si yo veo una bola de fuego que persigue a Pierce Brossnan, Bruce Willis
o a cualquiera de estos actores, perfectamente puedo dormirme porque sé
que se van a salvar".
Difícilmente, reconoció Athie, ''la cinta
lograría una exhibición para que la vean al menos cientos
de espectadores, y en todo caso estaría destinada a exhibirse en
una pequeña sala de cineclub".
Viaje guiado por un alushe
Vera, película en la que actúan Marco
Antonio Arzate y el bailarín de danza Butho, Urara Kusanagi, tendrá
posteriormente un estreno en mayo y participará en los festivales
de Toulouse y Stuttgart, entre otros.
''Podemos ver cómo funciona con 30 o 40 copias.
En Francia y Alemania estarán interesados en promoverla, porque
la parte tecnológica en imagen y música se hizo con apoyo
de esos países", dijo Athié.
Fueron Die Versiberte Eitelkeit, The virtual character
project, Filmakademie y Arkamy's sound process, las instancias que permitieron
al director de Lolo (1992), presentar ese viaje que tuvo como eje
dos espirales que llevan al protagonista al inframundo, ''de donde solamente
se puede salir cuando construyes tu tótem, es decir, lo que eres
y debes hacer en el mundo".
El viaje es guiado, explicó, ''por un guía
que es un alushe (duende maya) que, a diferencia de las hadas occidentales,
no tiene ese sentido absoluto de lo bueno y lo malo: ayuda, pero también
hace travesuras".