HOMENAJE OFICIAL A LA PERPETUIDAD
En las dos décadas anteriores disminuyeron ingresos
Echeverría hizo inhumar 12 personas en la plaza; Ernesto Zedillo sólo una
MONICA MATEOS-VEGA
En los últimos 20 años el ingreso de personajes destacados en la Rotonda de los Hombres Ilustres ha disminuido. Mientras Luis Echeverría Alvarez ordenó la inhumación en ese recinto de 12 personas, Ernesto Zedillo llevó sólo a una: Ignacio Chávez (1897-1979), ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Echeverría consideró que merecían ser personajes destacados en la historia mediante su inhumación en la rotonda el científico Nabor Carrillo (1911-1967), el músico creador del sonido 13 Julián Carrillo (1875-1965), el arqueológo e indigenista Alfonso Caso (1896-1970), el maestro universitario Ignacio González (1898-1972), el pedagogo y creador de la Escuela Rural de México Rafael Ramírez Castañeda (1885-1959), el "padre del federalismo", Miguel Ramos Arizpe (1775-1843), el compositor Silvestre Revueltas (1899-1940) y el filósofo Arturo Rosenblueth (1900-1970).
Además Echeverría ordenó la inhumación en ese recinto, en cuanto fallecieron, del pintor David Alfaro Siquieros (enterrado en la rotonda el 8 de enero de 1974), de la escritora Rosario Castellanos (9 de agosto de 1974), del ideólogo del movimiento obrero Rosendo Salazar (19 de diciembre de 1971) y del poeta y diplomático Jaime Torres Bodet (14 de mayo de 1974).
Su sucesor, José López Portillo, ordenó sepultar en la rotonda al político campechano Joaquín Baranda (1840-1909); al creador de la doctrina Estrada, el internacionalista Gerado Estrada (1887-1937); al ingeniero civil Carlos Ramírez Ulloa (1903-1980); al indigenista y creador de la escuela secundaria, Moisés Saenz (1888-1941), y al "educador nacionalista" Gregorio Torres Quintero (1866-1934).
Asimismo decidió que fueran directamente a ese sitio los siguientes artistas que murieron en su sexenio: el músico Carlos Chávez (3 de agosto de 1878), el arquitecto y muralista Juan O'Gorman (11 de noviembre de 1982), el escritor Agustín Yáñez (18 de enero de 1980) y el poeta y senador de la República Carlos Pellicer, quien falleció el 16 de febrero de 1977 y cuyos restos fueron trasladados a la rotonda el 31 de marzo de ese año.
Miguel de la Madrid, con excepción del historiador Jesús Silva Herzog (1893-1985), no enterró en la rotonda a ningún artista o intelectual de su época. Cambió el decreto que rige las inhumaciones en ese cementerio (en particular para establecer que debía pasar por lo menos un año del fallecimiento) y llevó al lugar al militar Leandro Valle (1833-1861), al físico Manuel Sandoval Vallarta (1899-1977), al "insigne marino" Pedro Sainz de Baranda (1787-1845), al "poeta y periodista revolucionario" José María Pino Suárez (1869-1913) y al jurista del siglo XIX José María Iglesias (1823-1891).
Carlos Salinas de Gortari, durante el último año de su gestión (1994), inhumó en la rotonda al astrónomo Guillermo Haro (1913-1988), al cofundador y primer secretario general de la CTM Vicente Lombardo Toledano (1894-1968), al ex diputado, ex gobernador y periodista Francisco Martínez de la Vega (1909-1985) y al militar y escritor Francisco L. Urquizo (1891-1969).
