Hoy se estrena su más reciente trabajo, basado en la novela homónima de Rosa Montero

Lo que pase con La hija del caníbal ya no está en mis manos: Serrano

Injusto que los exhibidores se queden con 50 o 60 por ciento de la taquilla, dice el director

El hacer cine me dio oportunidad de pensar en otras cosas, asegura el actor Kuno Becker

JUAN JOSE OLIVARES

Hoy se estrena con 300 copias La hija del caníbal, cinta que protagonizan Cecilia Roth, Kuno Becker y Carlos Alvarez-Novoa, y que dirige Antonio Serrano bajo la producción de Titán Producciones y Argos, en coproducción con Lola Films y con el apoyo de Imcine.

Para el director, quien tiene a sus espaldas la exitosa cinta Sexo, pudor y lágrimas -de la cual se prepara una versión para la tele- y las telenovelas Nada personal, Mirada de mujer y La vida en el espejo, lo que resta ahora "es enconcharse, protegerse. Lo que me pasa, como a todos los directores, es que cuando estrenamos estamos muy contaminados porque ya hemos recibido demasiada información, hemos visto la cinta demasiadas veces. Siempre me da miedo cuando empiezo a hacer algo nuevo, pero el mismo proceso de creación hace que se me olvide ese peso de haber hecho algo que tuvo éxito. Finalmente me tuve que concentrar en si los actores gritaron de más o de menos; uno no tiene tiempo de pensar en las expectativas, ese es un proceso que ya no está en mis manos. Viene ahora el momento de la reacción, de la cual uno es el responsable, que por un lado sí es importante, pero por el otro, vale madre porque al final es sólo una película."

Serrano, quien en 1990 estrenó Sexo, pudor y lágrimas en teatro (que permaneció 2 años en cartelera), comentó que en la adaptación de la obra de Rosa Montero lo más difícil fue juntar la cuestión detectivesca, anecdótica de la trama con todo el mundo interno del personaje de Lucía (Cecilia Roth), porque finalmente la novela es una aventura externa que conlleva un interior. ''En una novela tienes todas las páginas que te da la gana para poner todo lo que se antoje y en el cine tienes que ser muy sintético".

No obstante, "trabajé con mucha libertad y la autora me apoyó, me dijo que hiciera lo que se me diera la gana, y creo que la cinta sí es otra historia porque hay mucha invención de mi parte."

Aunque en la trama se tocan temas como la corrupción, las organizaciones subversivas, el secuestro y el fraude, La hija del caníbal -que distribuye 20th Century Fox- "no es una denuncia visceral ni tiene ese objetivo (no soy bueno para denunciar), pero lo que se dice en una escena de un secretario de Gobernación es bastante duro, deprimente y real, y en ese sentido está justificada la denuncia."

Dice el realizador no sentirse privilegiado al ser de los pocos que hacen cine en una industria alicaída, pero "afortunado sí, en el sentido de que he tenido respuesta con mis trabajos anteriores, aunque también haya vivido en el fracaso".

Antonio Serrano comentó también sobre la situación actual del cine mexicano. "Ojalá nos vaya bien, debe haber algo en la manera como se reparte la utilidad en el cine, que es absolutamente injusta. Tiene que cambiar si queremos reactivar la industria, porque público ya lo tenemos ganado y es injusto que para que recuperes con una cinta mexicana la tengan que ver 6 millones de personas. Por un lado tiene que haber una mayor ayuda legal, no pueden quedarse los exhibidores con el 50 o 60 por ciento del precio que entra en la taquilla y un peso que nos den está bien, aunque con eso no se solucionará el problema. Los productores deberían tener más acceso a lo que entra en la taquilla porque de verdad está muy caníbal la cosa, es desmedido. Estamos en manos de tres monopolios de exhibidores, como estamos en manos de dos monopolios en la televisión. Vamos a ver cómo se administra ese peso en el club de la corruptela, porque al exhibidor nada más le interesa vender boletos y palomitas".

El proyecto de mi vida: Becker

Por su parte, el protagonista Kuno Becker, para quien es su primer trabajo en el cine, afirma que este proyecto "es uno de los más importantes de mi vida, de mi corta carrera de siete años. No quería hacer cualquier película, deseaba hacer una como ésta. Con gusto hice el casting con otros actores de cine, error que se comete al clasificar a los actores y actrices, que si de cine, que si de tele o teatro. El que es perico... que no quiero decir que lo sea, creo que si eres actor tienes que hacer de todo. A veces pienso que estoy aquí de puro churro. El director desde el inicio del casting quería ver a su personaje sin importarle que el actor estuviera en Televisa, Televisión Azteca, o haciendo teatro. Sin embargo hay que decirlo: las novelas mexicanas son buenas y tienen una proyección que desgraciadamente muchas películas no tienen. Nada es mejor, son diferentes medios. Desgraciadamente está en chino vivir nada más del cine, se tiene que hacer de todo."

Kuno, violinista profesional desde los 17 años, ha participado en alrededor de nueve telenovelas y recientemente fue llamado a compartir créditos con Emma Thompson, Christopher Hampton y Antonio Banderas en la cinta Imaginando Argentina. "Nunca había trabajado con alguien de ese nivel de profesionalismo. Entiendes que hay gente que trabaja en cine porque realmente le gusta. Sin duda, el hacer cine fue relajante y me dio la oportunidad de pensar en otras cosas. Su proceso es muy lento, porque ahora ves un trabajo que hiciste hace diez meses, lo que no pasa con la inmediatez de la televisión, pero así es".