Buscan apoyo entre empresarios para regalar material de construcción a gente pobre

Vivienda, prioridad en los trabajos de reconstrucción tras el sismo en Colima

El secretario de Gobernación viajará hoy a la entidad para declararla zona de desastre

VERONICA GONZALEZ, ERNESTO MARTINEZ Y ANGELICA ENCISO CORRESPONSALES Y REPORTERA

A una semana del sismo de 7.6 grados Richter que afectó, entre otras entidades, a Colima, donde dejó 21 muertos, 500 damnificados y más de 11 mil inmuebles dañados, las actividades cotidianas comenzaron a normalizarse. Sin embargo, el problema de vivienda se agudizó, ya que decenas de familias que perdieron sus hogares debieron refugiarse con parientes; los más afortunados encontraron una casa en renta y la ocuparon, pero los más pobres continúan en los albergues y en las banquetas.

Mientras, la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso) anunció que en coordinación con el Fovissste y el Infonavit apoyará la reconstrucción de las viviendas destruidas, con alrededor de 62 millones de pesos, en los cuales se incluirán recursos del Fondo Nacional de Desastres (Fonden).

Por otra parte, una comisión de senadores y diputados federales visitó colonias afectadas por el temblor en la capital de Colima, así como los municipios de Zapotitlán y Tolimán, Jalisco, para conocer las condiciones en que se encuentra la gente perjudicada y presentar al Congreso de la Unión un informe de "la situación real" en las citadas localidades.

"Queremos expresar a los damnificados nuestra solidaridad y nuestro más sentido pésame a quienes perdieron a un ser querido", dijo el senador panista por Colima, Víctor Torres Herrera.

Entre tanto, el Comité por la Reconstrucción de Colima -que dirige el comerciante Francisco Brun Ramos-, que se creó dos días después del temblor del 21 de enero, pretende captar donativos de empresarios y proveedores foráneos para regalar materiales de construcción y viviendas nuevas a gente de escasos recursos. "Usted sabe que detrás del asilo de ancianos (de Colima, que también sufrió daños) y las iglesias hay patronatos, pero detrás de la gente pobre que perdió su casa no hay nadie", explicó en entrevista Brun Ramos.

Por medio del Fovissste y el Infonavit, la Sedeso destinará 62 millones de pesos para reconstruir las 11 mil 29 viviendas que destruyó el sismo en Colima. La dependencia indicó que según datos oficiales, se perdieron totalmente 2 mil 135 casas habitación, 4 mil 237 tienen daños parciales y "pueden ser habitadas" otras 4 mil 657 que resultaron con "afectaciones menores".

La Sedeso indicó que junto con el gobierno de Colima ubicará a las familias de la entidad afiliadas al Infonavit, así como a las que son susceptibles de contar o tienen crédito de Fovissste o de alguna otra institución, para definir con mayor precisión cómo se proporcionará apoyo a la construcción y rehabilitación de inmuebles. Abundó que se tomará en cuenta el nivel de ingresos de las personas, de tal forma que se determine si les es posible recibir ayuda de organismos como el Fonhapo.

Temor evidente

El sector productivo de Colima tiene problemas. Los estragos del sismo se sumaron a la de por sí precaria situación de los agroindustriales y jornaleros de Tecomán y Armería, que comparten con los comerciantes de la ciudad de Colima, cuyos temores se hicieron evidentes en la junta de trabajo que sostuvieron este lunes con el gobernador Fernando Moreno Peña.

En la reunión, el mandatario colimense afirmó que los damnificados desempleados o con ingresos de hasta tres salarios mínimos recibirán un subsidio del Fonden para reconstruir sus viviendas. "Este es el primer desastre del año y el fondo está completo, así que el subsidio para 5 mil familias está garantizado", dijo.

Moreno Peña anunció que este martes visitará la entidad el secretario de Gobernación, Santiago Creel, para hacer la declaratoria de zona de desastre en todo el estado, ya que en los diez municipios se dañaron viviendas, iglesias y edificios públicos, pero los más afectados fueron Colima, Coquimatlán, Villa de Alvarez, Tecomán, Armería e Ixtlahuacán.

La principal preocupación del sector salud en medio de la emergencia es garantizar la calidad del agua, pues por el sismo "es casi un hecho" que se fracturaron tuberías del drenaje y las aguas negras podrían contaminar los mantos freáticos, explicó el director general de Vigilancia Epidemiológica de la Secretaría de Salud, Oscar Velásquez Monroy.

Por instrucciones del secretario de Salud de Colima, Christian Torres Ortiz, se puso en marcha un programa emergente para monitorear el agua y los alimentos. Con el primero se pretende garantizar la calidad del líquido, usando diez plantas potabilizadoras móviles, y con el segundo se detectará la presencia de bacterias causantes de infecciones gastrointestinales.

Ayer retornaron a las aulas 130 mil estudiantes de preescolar, primaria y secundaria de todo el estado. Solamente permanecieron cerradas 21 escuelas de la capital que dañó el sismo, cuyos alumnos recibieron clases en las instalaciones de la Feria de Colima, mientras que los inscritos en escuelas privadas no laboraron.

En Michoacán, el director de Protección Civil, Carlos Mandujano, informó que se detectaron 31 casas dañadas por el temblor en comunidades apartadas de los municipios de Chinicuila y Coalcomán, que visitará "en las próximas horas" el gobernador Lázaro Cárdenas Batel, para constatar los daños y brindar a los damnificados "el apoyo que requieran".