De Querétaro a Morelia empleó
cuatro horas con 40 minutos
Irving Aguilar se adjudicó la etapa 14 de la
vuelta ciclista
El oaxaqueño Jesús Zárate se mantiene
en el liderato general
Morelia, Mich., 8 de marzo. El ciclista Irving
Aguilar resurgió como el ave fénix tras ganar la decimocuarta
etapa de la Vuelta de las Américas, que se disputó de Querétaro
a Morelia, con un recorrido de 192 kilómetros, empleando un tiempo
de 4:40.23 horas.
El
triunfo le permitió a Irving, representante de la región
Occidente, recuperar 11 lugares y colocarse en el noveno sitio de la clasificación
general, a tres minutos y 20 segundos del líder Jesús Zárate,
de Oaxaca, quien se mantiene en la cima por décima jornada consecutiva.
La primera volante del día fue para el colombiano
Leonardo Duque, seguido por Miguel Meza, de la selección nacional,
y el ruso Alexei Medvedev; sin embargo, la punta cambió 25 kilómetros
adelante, en la segunda meta intermedia del día, que ganó
Sergey Lavrenenko, del equipo de Kazajstán, quien junto con Irving,
y su compatriota Andrey Medyannikov se dieron a la fuga sacando minuto
y medio de ventaja al grueso del pelotón que nunca pudo alcanzarlos.
El trío de pedalistas trabajaron juntos alrededor
de 100 kilómetros, pero ocho antes de la meta final, pactada frente
al palacio de gobierno de Morelia, el mexicano orquestó la fuga
triunfal con más de medio minuto de ventaja sobre los kazajstanos.
Este domingo se disputa la etapa reina (15), entre Morelia
y Toluca, de 223.5 kilómetros y dos puertos de montaña.
Adiós a Muciño
Familiares y amigos ofrecieron un último adiós
al ex ciclista César Augusto Muciño, quien la víspera
perdiera la vida al ser arrollado por un vehículo en Querétaro.
Su compañero Adán Juárez, consternado,
señaló que "lo más penoso es que por 360 mil pesos
salió libre el conductor del vehículo'', quien presuntamente
manejaba en estado de ebriedad un camión de pasajeros de una línea
local.
Los allegados de Muciño lo recordaron como un hombre
leal y entusiasta en el trabajo, así como por lo mostrado en su
carrera deportiva en la que tuvo la oportunidad de integrar la selección
nacional que asistió a Barcelona 92, en cuya prueba del kilómetro
contrarreloj se cayó, al no tener el arrancador bien puesto, lo
que propició su retiro.
Los restos de César fueron trasladados al Panteón
Español para su cremación.