Los trámites fiscales inhiben donativos:
grupos filantrópicos
Promete Fox revisar política para deducir los
impuestos
Llama el Ejecutivo a ONG a formar una alianza estratégica
JOSE ANTONIO ROMAN
A petición expresa del Centro Mexicano de Filantropía
(Cemefi), el presidente Vicente Fox se comprometió a "revisar a
fondo" los trámites de deducibilidad de impuestos a instituciones
de asistencia privada, con el propósito de facilitar las prácticas
altruistas y de donación de recursos a este tipo de organizaciones.
Al
participar en la sexta reunión anual del Cemefi, reiteró
la "inalterable voluntad" de su administración de trabajar intensa
y decididamente con la sociedad civil. De hecho, dijo, "estamos evolucionando
en la definición de la estructura que facilite la articulación
entre el gobierno y las organizaciones".
El jefe del Ejecutivo exhortó a los grupos de la
sociedad civil a formar una "alianza estratégica" con las autoridades
para atender de manera puntual, como si se tratara de un "traje a la medida",
a cada familia en sus necesidades básicas e indispensables para
superar la pobreza por su propio esfuerzo. Insistió en que la participación
ciudadana es un catalizador del cambio, pues sin ella no entenderíamos
la transición política, y tampoco podríamos ampliar
los espacios de la democracia y de nuestras libertades.
Momentos antes, en un largo discurso, la presidenta del
Cemefi, María Luisa Barrera de Serna, había pedido al jefe
del Ejecutivo impulsar la desregulación tributaria, con el propósito
de facilitar la deducibilidad de los donativos a las organizaciones de
asistencia privada.
Es preocupante, agregó, que el gobierno federal,
por medio de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público,
incremente los requisitos para que empresas y particulares obtengan las
prerrogativas fiscales contempladas en la ley. Se quejó de que actualmente
es necesaria una acreditación para emitir recibos deducibles de
impuestos o para efectuar convenios con cada uno de los donantes y las
fundaciones que otorgan recursos económicos a sociedades humanitarias.
Medidas como éstas no ayudan, y en algunos casos
hasta inhiben de manera importante la participación de los ciudadanos
en la aportación de recursos económicos, que ya de por sí
son pocos, dijo la presidenta del Cemefi, quien recordó que México
ocupa el último lugar en América Latina en la prestación
de servicios humanos y en actividades relacionadas con el desarrollo.
Y, aunque reconoció que en los años recientes
se han multiplicado los fondos públicos que se canalizan a las organizaciones
de la sociedad civil, éstos todavía son insuficientes.
Acompañado por su esposa Marta Sahagún y
el secretario de Educación Pública, Reyes Tamez Guerra, el
presidente Fox señaló que las organizaciones de la sociedad
civil son termómetro del grado de libertad y de democracia en el
país. En el México de hoy se ha incrementado significativamente
su presencia y su acción. Incluso, dijo que prueba de ello es la
eficaz colaboración que estos grupos tuvieron en el triunfo electoral
del 2 de julio de 2000.
El mandatario hizo una presentación de sus programas
sociales y se refirió al asunto del presupuesto para 2003, en el
cual, dijo, la inversión social representa 90 por ciento del gasto
programable y está creciendo 2.4 por ciento. Por el contrario, añadió
que en cuanto al gasto corriente, el porcentaje de reducción es
de 17.4 por ciento, y en programas como el de comunidades indígenas
está creciendo 50 por ciento para el año próximo.
Con todo ello, se trabaja permanentemente para apoyar
y atender las necesidades de las familias más marginadas en el país,
lo cual es una preocupación compartida entre las organizaciones
de la sociedad civil y el gobierno, para poner a las personas en el centro
de sus acciones.