Sin incidentes, siguen llegando los participantes al Foro Social de Florencia

Círculo vicioso sin escape, la deuda de los países pobres

Los debates del encuentro buscan coordinar mejor la resistencia contra la globalización

Combinar una nueva generación política con movimientos sociales disímiles, el desafío

AFP Y DPA

Florencia, 7 de noviembre. La apertura de los debates y seminarios en el primero Foro Social contra la Globalización comenzó con la denuncia del creciente endeudamiento para los países pobres como un ''círculo vicioso sin escape posible'', pues ''los países ricos utilizan estas deudas como instrumento de chantaje'', dijo una de las oradoras.

El problema de la deuda externa tiene como consecuencia rebeliones por hambre y una creciente pobreza en Africa, Asia y América Latina, y ''Europa desempeña un papel decisivo en este juego'', afirmó la mujer ante miles de críticos de la globalización.

A pesar de que la policía italiana impidió la entrada por las fronteras de más de mil 300 activistas, en su mayoría jóvenes, por temor a que provoquen disturbios, especialmente durante la manifestación contra las amenazas bélicas a Irak que tendrá lugar este sábado, a las primeras mesas de discusión arribaron unos 15 mil activistas antiglobalización, pertenecientes a 400 organizaciones.

Además, este jueves continúo la llegada de militantes. ''Entre 23 mil y 24 mil personas se han inscrito al foro y la gente sigue llegando'', expresó un encargado del centro de recepción instalado cerca de la estación de trenes, donde una fila de 600 personas esperaba para registrarse.

Hasta ahora ningún incidente ni acto de violencia se ha registrado en esta ciudad célebre por sus monumentos renacentistas, que ahora luce como una Torre de Babel, invadida por jóvenes de diversas nacionalidades, muchos provenientes de América Latina, con la mochila a cuestas y pancartas enrolladas.

Mientras, la policía vigila con ''discreción'' los más de 500 lugares que podrían ser atacados por los activistas, aunque los 6 mil elementos policiacos recibieron orden de no usar armas.

Los trabajos de discusión que se desarrollan en este encuentro tienen como fin coordinar mejor el movimiento de resistencia contra la globalización neoliberal y construir ''otro mundo'', pacifista y justo, señalan sus organizadores.

''Estamos al comienzo de un ciclo de radicalización y movilizaciones, un poco como en los años 60'', refirió Christophe Aguiton, responsable de las relaciones internacionales Attac-Francia.

''El problema es combinar una nueva generación política con los diferentes movimientos sociales, sindicales, con las organizaciones no gubernamentales (ONG), que trabajan desde hace años. Ese es el gran desafío de este foro'', agregó el militante mundial que solicita un impuesto a las transacciones financieras internacionales.

Entre las demandas de las organizaciones contra la globalización también figuran la anulación de la deuda externa de los países del Tercer Mundo, que muchos siguen pagando pero que aumenta irremediablemente, la protección del medio ambiente, el respeto de las libertades individuales, y el derecho a tener acceso a la salud y educación.

Otras de las grandes reivindicaciones es la lucha contra el racismo y la oposición a la guerra, en particular, al conflicto con Irak, por lo que se ha convocado a la gran marcha pacifista del sábado.

''Mucha gente en el mundo está contra la guerra, hay que actuar unidos'', aseguró el inglés Chris Nineham, del movimiento Stop the war coalition.

''Hay que crear una coalición de fuerzas en el mundo que reúna a los sindicatos, los anticapitalistas, ONG, la izquierda, movimientos por la paz y la comunidad musulmana'', explicó.

El problema palestino también está presente. ''No puede haber paz en Palestina sin justicia y sin tierra'', aseguró Patrizia Rossi, de la Unión Democrática Arabe-Palestina.