Denunció en la ONU que su país enfrenta un "movimiento subversivo"

Si un referéndum expresa que me vaya, "me voy": Hugo Chávez

Acepta el mandatario el recién formado Grupo de Amigos; insiste en una salida constitucional

Desesperadas e inconstitucionales, las demandas opositoras de elecciones o consulta popular

DAVID BROOKS Y JIM CASON CORRESPONSALES

Nueva York, 16 de enero. El presidente Hugo Chávez llegó a la sede de la Organización de Naciones Unidas con la Constitución venezolana en la mano, sin señales de ceder ante la oposición y retándola para que organice un referéndum revocatorio a partir de agosto, como marca la ley, y prometió que si pierde esa consulta "yo me voy".

Chávez denunció hoy -y declaró que así se lo dijo al secretario general de la ONU, Kofi Annan, y "ante el mundo"- que en Venezuela "enfrentamos un movimiento subversivo", pero que "al igual que el golpe militar de abril de 2002, el golpe petrolero de di-ciembre... fracasó".

Chávez llegó a Nueva York procedente de Quito, adonde asistió a la toma de posesión del nuevo presidente ecuatoriano, Lucio Gutiérrez, además de que participó en consultas con otros países de la re-gión para la formación de un "grupo de amigos" de Venezuela.

Calificó ese hecho como "un paso positivo", pero dijo que de-seaba que otras naciones -mencionó a Rusia, Francia, China y Argelia- se sumaran a la iniciativa.

Después de entrevistarse con Annan, Chávez acudió al programado relevo de la presidencia del Grupo de los 77 (ya participan 133 países), la cual pasó de Venezuela a Marruecos.

La ultraderecha en acción

En conferencia de prensa en la sede neoyorquina de la ONU, el gobernante venezolano reiteró su posición de que la salida a la crisis en su país debe ser por la vía constitucional, y calificó de "desesperadas" e inconstitucional las de-mandas de la oposición para adelantar una elección o referéndum.

Levantando una copia de la Constitución venezolana en la mano, señaló que "es una de las pocas, tal vez la única, que ofrece un referéndum revocatorio", y prometió: "si yo pierdo el referéndum en agosto, me voy".

Acusó a la oposición de estar en manos de la ultraderecha -aunque dijo que hay gente decente a la cual convoca al diálogo-, pero subrayó que aceptar sus demandas sería una "salida extraconstitucional... el equivalente a un golpe".

Agregó que "sacar a un presidente no es como sacar a un pitcher en el beisbol... tiene que ha-ber un procedimiento legal".

El mandatario venezolano califico las maniobras de los dirigentes opositores como "subversión", y en el sector petrolero, dijo, "el sabotaje de esta subversión" había dañado las instalaciones, ya que la empresa pretrolera Petroleos de Venezuela "estaba infiltrada por una quinta columna de traidores de la patria".

Tras indicar que ha sido él quien ha buscado resolver la crisis, recordó que invitó a César Gaviria y a Jimmy Carter para "facilitar" un diálogo entre las partes, así como también ha invitado a la ONU y ha promovido la formación de un grupo de amigos.

Trató de minimizar el impacto de la huelga general en la economía del país sudamericano. "No estamos enfrentando un paro", insistió al sugerir que si uno acude a donde están los trabajadores pe-troleros, siderúrgicos, y del transporte, "no hay paro".

Sin embargo, Chávez pareció contradecirse al señalar que la producción petrolera se había recuperado 33 por ciento, después de que "se partió de cero", sin mencionar que el paro general efectivamente detuvo la producción de crudo.

Acusó a los medios de comunicación privados de alimentar a la "subversión", y dijo que las clases alta y media alta de su país se estaban dejando manipular.

En respuesta a por qué había una expresión tan masiva de oposición, dijo que a consecuencia de la campaña de manipulación de la derecha, sicólogos han considerado que en Venezuela la gente padece de "disasociacion sicótica... enfermedad que hace culpar a una sola persona de todo".

Por lo pronto, se refirió de forma general a una propuesta que circula en Venezuela, al comentar que una elección adelantada sólo po-dría realizarse con una enmienda a la Constitución, pero lo dejó en eso, sin ofrecer una posición.

Mientras tanto, en algunas calles aledañas a la sede de la ONU se suscitaron nuevamente enfrentamientos entre decenas de chavistas y simpatizantes de la oposición.