La subasta, oportunidad para las instituciones
culturales del país, dice especialista
Pujará Francia por archivos de Breton
El Centro Pompidou busca acrecentar su acervo de 300
piezas del padre del surrealismo
MONICA MATEOS-VEGA
El Centro Georges Pompidou de Arte Contemporáneo
de París, Francia, anunció esta semana que se prepara para
entrar en la puja por la Colección 42 Rue Fontaine, que perteneciera
a André Breton y será subastada en abril por la casa CalmelsCohen
(La Jornada, 14 de diciembre de 2002).
Bruno Racine, presidente del Centro Pompidou, señaló
en una entrevista con el diario francés Le Monde que la venta
de las pertenencias de quien es considerado el padre del surrealismo es
una gran oportunidad para las instituciones culturales de su país:
"debemos estar presentes, de corazón, con el apoyo del Ministerio
de Cultura, con el fin de enriquecer nuestro patrimonio nacional".
La hija de Breton, Aube, informó hace unos días
que decidió organizar la venta pública de todos los objetos
que se encuentran en el que fuera el estudio de su padre y que permanecieron
ahí durante 36 años ''debido a la renuencia de las autoridades
culturales francesas para crear una fundación dedicada al surrealismo''.
El anuncio ''de la dispersión, mediante una subasta,
de los tesoros de la rue Fontaine", ha despertado polémica en Francia:
algunos críticos de arte, y los propios herederos de Breton, dicen
que las iniciativas por conservar junta la colección han fracasado,
mientras otros agregan que la compra o las donaciones de algunas obras
son necesarias.
El Centro Pompidou cuenta ya con 300 piezas de la Colección
42 Rue Fontaine, las cuales forman parte de la muestra La revolución
surrealista, exhibida en París a principio de año y que
actualmente se presenta en Düsseldorf, Alemania. El público
las puede apreciar como si se encontrara frente a una pared del mítico
estudio que Breton ocupó en Montmartre.
Este conjunto de objetos está en vía de
formar parte del acervo permanente del museo francés, pues le serán
donadas a manera de pago al Estado por concepto de derechos de sucesión
en favor de Elisa Breton, viuda del pensador surrealista.
No obstante, tanto Racine como Werner Spies, curador de
la muestra La revolución surrealista, no están del
todo convencidos de fragmentar la colección de la Rue Fontaine y
quedarse sólo con una mínima parte. La subasta, señala
Spies, ''es una oportunidad para que el Centro Pompidou cuente con la totalidad
de los muros del estudio de Breton. Y esto no tiene que ver con un culto
a las reliquias o a un vouyerismo biográfico. El surrealismo no
es sólo un estilo artístico, su perspectiva es múltiple".
Será en el Hotel Drouot donde se mostrará,
durante tres semanas, la próxima primavera, "el museo privado de
André Breton", conformado por piezas que el escritor acumuló
a lo largo de toda su vida y que "cultas o inocentes, anodinas o raras,
sencillas o elaboradas, anónimas o de autores renombrados, engloban
todas las formas de expresión del arte".
La calle Fontaine corre junto a la plaza Blanche, en la
parte baja del legendario barrio de Montmartre, en la capital francesa.
El número 42 señala un edificio que parece un pequeño
teatro estilo art déco. Al traspasar el portal hay un patio,
el apartamento de Breton se ubica en el piso "segundo y medio", como describió
el propio autor en un texto de 1959.
El estudio cuenta con dos piezas principales, no muy grandes,
de techos altos. A excepción del baño, que tiene lavabos
antiguos adquiridos en algún mercado de pulgas, todos los muros
disponibles están cubiertos ya sea de libros, cuadros, figurillas
de Oceanía, Africa u objetos prehispánicos. Debido a la disposición
arquitectónica del inmueble, es prácticamente imposible abrirlo
al público para convertirlo en casa-museo.
El lugar fue conservado por Elisa, la viuda de Breton,
hasta su muerte en 2000. Ella heredó todo a Aube Elléouët,
hija del poeta surrealista y de Jacqueline Lamba.
Aube ha manifestado su interés por que la mayor
parte de la colección de su padre se quede en Francia y, de ser
posible, que sea accesible a todo el mundo. Por eso decidió subastarla
en París, "para que pudieran participar instituciones públicas".
El disco compacto, que se pondrá a la venta en
febrero a manera de catálogo y "a un precio razonable", contendrá
un inventario completo de la Colección 42 Rue Fontaine, "sin menospreciar
las piezas más modestas de esta venta excepcional", además
de una visita virtual al estudio, indicaron Laurence Calmels y Jean-Michel
Ollé, encargados de realizar dicho material.