Se le considera probable responsable de defraudación
fiscal por más de $90 millones
Nueva orden de aprehensión contra David Peñaloza:
Hacienda
La querella fue formulada por la Procuraduría
Fiscal de la Federación por ocultar información
Fue detenido por evadir pago de impuestos un socio del
Buró de Investigaciones y Seguridad
ISRAEL RODRIGUEZ
La Secretaría de Hacienda informó que se
libró una nueva orden de aprehensión en contra de David Peñaloza
Sandoval, por ser probable responsable de la comisión del delito
de defraudación fiscal por un monto actualizado que asciende a 90
millones 661 mil 397 pesos.
Peñaloza Sandoval se encuentra detenido en España
desde el pasado 29 de agosto, con base en una solicitud de extradición
internacional formulada por el gobierno de México, al existir en
su contra una orden de aprehensión por otro delito conocido como
fraude genérico en perjuicio de Nacional Financiera (Nafin) por
la cantidad de 29 millones 500 mil dólares estadunidenses.
David
Peñaloza es presidente del consejo de administración de la
segunda compañía constructora más grande de México,
Grupo Triturados Basálticos y Derivados (Tribasa), titular de gran
número de concesiones de autopistas de peaje, administración
de servicios públicos, ferrocarriles, puertos y aeropuertos, además
de haber obtenido el contrato para la reconversión de la refinería
de Petróleos Mexicanos en Cadereyta, Nuevo León.
Prófugo desde diciembre de 2001, Peñaloza
Sandoval fue requerido por el presunto fraude en contra de Nafin, pero
nunca había sido citado por el gobierno mexicano pese a que su empresa
llegó a acumular más de 2 mil 739 millones de pesos en impuestos
por pagar durante 2001. Tampoco se le requirió el pasado 26 de marzo
de este año cuando a su empresa se le notificó la sentencia
de concurso mercantil promovida por seis bancos nacionales y extranjeros.
Tras haber figurado en la revista especializada Forbes
como uno de los hombres más ricos del mundo, con una fortuna mayor
a mil 100 millones de dólares, y haber sido beneficiado por los
gobiernos de Carlos Salinas y Ernesto Zedillo, ahora enfrenta una nueva
orden de aprehensión por defraudación fiscal.
Con base en la nueva orden de detención, el gobierno
mexicano ha solicitado al de España una ampliación de la
solicitud de extradición de David Peñaloza, pues en México
será sujeto a otro proceso penal.
El segundo tribunal unitario en materia penal en el Distrito
Federal libró la orden de aprehensión dentro del toca penal
261/2002, derivado de la causa penal 32/02 seguida ante el juzgado décimo
cuarto de distrito de procesos penales federales en el Distrito Federal,
por ser probable responsable del delito de defraudación fiscal.
Lo anterior tiene como base una querella formulada por
la Procuraduría Fiscal de la Federación (PFF), por ocultar
la situación fiscal de la empresa Coordinación Aplicada,
en la que fungía como presidente del consejo de administración,
al aprobar la disminución de pagos provisionales no efectuados que
se consignó en su declaración fiscal.
La Secretaría de Hacienda indicó que esta
fue una acción en coordinación con la PFF y el Servicio de
Administración Tributaria (SAT), la Procuraduría General
de la República, a través de la Agencia Federal de Investigación,
para combatir la evasión fiscal y eliminar la impunidad.
Por otra parte, también se informó sobre
la aprehensión de José Luis Falcón Martínez,
secretario del consejo de administración y socio de la empresa Buró
de Investigaciones y Seguridad, por presunta evasión fiscal por
110 millones 158 mil 150 pesos.
La empresa Buró de Investigaciones y Seguridad,
con domicilio en Tlalnepantla de Baz, estado de México, se dedica
a la prestación de servicios de asesoría, consultoría
técnica, jurídica y administrativa a personas físicas
y morales especialmente en materia de prevención y control de riesgos
y pérdidas.
Esta acción se realizó con base en los datos
y documentos aportados por el SAT recabados durante la visita domiciliaria
que se le practicó a la empresa, mismos que permitieron acreditar
que el contribuyente consignó en las declaraciones anuales complementarias,
correspondientes a los ejercicios fiscales de 1996 y 1997, un valor de
actos o actividades menores a lo realmente obtenido, dejando de pagar el
impuesto sobre la renta y el impuesto al valor agregado que legalmente
le correspondía, lo que ocasionó un perjuicio en contra del
fisco federal por más de 110 millones de pesos