LOS REMEDIOS

ACUEDUCTO

ALFONSO TELLO DE GUZMAN fue quien inicialmente lo mandó hacer, pues en octubre de 1616 obtuvo una merced de agua otorgada por el virrey Guadalcázar, para abastecer a la ermita de Los Remedios. Al referirse a los sobrantes, en el documento se escribió que beneficiarían a los indios para que regaran sus tierras.

LA CONSTRUCCION DEL ACUEDUCTO de Los Remedios se inició en 1620; se planeó para conducir agua por tubos o caños subterráneos, manufacturados con barro y después cocidos. Para salvar la mayor depresión, se proyectó hacer un sifón, esto es, un conducto cerrado que a la entrada tiene un poco más de altura que a la salida, y eso hace que una vez que se llena, el agua fluya hacia el punto de menor nivel. Al inicio y final del tramo de sifón, se edificó una torre de cantera labrada; popularmente se conocen como los ''caracoles".

ESTAS TORRES DE OCHO METROS de diámetro en la base y 23 metros de altura con nueve cuerpos escalonados son troncocónicas. En su interior se encuentra un conducto vertical para regular la presión y eliminar el aire de la tubería.

SE PENSABA llevar agua desde el manantial de Cimapa, que se encontraba en Tacuba, para abastecer las necesidades del santuario, pero el lugar de destino estaba a mayor altura que la fuente de origen; la obra se suspendió.

MAS DE CIEN AÑOS después, el ingeniero del rey, Ricardo Aylmer, y el maestro mayor de arquitectura, Ildefonso Iniesta, desecharon el sifón, del que se hizo sólo un pequeño tramo, y las torres de oscilación. Iniesta propuso construir un conducto que se sustentaría en la corona de una arquería para llevar el agua y ante la imposibilidad de subirla a la ermita de Los Remedios, se llegaría a un punto más bajo, en sus inmediaciones.

EN MAYO DE 1765, se inició la construcción de la arquería y se terminó en diciembre del mismo año. Esta parte del acueducto se encuentra en San Bartolo Naucalpan, estado de México. La arquería y el conducto son de cantera labrada en bloques rectangulares; el arco más alto es de 16 metros y cada uno salva un claro de 6.70 metros. Las bases de las pilastras son de 2.05 por 1.70 metros; los 50 arcos de medio punto, y los canales de acceso, construidos también de cantera, cubren una distancia de 500 metros. Su costo fue, en aquel tiempo, de 15 mil pesos. Las pilastras que sostienen al conducto están cimentadas en suelo firme, para lo cual se hizo una excavación.

LA PIEDRA ESTA BIEN LABRADA y las finas juntas se hicieron con un mortero de cal y arena. El acueducto es sobrio y armónico. Hoy, los caracoles del proyecto anterior parecen formar parte integral del conjunto. Por fallas de cálculo y aun con las modificaciones, el acueducto nunca entró en servicio. En la actualidad, los asentamientos en los alrededores limitan que se pueda apreciar en todo su esplendor.

EN ESA ZONA SE LOCALIZAN varias canteras; de algunas de ellas se obtuvo piedra para construir edificios en la ciudad de México durante la época colonial.