Proponen presupuesto de 14 mil 100 millones de pesos en 2003 para el programa

La mayoría de beneficiarios del Procampo utiliza el apoyo para gastos familiares

MATILDE PEREZ U.

En el agro hay mucha pobreza, aunque también se tienen algunos proyectos exitosos que deben seguir impulsándose, afirmó el coordinador del Programa de Apoyos Directos al Campo (Procampo), Juan Antonio Fernández Ortiz, quien dio a conocer que los productores con menos de cinco hectáreas recibirán mil pesos por hectárea en 2003, mientras que el resto tendrá 975 pesos por cada una.

Al presentar una evaluación de los resultados del Procampo al tercer trimestre fiscal, Fernández Ortiz comentó que el proyecto del gobierno federal es establecer un presupuesto multianual para el agro, y como ejemplo de ello están los apoyos que se entregan por medio de dicho programa.

De aprobarse el presupuesto solicitado para el Procampo, el programa podría presentar una variante el próximo año: 190 mil campesinos (de un total de 2.8 millones beneficiados) que comercializan su producción podrán optar por recibir el apoyo llevado a tonelaje.

Explicó que los productores que posiblemente acepten el pago de Procampo por tonelaje serán aquellos que tengan mayores rendimientos, porque invirtieron en tecnificación y en la compra de insumos; el apoyo adicional saldrá del presupuesto destinado a comercialización (de apoyos a los cíclicos). "Es una medida para que el productor que crea lograr rendimientos mayores al promedio encuentre un apoyo para hacer una inversión mayor. Este es un arranque para incentivar la productividad y considerar el ingreso del agricultor compensado con el Procampo y con los apoyos a la comercialización".

La propuesta de presupuesto para 2003 de dicho programa es de 14 mil 100 millones de pesos, y el apoyo por hectárea será de 905 pesos, 3.7 por ciento más que el que se entregó en este año. Agregó que 70 por ciento de los beneficiarios utiliza el subsidio para gastos familiares, y sólo 30 por ciento lo invierte en sus actividades productivas, además de que los productores que reciben el apoyo tienen una edad promedio de 58.5 años, y 25 por ciento de ellos no saben leer ni escribir. "Es una realidad lacerante", dijo.

Al realizar un comparativo entre la situación de los agricultores estadunidenses y los mexicanos, el coordinador de Procampo aseguró que los nacionales tienen apoyos suficientes. La diferencias entre ambos no son tanto los recursos, sino el tamaño de los mercados y de la población que se dedica a las actividades primarias.

En el caso de Estados Unidos, agregó, la población rural es de 6 millones, mientras que en México es de 29 millones. En el país del norte cada agricultor cultiva 31 hectáreas en promedio, y en el territorio nacional sólo una. Los estadunidenses producen 998 millones de toneladas, y los mexicanos obtienen 92 millones de toneladas.

La intención no es "sacar a la gente del campo", sino darle otras opciones de producción, porque los subsidios no alcanzan", acotó. Insistió en que 82 por ciento de los beneficiarios del Procampo tienen menos de cinco hectáreas, es decir, la mayoría tiene una agricultura de autoconsumo. "Este gobierno no pretende llegar a los estándares de población rural como los que tienen Estados Unidos, Canadá o los países europeos, sino que ya no siga creciendo la población que depende del agro".

Hay que reconocer que en el país existen tres tipos de campo y de agricultores: los de subsistencia, los medianos con potencial productivo y los que comercializan su producción, y por eso la política del gobierno se enfocará -abundó Fernández Ortiz- a una integración de los subsidios, lograr un presupuesto multianual y fomentar las coberturas y seguros.