Cantó sus éxitos y hasta ofreció
una serenata vía telefónica
Revitalizante concierto ofreció Rosana en el
Auditorio Nacional
GABRIEL LEON ZARAGOZA
Como una revitalizante dósis de vigor de fin de
semana se puede calificar la presentación de la española
Rosana, quien con su canto de neotrova elevó los ánimos de
cientos de personas que acudieron a su única presentación
en el Auditorio Nacional.
Irradiante
de ánimo y vestida de la pureza humana que ofrece el color blanco,
Rosana ofreció dos estupendas horas de recital con los temas que
el público mexicano le ha demandado hasta la locura de su trilogía
discográfica (Luna Rota, Luna Nueva y Rosana).
Sólo bastó una quincena de temas para que
el público, predominantemente femenino, sellara el nombre de la
ibérica en sus corazones con melodiosas y ocasionalmente repetitivas
formas de hacer música de la artista.
Apoyada en la música pop, aderezada de chispas
del sesentero rocanrol y letras un tanto light, Rosana interpretó,
en indistintos momentos del concierto, dos de sus temas en los pasillos
de la parte baja del Auditorio Nacional.
La velada incluyó una romántica serenata
telefónica ofrecida por la española, cuando una chica del
auditorio le extendió su móvil para que estrofeara una bella
canción.
De brincos y bailes, de pitos y percusiones se envolvió
el auditorio con una hora y 45 minutos de recital y dos alegres encores
de 20 minutos cada uno.
La mosca en la sopa la ofreció la apertura del
concierto por parte de la artista del reality show La Academía,
Estrella, quien se hizo acompañar de pistas musicales y un grupo
de regios que, en conjunto, decepcionaron pese a los vítores que
recibieron.