Se subestima a Pyongyang, dice la prensa estadunidense
Bush reitera flexibilidad hacia Corea del Norte y mano
dura para Irak
AFP
Washington, 6 de enero. El presidente de Estados
Unidos, George W. Bush, reiteró este lunes que no tiene la intención
de atacar a Corea del Norte y que la crisis con ese país puede ser
resuelta de manera pacífica y diplomática, mientras insistió
en que la actitud de Irak es "desalentadora", en declaraciones a la prensa
al término de una reunión de su gobierno en la Casa Blanca.
"Reitero, no tenemos la intención de atacar a Corea
del Norte", declaró Bush, al mismo tiempo que manifestó su
esperanza de que ese país "respete sus obligaciones y su acuerdo
con Estados Unidos según el cual no va a desarrollar armas nucleares".
Explicó que de hecho ya existe un diálogo
con Corea del Norte, porque "pensamos que eso puede ser resuelto diplomática
y pacíficamente".
El
presidente estadunidense no comentó la decisión de este lunes
de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) de
transferir el tema al Consejo de Seguridad de la Organización de
Naciones Unidas, que puede decidir sanciones e incluso autorizar el recurso
a la fuerza si Pyongyang no respeta sus compromisos.
Las diferentes actitudes de Bush ante Irak y Corea del
Norte le han valido críticas de quienes consideran que está
subestimando el riesgo que plantea Corea del Norte.
Tanto Time como Newsweek, dos de los principales
semanarios estadunidenses, se preguntaron este lunes si el gobernante norcoreano
Kim Yong II representa "una amenaza mayor" que la del iraquí Saddam
Hussein.
Por un lado, el gobierno de Bush acumula tropas en la
región del golfo Pérsico para un posible ataque militar contra
Irak, donde hasta el momento los inspectores no han encontrado pruebas
de que desarrolle armas de exterminio masivo. Por el otro, eligió
un abordaje diplomático frente a Pyongyang.
Sin embargo, el propio Bush admitió que Estados
Unidos no sabe si Hussein alberga bombas atómicas y, por el contrario,
afirma que Corea del Norte tiene al menos dos, elaboradas con plutonio
antes del congelamiento oficial de su programa nuclear en 1994. Los norcoreanos
desarrollan misiles de largo alcance que podrían permitirles bombardear
Alaska, Hawai e incluso California, según Newsweek.
Pese a todo, Bush insistió hoy en que Irak "tiene
la obligación de desarmarse", y sobre las acusaciones de las autoridades
iraquíes que afirman que los inspectores de la ONU son espías
de Estados Unidos, estimó que "sumadas a las deficiencias de la
declaración iraquí (sobre armas de dstrucción masiva),
estas acusaciones son desalentadoras para quienes quieren resolver el problema
de manera pacífica".
"Evidentemente, acá se está midiendo con
dos varas", comentó el experto en cuestiones asiáticas del
Hudson Institute en Washington, Robert Dujarric.
Por otro lado, Bush reiteró que la economía
estadunidense es fuerte pero puede serlo aún más si es reforzada
con un plan de reactivación que presentará este martes en
Chicago. El plan prevé importantes reducciones de impuestos, como
la eliminación de las tasas sobre los dividendos corporativos, que
benficiará a inversores y a la bolsa, según la prensa. "Quienes
realizan críticas no han visto el plan", señaló el
presidente, en alusión a las críticas de los demócratas,
según las cuales el plan está destinado a los más
ricos y no ayudará a la clase media.
Precisamente los demócratas presentaron hoy un
plan para reactivar la economía como parte de su estrategia para
cambiar su imagen, deteriorada tras la derrota en los comicios legislativos
de noviembre pasado.
Según sus promotores, la iniciativa busca crear
un millón de puestos de trabajo y estimular la economía nacional
y, entre otras cosas, estipula la extensión por 26 semanas de los
beneficios a los desempleados, que suman unos 800 mil. El proyecto incluye
destinar 30 mil millones de dólares a gobiernos estatales que sufren
una crisis sin precedente en varias décadas, y créditos para
la mediana y pequeña empresas.