En Chihuahua, acoso en lugar de investigaciones
Mujeres humildes de Ciudad Juárez, Chihuahua, persisten en la demanda de justicia para sus hijas desaparecidas o asesinadas. Denuncian que la Procuraduría de Justicia del estado, en lugar de investigar los crímenes y desapariciones, "nos acosa, amenaza e intimida".
Guadalupe Zavala, madre de la adolescente Erika Ivone Ruiz Zavala, de 16 años de edad, que desapareció el 23 de junio de 2001 y 23 días después fue encontrada asesinada y semienterrada, dijo: "La faltaban tres dedos de su mano, su cabello se encontraba esparcido en la tumba en que fue semienterrada y se encontraba desnuda".
Norma Ledezma, madre de Paloma Angélica Escobar Ledezma, de 16 años, relató que su hija era estudiante y trabajadora. Desapareció el sábado 2 de marzo de este año y 27 días después apareció asesinada.
"Denuncié la desaparición ante la comandante Gloria Cobos, pero no hicieron nada. El 14 de marzo la Procuraduría de Justicia me dijo que mi hija andaba con un grupo de estudiantes, que estaba feliz, que se encontraba bien. Incluso aseguraron que tenían las placas del vehículo en el que ella se paseaba con su grupo de amigos.
"Mentira. Fueron mentiras, porque el cuerpo de mi hija apareció 15 días después de lo que el procurador me había informado. Y cuando se le hizo la necropsia tenía entre 20 y 30 días de muerta. No hay justicia, nos engañan. El mismo Patricio Martínez, mintió."
La señora Hortensia Enríquez, madre de la joven Erika Noemí Carrillo, de 20 años, denunció que su hija tiene casi dos años desaparecida. El 12 de diciembre de este año los cumplirá. Salió de su casa al mercado Zarco a cortarse el cabello y ya no regresó.
Las tres mujeres, durante una conferencia de prensa en la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, demandaron justicia. (VICTOR BALLINAS)