Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Jueves 13 de febrero de 2003
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Política

ASTILLERO

Julio Hernández López

Héroe a destiempo

Del entreguismo Marlboro a la ruptura sin proyecto
Pacifismo por despecho

MAL MOMENTO HA ESCOGIDO el Presidente de México para convertirse en apasionado pacifista. En otras circunstancias y con otros antecedentes, la postura de este mandatario, contraria al belicismo estadunidense, habría merecido apoyo popular entusiasta, y su figura gallarda sería icono en camisetas juveniles y manifestaciones de protesta ("šEl mundo no es un ring de box, ha dicho el presidente Fox!", podría ser uno de los coros de esa hipotética izquierda con botas en marcha del próximo sábado). Pero no hay tal desbordamiento popular en apoyo al recién converso a una versión guanajuatense del hippismo, sino, por el contrario, un retraído temor, una lastimosa sensación de que el Presidente de los Estados Unidos Mexicanos está llevando sus disparates, tan noblemente tolerados en el ámbito doméstico, a terrenos altamente peligrosos en la relación vital con Estados Unidos.

COMO LO SABE hasta Vicente Fox Quesada, la apuesta inicial del canciller Jorge Castañeda consistió en una apasionada entrega al interés estadunidense, sin opciones de graciosa huida. Los presidentes Marlboro, tan semejantes en lo rural, parecían tener un destino común manifiesto, que luego de encuentros rancheros y apapachos públicos fue bautizado como Alianza para la Prosperidad. Entre otras cosas, México estaba dispuesto a hacer trizas su tradición de diplomacia independiente y ladinamente respondona, a cambio de la firma de un tratado migratorio que regularizara a millones de mexicanos que viven en el país vecino y que abriera la frontera a flujos organizados de mano de obra mexicana. El 11 de septiembre histórico derribó el sueño de la alianza Texas-Guanajuato (es posible que eso lo sepa hasta Ernesto Derbez, el gran internacionalista que cree que la doctrina Estrada fue creación de Benito Juárez). Y de entonces a la fecha, puros malos tragos, amarguras, y un gran despecho creciente (como de novia vestida y alborotada a la que a la entrada de la iglesia le avisan que siempre no habrá boda, según comentario hecho meses atrás por un alto funcionario foxista a este tecleador incapaz de delatar a sus fuentes en peligro).

EN ESA RUTA de pasiones desbordadas, el presidente Fox ha tratado de demostrar al novio texano incumplido que tiene pretendientes europeos que sí saben apreciar lo que el otro desdeñó. Hasta ahora, los coqueteos trasatlánticos poco habían sido atendidos por el vecino más bien embebido en echarle bronca a otros habitantes de la aldea global. Pero ahora que el pleito va en serio, y que el reloj adosado a la dinamita va en cuenta regresiva, el vecino casi pariente (primos, se dicen) reclama ayuda (solidaridad, dice el embajador Tony Garza) a quien se había dicho su socio, su amigo, su cómplice y todo (y en la calle codo a codo, somos mucho más que Fox) y que ahora se porta primero esquivo y luego militantemente adverso.

NO SON, COMO podrá verse, las condiciones ni el momento para que el Clark Kent de Guanajuato se convierta en el Superman del traspatio. El gobierno de México ha sacrificado en un proyecto fallido la tradición y las ventajas de una política exterior exitosa y respetable. De la mano de las ambiciones personales del grandilocuente Castañeda, Fox permitió que se instalara una nueva diplomacia que presuntamente nos ubicaría en la nómina de los grandes actores mundiales, los que deciden el rumbo del planeta. En esos sueños megalómanos, el castañedismo-foxismo se topó con una increíble omisión mexicana de décadas: no ocupábamos el asiento de miembro no permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas al que con mucha facilidad podría llegar un país como el nuestro. šUna más de las torpezas del pasado a las que se pondría inmediato remedio! Pues sí: hoy México está instalado en el citado Consejo de Seguridad, con tan mala pata que haga lo que haga a la hora de las votaciones estratégicas parece imposible que no le truene un cuete de tamaño imperial.

LO PEOR DE TODO es que, al menos por lo que se ha visto en días recientes, y en especial ayer, el presidente Fox pareciera haber entrado en una etapa de depresiones constantes que lo llevan a peligrosas explosiones de euforia personal y de negación de la realidad. Desconectado de la realidad, instala diálogos campesinos históricos donde sólo hay acarreo y desdén, cree que las rechiflas de sus opositores son música de viento instrumentada por fotógrafos deseosos de limpiar el campo visual para susastillero_fox_ciencia04 tomas periodísticas, promueve campañas de analfabetismo como vía a la felicidad, o se vuelve pacifista de puño en alto sin darse cuenta de los riesgos de la desestabilización cambiaria, del retiro de inversión y capitales, del latigazo que significaría detener hoy a algunos cientos o miles de mexicanos ilegales y deportarlos, de cerrar de verdad la frontera a la migración laboral que sigue siendo tolerada... (šBuu, Jorgito: esta columna jamás pensó llegar a preguntarse qué sería peor, una ambición con proyecto, así fuera personal, como el tuyo, o el desierto intelectual, la precariedad al Derbez, la apuesta presidencial pacifista al aire, culto a la imagen doméstica a riesgo de castigos imperiales ejemplares; espero que este viernes, en Guadalajara, en el ITESO, alumbres esas ignorancias!)

TAL VEZ POR TODO ELLO es que no son plausibles las arengas pacifistas de oportunidad hechas en Los Pinos en ceremonias de entrega de premios de investigación científica. No es ni puede ser sincera la postura contraria a los excesos del imperio, cuando hace poco se estaba a favor de ellos y en más de una ocasión ("comes y te vas") se fue instrumento burdo de esos intereses.

NO PUEDE BAJAR la cortina este changarro de análisis político por docena sin preguntarse exactamente qué quiso decir el Presidente de México ayer cuando, luego del "no a la guerra, sí a la paz", dijo que "sí al diálogo, al consenso y a provocar una reunión de las partes que tienen posiciones diferentes, a fin de que tengamos consensos y unanimidad en esta búsqueda permanente de nuestro país por la paz mundial". Ya antes se ofreció para unificar las Coreas, Ƒahora pretenderá Fox "provocar una reunión" entre Bush y Hussein, para que "tengamos consensos y unanimidad" en la "búsqueda permanente" de la paz mundial?

ƑY EL NOMBRAMIENTO de Felipillo Banobras, y la rebelión boliviana por los impuestos, y la señora Marta convocando a rezar la oración de la serenidad, y Labastida pensando si quiere ser diputado y acaso coordinador en San Lázaro, y los pleitos perredistas interminables, y Julio Frenk ante legisladores? Pues nada, que, por hoy, es todo.

Fax: 5605-2099 [email protected]

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