Cepeda Licea niega imputaciones, pese a las evidencias
Detienen a agente ministerial en NL; lo ligan con banda de secuestradores
DAVID CARRIZALES CORRESPONSAL
Monterrey, NL, 27 de enero. Javier Cepeda Licea, agente de la Policía Ministerial del estado, que prestó sus servicios en corporaciones policiacas durante 29 años, fue detenido por sus compañeros, acusado de dar protección a una banda que de noviembre a la fecha cometió por lo menos 18 secuestros exprés (los primeros perpetrados en la entidad) al parecer exclusivamente contra mujeres, de las cuales algunas fueron golpeadas y atacadas sexualmente.
Cepeda Licea dijo ser inocente, y argumentó que el 16 de enero, cuando de acuerdo con denuncias supuestamente hizo una llamada telefónica a familiares de una persona secuestrada, se encontraba concentrado en la Academia Estatal de Policía y ahí permaneció tres días antes hasta un día después de la mencionada fecha.
Gerardo Montes, subprocurador de Justicia del estado, informó que Cepeda Licea conformaría una banda de secuestradores con los hermanos María de los Angeles y Gerardo Guerrero Vázquez, a quienes se les acusó de "cuidar" en una casa de seguridad a las mujeres secuestradas, mientras sus familia- res pagaban los rescates, o en su caso les sustraían dinero a través de cajeros automáticos.
Sostuvo el funcionario que asimismo era integrante de la organización delictiva el taxista Enrique Alejandro Flores Rodríguez, quien luego de aparentar prestar sus servicios a mujeres, se internaba en calles solitarias donde las sometía a golpes o con un aparato que emitía descargas eléctricas, para enseguida amarrarlas y amordazarlas.
Las operaciones de los presuntos secuestradores concluyeron la noche del sábado anterior, cuando elementos de la Policía Regia vieron que dentro de un taxi que conducía Flores Rodríguez iba una mujer atada de pies y manos, que presentaba golpes en el rostro.
Luego de ser arrestado, Flores Rodríguez delató al resto de la banda de hampones y condujo a la policía a la casa de seguridad, donde sus cómplices mantenían oculta a otra mujer.
Al publicarse en los medios locales fotografías del taxista, varias de sus víctimas se presentaron a denunciarlo por los delitos de robo, secuestro, lesiones y violación.
Además los afectados relataron que no interpusieron demandas anteriormente pues habían sido amenazadas de muerte y Flores Rodríguez se quedó con documentos de identificación personal que indicaban sus domicilios.