Se reunieron en Quito
Gutiérrez y Noboa negociarán acuerdo stand by con FMI
AFP, DPA Y REUTERS
Quito, 26 de noviembre. El presidente electo de Ecuador, Lucio Gutiérrez, anunció hoy por la noche que junto al mandatario saliente, Gustavo Noboa, negociará un acuerdo stand by (sujeto a condiciones) por 240 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI), tras suspenderse los diálogos hace dos meses.
"Esto es una muy buena noticia; las negociaciones con el FMI (se realizarán) de ma-nera conjunta para llegar a un acuerdo", expresó Gutiérrez luego de sostener una primera reunión con Noboa tras ganar las elecciones del domingo, y agregó: "Eso es muy positivo para el Ecuador".
Gutiérrez llamó hoy a sus compatriotas a "arrimar el hombro" para sacar al país de la "postración en que ha estado durante muchos años", ya que se requiere restablecer la confianza y la seguridad económica ante la próxima transferencia del mando.
Durante una visita a Tena para saludar a su padre y demás familiares, puntualizó que sólo con el apoyo y la decisión de quienes votaron por él, "y de quienes no lo hicieron", Ecuador podrá salir adelante.
El ganador de los comicios en la segunda ronda, un coronel retirado señalado como de tendencia izquierdista que se alió con los sectores indígenas y populares para su triunfo, expresó que "me preocupa cómo hacer que Ecuador pueda llegar a un acuerdo satisfactorio con el FMI y sin que esto presente una convulsión social en el país".
Gutiérrez sostuvo hoy una reunión con el presidente saliente Gustavo Noboa, y con el mandatario electo acudieron a la cita varios ex militares que lo han seguido des-de la revuelta popular, el banquero Mario Lanessa y los dirigentes del movimiento Pachaxutik, Nina Pacari y Miguel Lluca.
El coronel Patricio Acosta, quien formó parte de la comitiva, descartó que éste vaya a ser "un gobierno de coroneles", y añadió que en la reunión con Noboa se dio prioridad a la agenda económica.
En tanto, el presidente George W. Bush llamó a Gutiérrez para felicitarlo y expresarle su respaldo a la democracia ecuatoriana y su deseo de reunirse pronto con él para trabajar en varios asuntos.
También recibió felicitaciones de la Unión Europea y del Frente Sandinista de Liberación Nacional, de Nicaragua, mientras en Colombia la prensa destacaba la actitud "amistosa" del próximo presidente, pero expresaba reservas acerca de su anuncio de colaborar en un proceso de paz.