Si borráramos del mapa al gobierno y al Legislativo, "nada pasaría", afirma Prieto
Temen empresarios que Fox no logre reforma alguna
DAVID ZUÑIGA
La incertidumbre internacional y la falta de credibilidad en que ha caído el país por no aprobar las reformas estructurales provocarán que este año las inversiones sigan replegadas, advirtió el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), Javier Prieto de la Fuente.
En entrevista, el dirigente reconoció que los empresarios están cada vez más preocupados por la posibilidad de que el sexenio de Vicente Fox termine sin que se apruebe una sola de las reformas que ha planteado, como la fiscal, la energética y la laboral.
"Ante el riesgo de que esta parálisis se extienda hasta 2006, el sector empresarial busca consensos no sólo con las fracciones legislativas, sino con los gobernadores para comprometerlos y convencerlos de enfrentar de una vez los problemas de México. Si pretendemos que los problemas de México se empiecen a resolver después de las elecciones, cuando tengamos un nuevo Legislativo, estamos perdiendo el tiempo; se nos va a acabar el sexenio sin resolver nada."
En cuanto a la posibilidad de aplicar un programa económico de contingencia ante la guerra de Estados Unidos contra Irak, el dirigente señaló que la mejor protección que puede tener el país es destrabar la discusión sobre las llamadas reformas estructurales, pues México no puede limitarse a mantener estables algunas variables macroeconómicas sin solucionar problemas de fondo.
"El problema es grave porque en dos años no generamos empleo; seguimos con un crecimiento inercial, sin hacer nada. Es más: si mañana desapareciéramos a la clase política seguiríamos creciendo 2 o 3 por ciento, independientemente de que existiera el gobierno federal o el Legislativo; si los borráramos del mapa no pasaría nada. Esto quiere decir que el resto de la sociedad no está haciendo un esfuerzo para que esto cambie."
Prieto de la Fuente, quien dejará la presidencia de la Concamin el próximo mes, descartó que la guerra contra Irak pueda hacer que se dispare el precio del dólar; sin embargo, consideró que el nuevo corto aplicado por el Banco de México no necesariamente resolverá los problemas de inflación del país, ya que éstos no se deben exclusivamente al tipo de cambio. Asimismo descartó que este año se logren las metas de crecimiento económico y pronosticó que, en el mejor de los casos, el PIB avanzará sólo 2.8 por ciento.
El presidente de la Concamin fue el único dirigente empresarial que acompañó a Vicente Fox en su reciente gira por Europa. Ahí percibió, dijo, que los empresarios extranjeros aún confían en el potencial de México por su estabilidad macroeconómica y su cercanía con Estados Unidos; sin embargo, también les preocupa la inseguridad, la falta de reformas, la excesiva regulación y la burocracia "y no nos van a esperar toda la vida a que tomemos decisiones; por eso se están llevando sus inversiones a China y a lo que era Alemania Oriental". China, agregó, capta tres veces más inversión extranjera que México.
A esto hay que agregar los cambios estructurales que ha anunciado (el presidente brasileño Luiz Inacio) Lula da Silva. "Sería ridículo que los inversionistas empezaran a confiar más en un nuevo gobierno de izquierda que se está abriendo."
