A partir de las 5 horas, despliegue de fuerzas
de seguridad en 11 municipios: Cadena Morales
Prevén IEEM y partidos abstencionismo de por
lo menos 50% en comicios de hoy
ISRAEL DAVILA Y RENATO DAVALOS CORRESPONSAL Y ENVIADO
Toluca, Mex., 8 de marzo. La probable aparición
de la violencia es la cuestión en los comicios mexiquenses, definidos
por el desencanto ciudadano, en una elección en la que se estima
un abstencionismo, de acuerdo con el Instituto Electoral del Estado de
México (IEEM) y los propios partidos, de por lo menos 50 por ciento,
es decir, 4 de los 8 millones del listado nominal.
Los electores presenciaron una guerra sucia, hoy
inconclusa, que el máximo órgano electoral fue incapaz de
detener. Las acusaciones entre partidos no cesaron ni en la víspera
de una elección en que las autoridades estatales están en
alerta extrema en más de 20 municipios. Los más emblemáticos,
San Salvador Atenco y Chimalhuacán, marcados por una historia que
les ubica en esa frontera en la que comparten problemas y vecindades. El
secretario de Gobierno estatal Manuel Cadena Morales, dijo ayer que la
policía no entrará a Atenco, permanecerá en los alrededores.
En Chimalhuacán, precisó, se tiene prevista la vigilancia
policiaca dentro del ayuntamiento.
Fueron 40 días oficiales de una campaña
en que se entreveraron líos de alcoba e inclusive propuestas incumplibles
como aquella de los priístas sobre la pena de muerte. Del flanco
panista, la promesa de un tren expreso, la presencia de la Policía
Federal Preventiva (PFP) o inclusive como el toluqueño Armando Enríquez,
quien se atrevió a proponer que habría un "grupo táctico"
para el combate a la delincuencia. Los programas del jefe de Gobierno del
Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, fueron el
sendero por donde caminaron los perredistas, especialmente en los municipios
conurbados a la capital del país.
Estos comicios en el estado electoral más importante
del país estuvieron precedidos por recriminaciones contra el presidente
Vicente Fox y su esposa Marta Sahagún, y contra el gobernador Arturo
Montiel, quien tiene desde hace mucho tiempo la mira puesta en 2006.
En rueda de prensa, Cadena Morales prometió que
la policía no actuará en forma coercitiva sino preventiva.
La PFP, aclaró, no intervendrá y respecto al Ejército,
señaló que se encuentra listo para cualquier eventualidad,
siempre que solicite su intervención el IEEM.
Cadena Morales respondió a los partidos que pidieron
la presencia policiaca, que el gobierno estatal "será cuidadoso"
con la seguridad, para que luego "no se nos acuse de querer intimidar la
votación". El despliegue de fuerzas se dará según
las circunstancias y de lo que digan los partidos y el IEEM. Hizo un llamado
a las autoridades federales a participar en el ámbito de sus responsabilidades
y no contribuir a enrarecer el ambiente sino a fortalecerlo.
El sur del estado es uno de los focos rojos, en
los que tanto el IEEM como la autoridad estatal prevén escenarios
de violencia. Luvianos, Tejupilco, Tatlaya y Amatepec figuran en ese mapa
violento. En el oriente mexiquense, Valle de Chalco, Chalco, Ixtapaluca,
La Paz, Ecatepec, Nezahualcóyotl y Texcoco.
Cadena Morales informó al respecto que desde las
cinco horas de mañana empezarán a llegar los cuerpos de seguridad
a esos municipios. Los partidos conocen la ley y saben que si transgreden
la paz y la tranquilidad, seguramente la ciudadanía cobrará
la factura en las urnas, apuntó.
Los perredistas, en los sondeos que desplegaron a lo largo
de la campaña con empresas como Parametría, previeron que
el abstencionismo será de por lo menos 50 por ciento. Los panistas
incluso llegaron a estimar que podría rebasar 60 por ciento. Y el
IEEM, en una encuesta que encargó a finales de febrero y principios
de marzo, dio a conocer que un tercio de la población ni siquiera
conocía la fecha de las elecciones.
En ese muestreo, la gente identificó al Instituto
Federal Electoral como el órgano encargado de los comicios y no
al IEEM. Apenas 58 por ciento externó su convicción de concurrir
a las urnas. El motivo esencial de la deserción estriba en la desconfianza
que hay en el proceso. La mitad de los encuestados reveló que las
trampas constituyen el signo primordial de estos comicios.
Un elemento esencial que gravitó en el desencanto
mexiquense y en el descrédito de los partidos fue la guerra sucia
que emprendieron desde el arranque del proceso, a finales del año
anterior.
Panfletos nocturnos, cómics, spots radiales
y televisivos, acusaciones contra el Presidente de la República
y su esposa, el gobernador Arturo Montiel y Rosario Robles, enrarecieron
un horizonte que hoy culmina con el proceso en el que se perfilará,
en buena medida, la elección del 6 de julio venidero.
Las agresiones se desbordaron hasta el punto del atentado
aún no esclarecido contra María Luisa Farrera Paniagua, presidenta
del IEEM. Se incluyó también el navajazo al presidente
del Comité Municipal del Partido Revolucionario Institucional en
Otzoloapan; la muerte de dos priístas en Malinalco; las riñas
callejeras entre brigadistas panistas y priístas en Coacalco, y
las agresiones a los funcionarios electorales en Valle de Chalco.
Pero también a ese descrédito contribuyeron
las acusaciones recíprocas entre los partidos sobre reparto de materiales
de construcción y despensas. A ello se sumaron las acciones del
procurador Alfonso Navarrete Prida, que ordenó la declaración
ante el Ministerio Público del alcalde y el candidato panista en
Ecatepec, además de sus hipótesis sobre el "autoatentado"
de Farrera Paniagua.
Las veleidades políticas partidistas explicaron
que, por ejemplo, en Metepec, el perredismo existente en el municipio se
volcara a la campaña del candidato priísta. Inclusive, el
dirigente estatal priísta, Isidro Pastor, denunció hoy que
varios de sus correligionarios fueron citados tres días por la Fiscalía
Especializada en Delitos Electorales.
Frente a esa batalla negra, el IEEM no pudo integrar
un solo expediente para contrarrestar la guerra que emprendieron los partidos
y candidatos.
Los partidos tienen previsto dar a conocer, después
del cierre de casillas, a las 18 horas, los resultados de las encuestas
de salida que contrataron para definir las tendencias de un proceso que
no está exento de los conflictos poselectorales.
Lo que está en juego
Elecciones en el estado de México
Municipios: 124
Distritos: 45
Electores: 8 millones 147 mil 617
Candidatos: 14 mil 718
Casillas: 14 mil 127
Funcionarios de casilla
112 mil 985
Representantes de partidos: 484 mil 279
Boletas:
17 millones 212 mil