La isla ha dejado de recibir un millón 500 mil barriles de crudo por el paro en PDVSA

La refinería de Santiago de Cuba, paralizada por la crisis en Venezuela

Una mentira más, que el petróleo enviado por Caracas sea gratuito, puntualiza La Habana

GERARDO ARREOLA CORRESPONSAL

La Habana, 9 de enero. A causa de la crisis política en Venezuela, Cuba dejó de recibir un millón y medio de barriles de petróleo de ese país durante más de un mes, lo que provocó la paralización de una refinería y pérdidas por más de 200 millones de dólares, pero todo el crudo que llegó de esa fuente ha sido pagado según los contratos vigentes, informó este jueves el Ministerio de Relaciones Exteriores.

La declaración desmintió versiones de la oposición venezolana, según las cuales Cu-ba no paga el petróleo. Pero al mismo tiempo dibujó los contornos del golpe que recibe la isla al cerrarse el grifo del crudo al otro extremo del Caribe.

La crisis venezolana es seguida en detalle por los medios informativos cubanos, en un reflejo de la jerarquía que le otorga el go-bierno de La Habana.

La radio y la televisión de la isla caribeña transmiten a menudo discursos íntegros del presidente Hugo Chávez, quien enfrenta una pertinaz ofensiva de la oposición política y sindical, que intenta obligar al mandatario a renunciar.

El corte de suministro de petróleo venezolano de diciembre fue el segundo que sufrió Cuba el año pasado.

A raíz del efímero golpe de Estado de abril del año pasado, una interrupción de cuatro meses causó gastos adicionales de 85 millones de dólares, además de costos internos, indicó la cancillería.

En ambos casos se ha paralizado la refinería de Santiago de Cuba, y el país ha tenido que comprar en el mercado mundial y recurrir a sus reservas domésticas, según informes oficiales.

Entre septiembre y noviembre Cuba recibió 4 millones 444 mil barriles de crudo, por los que pagó 96.4 millones de dólares, añadió el Ministerio de Exteriores.

Este mes se reanudaron los envíos de crudo, con dos embarques, cuyas dimensiones la cancillería no precisó, pero dijo que se trataba de "menos de 5 por ciento de lo exportado por Venezuela" tras el estallido del paro de labores el 2 de diciembre.

"Nuestro país no fue el primero, sino de los últimos en recibirlo", añadió esa secretaría de Estado.

El comunicado repudió por ello la versión del "canal de televisión golpista y fascista Globovisión y otros canales privados venezolanos", según la cual el petróleo del país más grande Sudamérica ha llegado a Cuba en forma gratuita.

El Acuerdo de Caracas

Cuba compra a Venezuela unos 53 mil barriles diarios de crudo y derivados, equivalentes a un tercio de su consumo. El resto proviene de su producción local y del mercado internacional.

La factura petrolera cubana fue el año pasado de aproximadamente mil millones de dólares.

Venezuela firmó en 2000 convenios bilaterales de suministro petrolero con 15 países centroamericanos y del Caribe. El pa-quete se llamó Acuerdo de Caracas y funciona paralelamente al Pacto de San José (1980), por el cual Venezuela y México venden 160 mil barriles diarios de crudo a la misma región.

El Acuerdo de Caracas, firmado por un año renovable, coloca 80 mil barriles diarios de petróleo a precio internacional, en cuotas variables.

Hay un financiamiento a 15 años y uno de gracia, al 2 por ciento anual. La cantidad a financiar se determina según el precio promedio en una escala fija.

El convenio con Cuba del mismo año se basa en ese acuerdo. La cancillería dijo que los términos "son iguales o menos ventajosos que los pactados para el resto de los países", pero las versiones públicas disponibles indican que el contrato de La Habana tiene estas ventajas comparativas:

1) El volumen de combustible se fija por año y trimestre; 2) el convenio es por cinco años prorrogables; 3) el financiamiento es doble, uno de corto plazo a 90 días a 2 por ciento y otro de largo plazo, según el esquema y la escala del Acuerdo de Caracas, y 4) los intereses de los dos primeros años se capitalizan y pasan a formar parte del principal, amparado en pagarés cubanos, que tienen vencimientos anuales a partir del tercer año del convenio.

La cancillería de la isla citó adicionalmente que los planes de cooperación bilateral incluyen servicios médicos y becas para pacientes y estudiantes venezolanos, por un valor estimado en 100 millones de dólares en dos años y contratos subvaluados para 600 entrenadores y técnicos deportivos cubanos.