El procurador sinaloense revela planes para restructurar la dependencia
El "modelo policial, agotado"; urge "inventar algo": González Mendívil
Sostiene que se busca especializar a agentes y desterrar las oficinas todólogas
GUSTAVO CASTILLO GARCIA ENVIADO
Culiacan, Sin., 3 de febrero. Pese a que en 2002 ocurrió el menor número de homicidios (485) en las dos décadas recientes, y que la cifra de plagios disminuyó casi a cero, el procurador de Justicia de Sinaloa, Oscar Fidel González Mendívil, afirma que el "modelo policial está agotado" y que es necesario "inventar algo".
González Mendívil es procurador del estado que produce la mayor cantidad de mariguana en México, de la entidad donde al menos 70 por ciento de los homicidios están ligados al narcotráfico, y donde, no deja de reconocer, que la corrupción golpea los proyectos de procuración de justicia.
Por ello, reveló a La Jornada que existe un proyecto de transformación integral de la Procuraduría General de Justicia de Sinaloa (PGJS). Los elementos de la Policía Ministerial se podrían disminuir a casi 50 por ciento, y los que se queden gradualmente transformarlos en investigadores especializados y constituirlos en pequeños grupos de trabajo altamente supervisados para evitar la corrupción, mientras los agentes del Ministerio Público estarán asignados por áreas delictivas y bajo nuevos esquemas operativos.
La intención gubernamental es crear grupos como el de antisecuestros, integrados por 50 elementos, dedicados a combatir un solo delito.
La actuación del grupo antisecuestros le ha valido a las autoridades de Sinaloa el reconocimiento de autoridades nacionales y de otras entidades, a tal grado que al menos 24 procuradurías de justicia han buscado la asesoría de éstos para conformar sus propios cuerpos de lucha contra el plagio.
La conformación de un grupo especial dedicado a secuestros, al igual que en materia de homicidios, según dijo González Mendívil, ha permitido resolver más rápido las averiguaciones previas e incrementar en al menos 30 por ciento el número de expedientes consignados ante órganos del Poder Judicial.
-ƑCuál es su proyecto de procuraduría?
-Es un proyecto integral que tiene como meta central incidir en las áreas operativas.
"Lo primero será instalar unidades de recepción de denuncias para evitar retraso en la integración y deslindar de manera casi inmediata si se trata de casos de tipo penal o no, a fin de evitar que se conviertan en una especie de agencias de cobro y donde cualquier deuda se pretenda cobrar en la vía penal.
"El complemento de esto es ya no tener agencias todólogas. Por ello ya iniciamos con la especialización en algunos delitos como secuestro, desapariciones forzadas, violencia intrafamiliar, delitos sexuales y de tránsito; pero se van a crear algunas otras de este tipo.
"Pero lo más importante está en el cambio de la estructura de la Policía Ministerial. A ese cuerpo necesitamos educarlo para que aprenda a investigar delitos.
"Es una policía que ha crecido y se ha formado como una corporación de presencia en la calle y en sistemas de trabajo que no son propios de la investigación y, aunque hemos obtenido buenos resultados en términos genéricos, aún se puede mejorar mucho más. Vamos también por la especialización policial".
-ƑQué pasa con los policías que tienen actualmente?
-El modelo actual está agotado en términos policiales, y necesitamos inventar otra cosa, restructurar y repensar. La propuesta que tenemos es que sean formados a partir de la combinación de la práctica y la teoría.
"Por ejemplo, actualmente los cursos en lo general duran de tres a cuatro meses, incluso en la Federación, y luego los sacan al trabajo y eso tiene dificultades inmediatas, porque por muy bueno que haya sido el curso, cuatro meses no te hacen policía.
"El policía se hace trabajando la mayoría de las veces. Creo que esto sí se lo podemos aprender a otras corporaciones policiacas de naciones como España, Inglaterra y Francia, que los mandan a trabajar a cierto nivel y luego los reincorporan a la academia.
"Otro punto importante en este proyecto es que antes de empezar la formación policial se pondrán en marcha mejores controles. Pero junto con esta situación hay que ver la cuestión económica, hay que pagar mejor, y en eso se está trabajando ya."
Directo, Oscar Fidel González afirma que no quiere abogados en las filas policiacas. Indica que buscará psicólogos, médicos, de "otras áreas dedicadas a investigar", pero también, reconoce que el cambio que pretende no puede hacerlo de un momento a otro, primero requiere limpiar la corporación.
-ƑQué pasaría con los que hoy son agentes judiciales?
-En este momento la Policía Ministerial se compone de 930 elementos. Doscientos de ellos están dedicados exclusivamente a labores de presencia y de apoyo a la prevención del delito: pueden ser trasladados a la policía estatal preventiva.
"El resto habría que compactarlo para contar con un órgano capaz de ser supervisado. Creo que de los 700 que restarían, si nos quedamos con 500 estaríamos hablando de un cuerpo que puede ser conformado en grupos especializados en teoría y práctica, pero a través de cursos no menores a un año."