No había utilizado este mecanismo desde
2000; costoso, el alto nivel de reservas, advierten
Excedentes de divisas, al mercado de cambios: Hacienda
y BdeM
Destinará parte de los recursos extras
por la exportación de petróleo El peso cierra en
11.21 por dólar al menudeo; la medida representa intervención
en las cotizaciones, consideran analistas
JUAN ANTONIO ZUÑIGA, ANTONIO CASTELLANOS Y ROBERTO
GONZALEZ
El gobierno federal destinará al mercado local
de cambios parte de los excedentes que obtenga este año por la exportación
petrolera, debido a que el nivel alcanzado en sus reservas de divisas "en
ocasiones ha resultado en costos financieros importantes", y "los beneficios
de una acumulación adicional serán progresivamente menores".
La última vez que usó reservas fue en 2000,
cuando fue retirado el mecanismo de destinar hasta 200 millones de dólares
cuando el deslizamiento rebasaba 2 por ciento diario. Esta medida inició
su aplicación en 1998.
Mediante un comunicado, la Comisión de Cambios,
de la que forman parte la Secretaría de Hacienda y el Banco de México,
informó que analiza la puesta en práctica de un mecanismo
para canalizar al mercado cambiario "una fracción de los flujos
de divisas que podrían potencialmente acrecentar las reservas",
de tal manera que éstas detendrán su ritmo de crecimiento.
Pero no determinó una fecha para su entrada en vigor.
El
secretario de Hacienda y Crédito Público, Francisco Gil Díaz,
estimó en 44 mil 600 millones de pesos -poco más de 4 mil
millones de dólares al tipo de cambio actual- el monto de los excedentes
de divisas por la venta externa de crudo.
Esa cantidad se distribuirá de la siguiente forma:
15 mil 440 millones de pesos (mil 363.2 millones de dólares) a gasto
no programable; otros 15 mil 125 millones (mil 361 millones de dólares)
a compensar impuestos que se eliminaron en diciembre, y de los 14 mil 600
millones restantes (mil 290 millones de dólares) se canalizarán
7 mil a estados y municipios. Al fondo petrolero y para el pago de deuda
se destinarán unos 7 mil 895 millones de pesos, como lo establece
el artículo 21 del Presupuesto de Egresos de 2003, aprobado por
el Congreso de la Unión.
El anuncio de esta medida, la de mayor relevancia en materia
de política monetaria de este gobierno, redujo inmediatamente las
presiones sobre el tipo de cambio durante una jornada en la que el peso
recuperó seis centavos respecto del dólar en las transacciones
de ventanilla, ocho en las interbancarias y casi 12 centavos en las operaciones
para liquidar deudas en moneda extranjera.
Las cotizaciones a la venta cerraron ayer así:
11.21 pesos por dólar al menudeo, 11.10 en las operaciones superiores
a 10 mil dólares y 11.1064 pesos por divisa estadunidense en el
llamado dólar fix del propio banco central.
Aun con esto, el peso no logró recuperar el terreno
perdido, particularmente durante esta semana, y se colocó en un
nivel devaluatorio de 6.4 por ciento respecto del cierre de 2002 y de 22.3
por ciento en relación con la paridad que tuvo con el dólar
el 7 de marzo del año pasado.
Fracasó el corto
En opinión del especialista Alejandro Castillo
Morales, director general de la empresa de consultoría Análisis
Financiero, la búsqueda de este nuevo mecanismo para evitar que
la depreciación cambiaria incida en la inflación de este
año, responde al fracaso del corto aplicado por el Banco de México
en las actuales circunstancias, y modifica la actitud de Hacienda -que
preside la Comisión de Cambios- de no intervenir en el mercado de
divisas.
Además, apuntó, "las altas reservas internacionales
siempre son un botín interesante para los especuladores que saben
que la economía mexicana no es tan fuerte como se dice, y sólo
deben esperar para apropiarse de ellas".
Al 28 de febrero pasado, el nivel de las reservas internacionales
de divisas de México se ubicó en 50 mil 315 millones de dólares,
el más alto rango alcanzado desde la fundación del Banco
de México en 1925.
En el contexto de una política transexenal, la
acumulación de reservas como objetivo prioritario dio propiamente
inicio en 1996, se mantuvo durante todo el gobierno de Ernesto Zedilllo
Ponce de León, y ha continuado en el transcurso de la administración
del presidente Vicente Fox Quesada.
Según los informes del Banco de México,
de 1996 a la fecha, la reserva internacional neta de divisas del país
se incrementó en 34 mil 429 millones de dólares, luego de
que en 1995 tuvo que ser reconstituida con recursos procedentes del Fondo
Monetario Internacional y del Tesoro de Estados Unidos, en calidad de préstamo
por la salida de 28 mil millones de dólares ocurrida al término
de 1994.
Durante el gobierno del presidente Vicente Fox, la acumulación
de reservas ha sido de 16 mil 760 millones de dólares, de los cuales
2 mil 331 millones ingresaron entre el primero de enero y el 28 de febrero
de 2003.
Reservas y devaluación
La acumulación de reservas de divisas iniciada
en 1996 no detuvo la devaluación continua del peso frente al dólar,
pero constituyó un factor determinante para un deslizamiento más
ordenado de la moneda nacional respecto de la divisa estadunidense bajo
el régimen de libre flotación. Incluso la moneda nacional,
en la era del nuevo peso, se revaluó en los años de 1999
y 2001, y prácticamente terminó como inició en 2000.
Según el seguimiento oficial del dólar fix,
que elabora el Banco de México, del 29 de diciembre de 1995 al 7
de marzo de 2003, el peso mexicano perdió 45.3 por ciento de su
valor respecto del dólar. Casi la mitad de esa devaluación
ocurrió entre septiembre de 2002 y marzo del año en curso.